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En el tercer día que estaban en la playa y el tercer día en que JiSung estaba en celo, MinHo tuvo que estar constantemente junto al rubio, mimándolo, arropándolo e incluso velando su sueño. Esto provocaba las constantes burlas de HyunJin por lo enamorado que se veía al cuidar del omega.

Pero ese día, MinHo tenía otra cosa en mente. Después de almorzar con los chicos y la familia de su novio, anunció que saldría de casa unas horas, aprovechando que JiSung continuaba dormido.

—¿A dónde irás? Apenas conoces Incheon — HyunJin lo siguió hasta la puerta, observando a su amigo colocarse una chaqueta y sus zapatos.

—Debo hablar con alguien. Vuelvo enseguida. Si JiSung pregunta por mí, dile que salí a la playa o algo así.

—No hagas nada raro... — murmuró el rubio haciendo un pequeño puchero, provocando la risa del mayor.

—Ah, HyunJin... ¿Te parece que vaya con SeungMin? ¿Te sentirías más seguro? — HyunJin negó pronunciando su puchero — ¿Y con MinGi? — esta vez el alfa asintió, sonriendo — Bien, lo llamaré y le diré que me acompañe.

—Me mandas una foto de ustedes juntos para saber que no mientes — MinHo negó divertido, dándole un pequeño abrazo y palmeando la espalda de su amigo antes de salir de casa.

A veces le parecía gracioso lo sobreprotector que podía ser HyunJin, llegando a parecer su madre o incluso su novio, por lo preocupado y a veces celoso que era. En varias ocasiones, cuando lo conoció por primera vez, pensó en que el alfa gustaba de él. Pero cuando iban al bosque y convivían en su forma animal, el lobo de su amigo parecía querer estar bajo su cuidado. Esto lo llevó a pensar que tanto HyunJin como su parte animal se sentían seguros estando con él, como si fuera un hermano pequeño.

Si lo pensaba bien, HyunJin había sido el primer miembro de su pequeña manada, a la que luego se unió su hermanastro, con quien no había hablando hace mucho tiempo, y más tarde, JiSung y SeungMin. A pesar de ser ambos Alfas, MinHo sentía la necesidad de cuidar de su amigo, lo veía como un niño que necesitaba de su protección. Lo mismo sintió al conocer a MinGi.

Esos detalles lo hacían pensar en lo dicho por la bruja blanca, sobre su linaje de Alfa líder. Desde pequeño, le molestaba que otras personas mandaran o intimidaran a sus compañeros de clase, metiéndose en peleas con chicos más grandes al defender a los de su edad.

Suspirando ante sus pensamientos, sacó su celular, buscando entre sus contactos el número de MinGi, llevándose el dispositivo a la oreja al marcar.

¿MinHo Hyung? — se escuchó desde el otro lado de la línea, a lo que el mencionado respondió afirmativamente — ¿Ocurre algo? Es raro que me llame.

Sí, bueno... Necesito ir a un lugar y HyunJin no me dejó ir solo, no confía en mí — sonó dolido en la última oración, pero sonrió al escuchar la risa del alfa más pequeño.

Entiendo. Ahora estoy en casa de YunHo, ¿le molesta que vaya con él?

—Claro que no, de paso vamos por un café.

Genial, le diré a mi omega. Espérenos en la parada del autobús fuera de la casa de los Han, llegaremos en unos minutos.

Aceptando, MinHo cortó la llamada con el menor, retomando su caminar hacia la parada antes mencionada, sacando sus auriculares y conéctandolos a su celular. Aprovecharía de escuchar música mientras esperaba a la pareja.

Tamborileando los dedos en su muslo, murmuraba la letra de Idfc de Blackbear, una canción que había comenzado a escuchar a petición de su hermanastro, quedando fascinado por la letra de la misma, volviéndose rápidamente una de sus favoritas.

❝Blind Eyes❞『•MinSung•』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora