Cómo Entrenar A Tu Dragón (Una historia Diferente) P2

Capítulo 45

/Narra Valka/
  Fuimos lo más rápido a por refuerzos y luego directamente a Berk. Al llegar pudimos distinguir a lo lejos a varios Colaquemantes.

Valka: Llegamos tarde.

Estoico: No mientras siga vivo. Sé que mi gente está ahí y necesitan de mi ayuda. Mientras sigan con vida, no dudare en ir a por ellos.

Valka: *Decidida* Yo estaré contigo, siempre.

  Junto con los refuerzos hicimos un escuadrón y fuimos de frente hacia el enemigo. Estoico se encargó de ir por detrás de la isla y buscar a los aldeanos y trató de ponerlos a salvo.

  Mi gente y yo logramos acabar con varios pero seguían siendo más que nosotros. La situación empeoró cuando llegaron los barcos de los cazadores. Su forma de combatir era distinta, más ruda y directa. Este cambio de seguro se debía a que ahora los cazadores eran dirigidos por Ryker en vez de Viggo.

  Mis amigos y yo luchamos como pudimos. Eres estaba a mi lado sobre su fiel compañero, Garf. Garf era un Canto Mortal y este dragón escupía ámbar, que al congelarse se volvía tan duro como la roca o incluso más.

  Logramos defendernos lo más que pudimos pero seguían siendo más que nosotros.

  Peleamos durante una o dos horas hasta que se detuvieron de repente. Krogan apareció sobre su Colaquemante Ala Titánica. Frenó a su ejército y se acercó a mi con lentitud. Eres y los demás iban a atacar pero yo también los frené. Quería hablar con ellos para ver que podíamos hacer.

Krogan: Valka la Pacífica. Tu nombre tu queda... o no.

Valka: Libera a Berk, Krogan.

Krogan: Danos la ubicación del Alfa o no verás nunca a estos vikingos.

Valka: Sabes mejor que nadie que hacerme enojar nunca fue de las mejores ideas que se les pudo ocurrir.

Krogan: Y tu no estás en posición para resistirte.

  Con un simple chasquido, todo mi mundo se volvió gris mi corazón comenzó a latir a mil por hora. 

  Los hombres de Krogan habían capturado a Estoico y estaban a punto de asesinarlo a sangre fría.

Krogan: ¿En serio creíste que no me lo esperaría? Me preparé por semanas, casi meses, para pelear contra tu hijo. Él es un verdadero dolor de cabeza. Tú no eres tan listo como él, pero también eres una amenaza de temer. Ahora pídele a tu ejercito que se rindan, entreguen sus dragones y quizás puedas tu marido pueda ver otro amanecer.

  Estaba a punto de rendirme cuando un Terror voló cerca de mí. Este Terror voló hacia la parte más profunda de los bosques de Berk. Al principio no entendí que estaba pasando hasta que de repente, una manada de dragones salieron de todas partes y crearon un gran tornado de dragones.

  Gracias a eso, Estoico pudo escapar y junto a Rompecráneos lograron acabar con sus captores y combatir el tiempo suficiente para salvar a su gente. Todos los Berkianos evacuaron hacia los barcos y trataron de navegar lo más rápido que podían. Los dragones empujaban y tiraban de los barcos con fuerza mientras que mi equipo y yo combatíamos para ganar suficiente tiempo para que todos escaparan.

  Por un breve momento, la victoria era nuestra. Estoico seguía en la isla y derroto a decenas de guerreros. Ambos creíamos que eso debía bastar pero fue un error. Drago apareció y apuñalo a Estoico por la espalda con su arpón.

Valka: ¡¡¡¡NOOOOOOOOOO!!!!

  Bajé lo más rápido posible y lo único que pude escuchar de Drago fue...

Drago: Por fin acabé con un cabo suelto. Ahora me falta el niño y podré terminar con mi trabajo.

  Iba a matarlo pero una bola de plasma impactó contra él. Él recibió el golpe de lleno y apenas lo lastimó. Ví hacia arriba y pude ver a Hipo sobre Chimuelo y ambos estaban enojados.

Drago: Por fin.

  Drago chasqueó los dedos y unos Pinzas Mortales aparecieron. Habían cinco de ellos y sobre uno de ellos estaba un hombre delgado.

???: Veo que por fin me encuentro contigo.

Hipo: *Furioso* Desearás no haberlo hecho nunca.

???: Le hablaba a tu dragón.

Hipo: Lo sabemos. Ambos queríamos acabar contigo de una forma muy dolorosa... Grimmel.