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El rubio miel estaba recostado al lado de la castaña mientras esta dibujaba pequeños círculos en la cabellera del rubio.
El silencio era tan cómodo y tan pacífico para ambos, la castaña plantó un beso en los labios del joven, quien correspondió rápidamente, y después de unos cuantos segundos la castaña estaba sobre el regazo del rubio.

Las manos de Rose se encontraban estancadas en la cabellera rubia de Jasper, y las frías manos de éste se encontraban pegadas a las caderas de la castaña.
El calor del cuerpo de la castaña inundó fuertemente el cuerpo del rubio, las luz de la luna alumbraba perfectamente la habitación de Rose.

Y cuando todo subió de tono los fríos labios de Jasper bajaron estrepitosamente al cuello de Rose, quien se regocijó en placer ante el frío tacto en la caliente piel nieve que la caracterizaba.
Los suspiros ahogados de ambos era la única melodía que sonaba en la habitación de Rose, y la penumbra del cuarto les parecía encajar perfectamente con esa noche.
La larga melena castaña cayó perfectamente en la espalda ahora desnuda de la muchacha, quien suavemente fue recostada por el rubio en las suaves y frescas sábanas.
En algún momento las prendas en los cuerpos de ambos sobraron y se deshicieron de las que les estorbaban.
Los labios del rubio miel recorrieron suavemente cada parte del cuerpo de Rose, quien no podía dejar de soltar un par de suspiros ahogados a cada suave toque de Jasper, quien estaba disfrutando aquél momento con toda su alma.

Y los cálidos labios de Rose también recorrieron todo el frío cuerpo de Jasper, y después de un par de caricias más, los toques más ardientes habían llegando, dejando una muy fina capa de sudor en el delicado cuerpo de la castaña.

—Jasper —suspiró apenas pudo la castaña— Voy a... —ambos estaban a punto de alcanzar el punto más alto—.

La muchacha sintió cómo su cuerpo fue lleno de aquella sensación de éxtasis, y cómo aquel líquido caluroso recorrió sus entrepiernas de manera paulatina y complaciente.
Rose soltó un suspiro de regocijo seguido de una sonrisa cuando cerró sus ojos y los frescos labios de Jasper tocaron los suyos.

—Te amo —la dulce y suave voz de Rose encantó e hipnotizó a Jasper como la primea vez—.

—Yo te amo aún más —dijo el rubio para después acurrucarse al lado de la castaña—.

Los ojos de Rose se cerraron lentamente quedándose dormida, lo que enterneció a Jasper por completo.



(...)



Bella y Rose miraban atentas el partido de béisbol de los Cullen.

—De acuerdo —dijo Esme— batea —.

Alice Permanecía erguida, aparentemente inmóvil. Su estilo parecía estar más cerca de la astucia, de lo furtivo, que una técnica de lanzamiento intimidatoria. Sujetó la pelota con ambas manos cerca de su cintura, luego, su brazo derecho se movió como el ataque de una cobra y la bola impactó en la mano de Jasper.

—¿Fue un strike? —preguntaron Bella y Rose al mismo tiempo atrayendo la mirada de Esme—.

—Si no la golpean, es strike —contestó la mujer de cabellos caoba—.

Jasper lanzó de nuevo la bola a la mano de Alice, que se permitió con una gran sonrisa antes de estirar el brazo para efectuar un nuevo lanzamiento.
Esta vez el bat consiguió golpear la pelota; el chasquido de la bola fue atronador, la pelota sobrevoló el campo como un meteorito para ir a perderse en lo profundo del bosque circundante.

'Til The End Of Time - Jasper Hale. [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora