Capítulo 23

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Esteban llegó con su mujer y sus dos hijos hasta la casa de Cristóbal, Nicole no se había sentido muy bien los últimos días y se encontraba en cama. Lucas se acostó al lado de ella.

―¿Cómo estás, mi niño? Ya te extrañaba.

―Yo también...

―¿Pasa algo?

El niño no contestó. Nicole miró a Esteban, interrogante.

―Quiere hablar contigo, pero teme que te enojes con él.

―¿Qué pasa, mi amor? Dime lo que sea, yo no me voy a enojar contigo.

―Es que... Ahora que nació mi hermanita, yo... Es que ella...

―¿Qué pasa con tu hermanita?

El niño se quedó callado.

―¿Tan grave es que no me quieres decir?

―Es que yo no quiero que te sientas mal, yo no quiero que tú sufras.

―Mi amor, ¿qué podría ser que me hiciera sentir mal? ¿Por qué no nos dejan solos?

Esteban y Ros salieron del cuarto. Nicole miró a Lucas.

―Hijo, dime qué pasa, yo no me voy a enojar, sea lo que sea, puedes decirme.

Lucas tomó aire y miró a Nicole con los ojos muy abiertos.

―Lo que pasa es que Eloísa cuando empiece a hablar le va a decir mamá a la tía Ros...

―¿Ya?

―Y yo... Creo que se puede confundir...

―¿Quieres decirle mamá a Ros?

El pequeño bajó la cabeza.

―Mi niño, yo no soy tu mamá, lo sé, nos escogimos como mamá e hijo y si quieres que Ros sea tu mamá también, por mí no hay problema, si ella no lo tiene.

―Pero yo quiero que tú sigas siendo mi mamá.

―Por supuesto, mi amor, siempre seré tu mamá, ya te dije que nos escogimos desde el corazón, pero ahora tu papá está con tu tía Ros y ella te ama mucho, estoy segura de eso, así que, si tú quieres decirle mamá también, hazlo, tendrás dos mamás que te queremos mucho.

―¿No estás enojada?

―¿Cómo me voy a enojar de que te quieran y de que tu corazón sea capaz de expandirse para amar a más personas? Eso es bueno, mi niño, siempre es mejor amar y a mientras más personas, mucho mejor.

Lucas abrazó a su mamá y se quedó un rato con ella así.

―Te quiero mucho, mami.

―Y yo a ti, mi bebé, te amo mucho, mucho, mucho.

El niño puso su mano sobre la barriga de su mamá y la acarició, el bebé dentro del vientre dio un salto.

―Te ama, está muy contento de que estés aquí.

―Yo también lo quiero, lo voy a cuidar igual como voy a cuidar de mi hermanita.

―Claro que sí, tú y Daniela serán los mejores hermanos mayores.

Lucas le dio un beso a su hermanito, un beso a su mamá y se quedó otro rato con ella abrazado, hacía días que no la veía y la extrañaba mucho, más todavía cuando pensaba que ella se enojaría con él y no querría volver a verlo.

―Te amo tanto, mi niño hermoso, mucho, mucho ―le dijo Nicole cerrando los ojos, solo era capaz de dormir un par de horas cada vez, por lo que dormía a cada rato.

Seguirás siendo mía (Posesión parte 4)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora