Tomás recibió una llamada de uno de sus hombres; a la distancia, él seguía a cargo de la seguridad de Esteban Arriagada, solo que ya no era guardaespaldas, era el supervisor de ellos.
―¿Un hombre rondando? Envíame una fotografía y un informe de todo lo que sepan de él: si anda solo, dónde vive, su nacionalidad, todo lo que más puedas y, con mayor razón, pon a resguardo el perímetro, no descuiden ni un milímetro de la casa; ellos deben estar siempre vigilados.
―Sí, señor ―respondió el otro, obediente.
―Espero el informe, adiós.
Tomás cortó el teléfono y se quedó pensativo, no podía imaginar quién era ese hombre ni lo que quería, se suponía que todos los enemigos habían muerto y sus seguidores, ahuyentados.
―¿Vas a ponerte en peligro otra vez? ―espetó Rosario desde la puerta de la biblioteca, donde el hombre tenía su oficina.
―¿Qué? ―preguntó confundido.
―Te acaban de llamar por un tipo que ronda la casa de Esteban, ¿no?
―Sí, ¿y?
―Que va a empezar todo otra vez.
―No sabemos quién es.
―Nada bueno si se esconde y no da la cara.
―No podemos saber.
―Tú lo sabes.
―¿Cómo podría?
―No habrías pedido refuerzo a la seguridad.
―Es por precaución. No es seguro que sea alguien que quiera hacer daño a la familia.
El teléfono de Tomás dio la señal de la entrada de un correo electrónico. Rosario lo miró con desprecio y se dio media vuelta para salir.
―¡Rosario! ¿Qué pasa?
―Que no puedo vivir así, con la incertidumbre de si te pasó algo o no.
―Hace casi dos años que todo está tranquilo, ¿de qué incertidumbre hablas?
―De esto, de tener que espiarte para saber las cosas, de los peligros a los que te enfrentas...
Tomás se levantó y tomó a su mujer de los brazos.
―No te oculto nada. Ya te dije, hace mucho terminó el peligro para nosotros. Y de este hombre no sabemos quién es, ni siquiera sabemos si viene por Esteban, por Rosmeiry o si acaso viene por alguno. Así que no te adelantes a los hechos. Además, no necesitas espiarme, esto te lo iba a comentar, ¡acaban de avisarme, por Dios!
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Seguirás siendo mía (Posesión parte 4)
Roman d'amourLas cosas en las familias Medero y Arriagada se supone que están bien. Después de que Verónica muriera a causa del disparo de Nicole y de que Esteban se recuperara milagrosamente, esperan que las cosas marchen bien, el problema es que con Klaus en e...