Cómo Entrenar A Tu Dragón (Una historia Diferente) P2

Capítulo 56

/Narra el autor/

  Alvin y sus hombres junto a los Berserkers, Defensores, Doncellas y los Berkianos que quedaron y estaban distribuidos por todo el archipiélago, comenzaron a organizar sus tropas hasta que por fin estuvieron listos para el asalto inicial contra los cazadores y conquistadores. En el poco tiempo que tuvieron, Astrid y los jinetes ayudaron a Alvin a entrenar dragones salvajes para los Marginados y demás guerreros. Cuando por fin llegó el día, Alvin y Thornado dirigieron a los Marginados junto a Dagur y Detectivador (un Triple Ataque), quienes dirigian a los Berserkers, para distraer a los cazadores que se encontraban custodiando la isla. Astrid y los jinetes aprovecharon esa oportunidad para acabar con los enemigos desde adentro. Los jinetes usaron la misma estrategia que usaron Patán y Astrid para infiltrarse en la Orilla, fueron bien alto hacia la isla y luego cayeron en picada para que no los vieran venir y atacarlos desde su punto ciego. Valka, Eret y los demas jinetes que fueron dirigidos en su tiempo por Hipo, siguieron a los jovenes para darles apoyo.

  Una vez que los jinetes de dragones se infiltraron de manera exitosa, no dudaron en atacar a los guardias. Siguieron avanzando hasta que por fin lograron derrotar al ejercito principal que custodiaban la isla. Antes de que cayera la noche, Berk fue completamente liberada y ahora sus verdaderos dueños gobernaban sobre ella. 

Astrid: Prepárens sus armas, encierren a todos los cazadores y conquistadores, los usaremos como rehenes, preparen una buena defensa y continuen con el plan. Cuando ellos lleguen, los estaremos esperando.

  Pasaron un par de dias y los Berkianos y sus aliados ya estaban completamente preparados para la guerra. Justo cuando estaban a punto de pensar de que sus enemigos no vendrían, llegaron. Esta vez eran toda la flota de cazadores y conquistadores, tenían a sus dragones preparados, su ejército armado y sus lideres presentes para dirigirlos.

Drago: Entreguenos a sus dragones, bajen sus armas, rindanse y muy probablemente les perdonaremos la vida. Si se resisten encontraremos hasta al último de ustedes y los acabaremos, encontraremos y mataremos a sus hijos quienes estan ocultos y luego despedazaremos a sus dragones frente a sus ojos para que sientan la verdadera desesperacion.

Astrid: Si te atreves a dar un paso más, acabaremos contigo y tu flota de...

  Astrid no pudo terminar su amenaza debido a que algunos barcos explotaron de repente. De la nada un Cremallerus salió volando y junto a él estaban un par de gemelos muy reboltosos.

Brutacio: Cumplimos con nuestra misión, jefa.

Brutilda: Es hora de acabar con estos brutos.

Astrid: No podría estar más de acuerdo con ustedes.

  Tantos los amos de guerra como los Berkianos y sus aliados, comenzaron a atacarse mutuamente. Los jinetes se encargaron de destruir las trampas, atacar principalmente a los arqueros y destruir algunos barcos. Lamentablemente, no pasaron ni más de 10 minutos hasta que se dieron cuenta del tamaño de la flota completa. Los conquistadores tenían un centenar de barcos, si es que no era más, y miles de soldados a su disposición. Las cosas comenzaron a complicarse cuando el Salvajibestia de Drago salió a la superficie y comenzó a atacar a la isla de Berk junto a quienes estaban allí pero justo enfrente se puso una mujer montado un dragon de cuatro alas. La mujer "misteriosa" levantó su arma hacia el cielo, y de las orillas de la isla salio hacia la superficie el Salvajibestia blanco, el Alfa.

Drago: Esperaba con ansias hacer mío ese dragon, ahora me facilitaste el encontrarlo.

Valka: No te permitiremos hacer más daño.

Johan: *Montando un Escaldaron con armadura y drogado* No te permitiremos continuar. La cabeza de ese dragón colgará en mi nuevo barco.

Drago: Luego discutiremos eso, mercenario.

  Drago y su dragón se enfrentaron al Salvajibestia blanco mientras que Valka y Johan se enfrentaron pero ellos no eran los únicos. Astrid se enfrentó a Grimmel mientras que Tormenta protegía a su jinete de los Garras Mortales. Tormenta no podia recibir ayuda de otros dragones ya que estaban ocupados protegiendo la isla o atacando junto a sus jinetes a los enemigos. Una simple Nadder Mortal combatió con ferocidad y resistió lo más que pudo contra sus oponentes mientras que su humana estaba en la misma situación. Astrid atacó con todas sus fuerzas al cazador pero él era más inteligente y fuerte que ella, hasta que la chica dio una mortal hacia adelante y aprovecho el impulso para darle una patada en la cabeza. La patada hizo el mismo movimiento que hace un hacha al decapitar a su objetivo. Esto tuvo tal efecto que logró hacerle un pequeño corte en el rostro de Grimmel, lo que lo enfureció al grado de llamar a sus dragones y hacer que atacaran con mas fuerza hasta que por fin lograron lastimar a Tormenta. La tenian rodeada y la iban a asesinar de no ser por Patán y los gemelos quienes la protegieron. 

  La guerra se estaba poniendo cada vez más intensa al grado de que ya no se podia ni distinguir a los aliados de los enemigos, los barcos ardian y el sonido de las armas era ensordecedor. Poco a poco, la noche comenzó a caer y el fuego junto a la luz de la luna era lo único que iluminaba en el campo de batalla.

  Desde las sombras, dos guerreros rastreros estaban a punto de atacar a los jinetes y sus amigos desde sus puntos ciegos hasta que fueron detenidos.

  Kroggan intentaba proteger a su maestro queriendo derribar a Valka pero fue detenido por Eret y Garf. Kroggan y el Colaquemante junto al Canto Mortal y Eret dieron una pelea muy intensa.

Kroggan: Sal de mi camino.

Eret: No permitiré que vuelvan a lastimar a otro jinete. No pude proteger a Hipo y a sus amigos aquella vez... No permitire que pase otra vez. Protegeré a aquellos quienes me dieron un hogar. Ahora soy un jinete, acabaré con ustedes de una vez por todas.

  Al mismo tiempo, Ryker y Artillería iban a atacar a Berk desde una gran distancia. Artillería disparo pero un gran rayo electrico lo interceptó. Viggo y Chispazo se pusieron delante para proteger a Berk y su gente. Su espíritu de pelea y sus ojos demostraban su seriedad, no mostraban arrepentimiento ni dudas.

Viggo: Hermano ¿Cuantas veces te dije que atacar así no es prudente y mucho menos honorable?

Ryker: ¡Cállate! ¡Ya no eres mi hermano!

Viggo: No me obligues a hacer esto.

Ryker: *Furioso* Te destruire. ¡Eres un fracaso! ¡No entiendo porque somos hermanos!

Viggo: ¿En serio me vas a obligar?

Ryker: Ven a por mi si te atreves.

  La pelea por el poder y la libertad se convirtió es una guerra feroz que podría aniquilar a todos dentro de ella.