Los nervios estaban a flor de piel, estaba a punto de hacer una de las cosas mas simples para cualquier persona, pero para alguien con los "problemas" que ella tenia, no existía lo simple, y eso le frustraba por que loan lo entendía, se sentía ridícula, quien diría que hablar con tu madre seria tan difícil...
Debía apresurarse, el tiempo no perdona a nadie, y mas si tu madre es una ejecutiva de una importante empresa de electrodoméstico.
-¡Mama, espera! p-p-por favor- Exclamo loan al borde de otro ataque, posiblemente sus ganas por obtener respuestas eran mayor a su ansiedad.
-¿Mmm? ¿pasa algo hija?- Pregunto lori dándole la cara.
-A-antes de que te vayas, necesito h-hablar contigo s-s-sobre algo...- Apenas dijo con timidez, entrelazando sus dedos para poder calmarse un poco.
-¿Justo ahora? por que mejor no esperas a que llegue en la noche, tengo demasiado que hacer- Hablo en tono neutro y leve fastidio.
-Por favor, t-te juro que n-no te quitare mucho t-tiempo, s-solo unos minutos... por favor mama- Suplico Loan. De no haber sido por esto ultimo, lori quizás habría mantenido su monótona y fría actitud, tenia una debilidad por loan, y como no si era su preciada niña.
-Esta bien... solo espero que si sea urgente loan- Cedió ante la petición, con un suspiro y una ceja alzada.
Se dirigían a la sala de estar, loan debía de ser clara, rápida y precisa sino quería hacer sentir a su madre que estaban perdiendo el tiempo. Su ansiedad aumentaba a mayor velocidad, sus dedos comenzaban a sudar y a sentirse algo acalambrados por la presión que estos mismos se ejercían entre ellos.
Una vez sentadas, madre e hija se dispusieron a charlar, lori tenia un extraño presentimiento, muy pocas veces tenia comunicación con loan y generalmente era ella quien trataba de iniciarlas, pero su hija era muy renuente a estas, casi asustadiza... a lori le dolía y frustraba el hecho de que su niña le tuviese miedo, a pesar de que no se le notara por esa gran coraza en sus emociones.
Pero tal vez, ella aun no perdía la esperanza de que eso cambiase algún día.
-Mama y-yo, últimamente... he estado t-teniendo sueños raros, con un h-hombre albino- Confeso loan observando de reojo a su madre, esta solo quedo petrificada ante eso, decir que sus ojos quedaron como platos no era una exageración. Loan había empezado a preguntarse si esto fue un error.
Pero quiso seguir, ser valiente por una vez en la vida, no le viene mal a nadie cierto?
-T-también hay mas, una n-niña rubia, ese hombre l-la llamaba p-por mi nombre...- Esto fue casi un susurro, el cual no paso desapercibido para lori.
-¿M-mama, me estas e-escuchando?- Pregunto nerviosa y extrañada. Casi se le vino a la mente la idea de agitar su mano enfrente de la cara de lori, solo que el miedo fue mayor.
-Eeeh si... h-hija, es solo que tienes unos s-sueños muy raros jaja- alego lori con leve nerviosismo. Por un segundo loan creyó que su dura madre estaba intentando hacerse la tonta... eso si la haría dudar de su estabilidad mental.
Loan podía padecer de problemas, pero si de algo estaba segura es que no era una idiota, lori parecía estarce asustando y ya solo faltaba la cereza del pastel.
-¿M-mama, por que nunca me hablas sobre mi papa?- Pregunto con todo el valor que pudo, era algo que tenia que sacarse del pecho.
No hubieron respuestas, solo nervios. la actitud de lori ahora podía confundirse con la de su hija en un día cualquiera. Las ganas por revelar aquel sucio secreto se hacían mas evidentes, pero no podía, gracias a una extraña promesa. Tenía que salir de allí, no podía soportar la presión que loan ejercía sobre ella.
Mientras tanto, una figura baja y albina se mantenía escuchando la conversación. Al principio no tenia la intención, dejarlo pasar e irse era su idea, pero una vez que escucho la palabra "papa" por parte de su "prima", una extraña curiosidad se apodero de ella.
"Padre", una palabra que simplemente odiaba y le producía asco.
-Que carajos...??
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Like a Stone
Hayran KurguLincoln lo sabia, desde el 1er momento supo que algo no andaba bien en lo mas profundo de su subconsciente, y a pesar de haber pasado mas de 20 años después, el sentimiento de incomodidad seguía siendo el mismo. Ahora tendrá que tolerarlo multiplica...