banshee➨ j. hale

XXIX─ You're back

Aún estaba en sus brazos. No quería soltarlo, no quería dejar de abrazarlo. Él no quería dejar de sostenerla, no quería que se apartara. No quería volver a perderla.

Separó su rostro de el hombro de Jasper y lo miró. Por aún abrazar su cintura con sus piernas llegaba a estar centímetros más arriba que él.

Lloraba a mares, apenas se había percatado que lo hacía. Jasper la observó con atensión, sus manos sosteniendo sus muslos para evitar que cayera.

─ Estas aquí ─ Sollozó la pelirroja uniendo sus frentes mientras cerraba sus ojos, él no podía dejar de mirarla, aún no creía aue estuviera ahí.

─ Tú estas aquí ─ Susurró besando sus lábios.

La había extrañado, la había necesitado más de lo que se imaginaba. Sus lábios se movieron con delicadeza sobre los de ella, cuando Lydia le correspondió aceleró el beso a uno más desesperado hasta que la banshee se quedó sin oxígeno.

Lo miró a los ojos tomando su rostro en sus manos y rió con felicidad, el Hale no podía dejar de sonreír.

─ Mierda, Jasper ─ Rió ─ Que me pegué un tiro por ti, ¡eso es de locos!

El nombrado soltó una carcajada dejándola con delicadeza en el suelo.

─ No hay nada que no hiciera por ti tampoco, Rose ─ Dejó su mano en su mejilla y la acarició con dulzura.

─ Lydia, ahora es Lydia ─ Sonrió llevando su mano hasta la de el vampiro y sosteniéndola ─ No sabes cuanto te he extrañado.

─ Yo también lo he hecho, Lydia ─ Probó su nombre en sus lábios, no sonaba mal ─ ¿Vamos? Estoy segura que el resto quiere verte.

Asintió colocándose de puntillas y dejando un casto beso en sus lábios. De la mano caminaron por las veredas hasta la carretera donde subieron a el auto de el inmortal. No soltaron la mano de el otro en ningún momento.

Cuando llegaron, Lydia bajó emocionada. No solo había extrañado a Jasper, también a el resto de los Cullen. Incluso abrazaría a Edward, pues por todo lo ocurrido no había tenido oportunidad.

Cuando llegaron a la sala fue cuando soltó la mano de Jaz por más tiempo.

Corrió a Rosalie y le dio un gran abrazo.

─ ¡Estas viva! ─ Sonrió la rubia correspondiéndole el abrazo.

─ Ustedes estan de vuelta ─ Rió la pelirroja separándose de el abrazo ─ ¡Estoy tan feliz de que volvieran! Nada ha sido lo mismo sin ustedes.

─ Yo tengo una gran curiosidad por saber qué te sucedió todo este tiempo ─ Apareció la voz de Emmett.

Lyds exclamó con emoción y corrió a el vampiro para abrazarlo de igual forma. El Cullen la elevó de el suelo con un solo brazo mientras reía. Jasper sonreía cruzado de brazos recostado de la pared.

─ Es bueno tenerte de vuelta ─ Comentó Esme llegando hasta ella, la chica no dudó en abrazarla.

─ Lo mismo digo ─ Murmuró separándose de la vampira. Seguidamente abrazó a Carlisle.

─ Sigo con una duda de qué has estado haciendo todo este tiempo ─ Emmett sonrió recibiendo un codazo de su esposa ─ ¡Ey!

Lydia rió llegando hasta Jasper y tomando su mano, él sonrió aún más ante el gesto.

─ Salvarle el trasero a Bella ─ Emmett rió ante sus palabras ─ Ver series con Castiel...

─ ¿Ya sabes que es un ángel? ─ Preguntó Alice ladeando su rostro ─ De otra forma no le llamarías Castiel.

─ Sí, ya lo sé todo ─ Se encogió de hombros ─ Entrenar con Magnus...

─ ¿Entrenar? ─ Jasper frunció su ceño.

─ ¡Sí! Y soy muy buena, a este punto le puedo patear el trasero a Emmett.

El mencionado soltó una carcajada.

─ Ya quisieras, niña.

─ Fui atacada por un niño vudú, salvar el trasero de Bella, ¿esa ya la dije?

─ Nos quedó claro ─ Se burló Rosalie.

─ Ahora mi nombre es Lydia Martin ─ Se presentó.

─ ¿Y cuando estuviste...?

─ ¿Muerta? ─ Completó por Carlisle ─ Estuve en un lugar extraño, muy parecido a un manicomio. Ahí había una mujer llamada Meredith, ella era una banshee pero fue asesinada por los Volturi hace muchos años. Me enseñó mi historia, mi capacidad, mi poder y formas de utilizarlo. Me advirtió sobre otras criaturas, me enseñó cosas.

─ ¿Notas alguna diferencia desde que moriste? ─ Preguntó esta vez Esme.

─ Muchísima ─ Contestó sin dudar ─ Ahora escucho voces todo el tiempo, menos cuando Magnus está cerca, pero solo son voces de pena. Cuando alguien va a morir son más fuertes y usualmente me guían a algún lugar, pero todo son pistas que me puedan guiar hasta la persona que morirá. También veo cosas y escucho otras cosas que antes no.

─ ¿Tienes algún poder super cool? ─ Preguntó Emmet con emoción.

─ Te lo muestro si quieres ─ Sonrió con malicia.

─ ¡Claro!

Sonrió aún más separándose de Jasper y caminando hasta unos metros de el castaño.

─ Rosalie, creo que es mejor que salgas de su lado ─ Recomendó, la vampira asintió alejándose.

─ Que miedo me das ─ Se burló Em cruzándose de brazos.

─ No creo que sea buena idea ─ Le dijo Carlisle al saber el poder que poseía una banshee.

Se colocó en posición. Sus manos viajaron a los extremos de sus hombros. Sintió el poder correr por cada célula de su cuerpo y el picor en su garganta.

Abrió su boca y dejó el grito salir de lo más profundo de su garganta y guió las ondas con sus manos hasta Emmett. Todos cubrieron sus oídos mientras el vampiro salía expulsado contra el cristal rompiéndolo y cayendo dos niveles abajo fuera de su hogar.

Respiró agitada con una sonrisa bajando sus manos y reincorporándose.

─ Por retar a una banshee, pendejo.

──────ミ𖤐₊˚. ──────

Holaaaa, aquí tenemos un capítulo de introducción a la tercera parte de este libro ♡

Se viene lo bueno, se los prometo ;)