Cómo Entrenar A Tu Dragón (Una historia Diferente) P2

Capítulo 18

/Narra Hipo/
  Chimuelo estaba emocionado por ver a más de su raza con él. Estaba tan emocionado que no quería usar su habilidad de Alfa con ellos. Quería convencerlos de manera amable.

  Durante un tiempo ellos estuvieron jugueteando por un buen rato. Heather y yo trazamos la ruta mientras que Astrid cuidaba de nuestros dragones.

  Cuando ya lo decidimos, pusimos manos a la obra. Buscamos de entre los barcos de los cazadores algo lo suficientemente resistente para cargar los huevos y dure todo el viaje. Encontré una capa de piel y una capa de cuero. Las junte a ambas y teníamos algo lo suficientemente resistente para el viaje. Las chicas y yo cargando los huevos y los acomodamos. Al principio los dragones no querían que los tocaramos y fue difícil convencerlos.

  Chimuelo, Cizalladura y las hembras agarraban de cada extremo de la nueva cobija para los bebés dragones.

  Pasamos varias horas volando hasta que por fin llegamos a la Orilla.

  Chimuelo y yo estábamos muy felices.

  Cuando aterrizamos, pusimos delicadamente los huevos en la tierra y la hembras se los lamieron. Luego de un rato, Chimuelo llevó a los demás dragones a la playa. Hizo que se bañaran en el mar y cuando terminó, los chicos ya estaban ahí.

  Heather y Astrid llamaron a los chicos para mostrarles lo que habíamos encontrado.

  Patapez era quien más emocionado se veía.

Patapez: *Emocionado* ¡No puedo creerlo! ¡Más Furias Nocturnas! ¡¡Y encima tienen huevos!!

Heather: Los rescatamos de unos Cazadores y un Destrozacavernas que amenazaba con comérselos.

Brutacio: Eso se oye súper genial.

Hipo: No para los huevos.

Astrid: Tardamos en hacer que los Furias nos siguieran. No confiaban en nosotros.

Patán: ¿Y por qué Chimuelo no uso su modo Alfa?

Astrid: *Sorprendida* Espera ¡¿Chimuelo tiene un modo Alfa?! ¿O sea que podía controlar a los Furias fácilmente.

Hipo: *Molesto* ¿Por qué te sorprende? Se supone que ya lo sabes. Has estado haciendo lo mismo desde el día después de la cita ¿Que te ocurre?

  Luego de decir eso, me fuí con los Furias para poder estar con ellos. Si bien ya habíamos encontrado a unos y otros venían en camino. Todavía sentía que habían más allá afuera, esperando poder salir de las sombras.

/Narra el autor/
  Luego del pequeño espectáculo que dió Hipo, los demás parecían extrañados.

Patán: ¿Todavía no sabe lo de... ? Bueno, eso.

Heather: No se lo pude decir.

Brutilda: ¿Por qué desaparecieron?

Heather: Hipo quería explorar y Astrid y yo pudimos predecir si movimiento. Lo terminamos acompañando y pasaron varias cosas.

Astrid: *Exaltada* Debieron verlo. Hipo acabó con cinco barcos lleno de cazadores él solo. Chimuelo lo ayudo pero él hizo la mayoría. Mató a los cazadores a sangre fría.

  Los chicos se rieron del comentario de la rubia porque imaginarse eso era imposible. Hipo Haddock, el que se encariñó con un dragón y luego hizo las paces con ellos y los enemigos de Berk. El chico más amable que conocieron y el más inocente. Aquel que odia la muerte. Ese Hipo "asesino" a varios cazadores él solo. Era imposible de imaginar.

Heather: Ella no está mintiendo. Es una de las tantas facetas de Hipo. Es su mayor secreto y creo que debería ser él quien les diga lo que es en realidad.

  Todos trataron saliva, incluso Astrid.

  Lo único que hicieron fue ver a aquel chico de cabello castaño, ir con los Furias Nocturnas y acariciarlos con ternura.

Heather: Creo que sería lo mejor que el te diga su secreto y tú le digas el tuyo ¿No crees?

  Astrid se sentía incómoda, pero quería saber quién era ese chico que desconocía. Tenía que saberlo.