Capitulo 24

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Gritos se escuchaban por toda la casa de las 4 amigas, Wendy veía desde la cocina a las dos chicas que discutían, la rubia desvió su mirada cuando vio a una pelinegra bajar por las escaleras, ella tenía el cabello rebelde, además se frotaba los ojos; los gritos de las dos menores la habían despertado.

Seulgi vio a la rubia para saber del porque estaban discutiendo, pero Wendy solo levanto los hombros, ellas habían bajado de las escaleras gritándose.

—¡Ya déjame en paz! — Grito la pelirrosa, al ver que la pelirroja la seguía hasta la sala para seguir discutiendo— Entiende Mark es mi novio y puedo salir con él cuando quiera.

—¡Pero deja a traerlo a la casa! —Respondió con otro grito Joy mientras se apresuraba para quedar frente a Yeri—Todo el tiempo está metido aquí.. vengo del trabajo y está aquí... despierto en la mañana y el sigue aquí... hasta lo encuentro en malditos calzoncillos— Negó al recordar la horrible escena, casi se desmaya del susto.

Yeri frunció el ceño enojada—Ahora yo no puedo traer a mi novio, pero aquí la pelirroja la que se cree encarnada por los dioses que trae a chicos diferentes dos días a la semana— se dio la vuelta para esta vez dirigirse a la cocina.

Joy comenzó a seguirla nuevamente—Pero yo no falto al trabajo para estar todo el tiempo con él... ¿Has ido alguna vez esta semana a la fundación?

—Te recuerdo que yo soy diseñadora, eso de la fundación no es mi trabajo— La pelirrosa abrió el refrigerador para servirse un poco de jugo—si tienes dudas de mi trabajo llama a la oficina.

Las dos amigas veían a las dos discutir un poco incomodas mientras se decidían quien calmaría la situación, no es que tengan miedos de ser dañadas física y psicológicamente, no en realidad si tenían miedo.

—Sabes que— Las tres chicas la vieron atentas— si ya no quieres participar en la fundación está bien no te necesitamos... tu solo sirves para publicidad.

—Joy no.. — Intento frenarla Wendy ya que veía que no iba para nada bueno

—Y esta es mi casa... si no te gusta las reglas ahí está la puerta— La pelirroja la señalo con su mano—Puedes irte cuando quieras.

Yeri sonrió— Tienes razón— ella dejo el vaso en la mesa— me voy... no tengo porque seguir soportando tus estupideces.

—Yeri.. — La pelinegra en un intento fallido quiso detenerla tomando de su brazo.

Ante de salir se detuvo en la puerta—enviare a alguien por mis cosas más tarde... y tienes razón pelirroja... solo soy alguien que sirve para publicidad no me necesitan.

Después de escuchar la puerta cerrarse un silencio profundo se apodero del lugar, las tres chicas posicionaron su vista en la entrada esperando a que Yeri regresara diciendo que era una broma y que no se iría. Aun no comprendían en qué momento paso todo, ¿Cómo es que una discusión sobre su novio las llevo a esto?

Es decir, siempre discutían sobre eso, Joy se quejaba de Mark y Yeri de las nuevas conquistas de la pelirroja, pero nunca pasaba de más. Pero la noche anterior antes que las dos amigas llegaran, las dos menores ya habían discutido, si también fue por Mark, Joy los encontró abrazados viendo una película; si eso no es la gran cosa, pero para la pelirroja fue mucho. Ella hecho de la casa al chico, Yeri y ella se gritaron, después Yeri se encerró en su habitación, pero en la mañana al verse la discusión se retomó.

Las dos mayores vieron a Joy y negaron, esta vez se había pasado.

Cada una decidió hacer las cosas que tenía pensado, pero todas estaban pendientes de la puerta

La Hija de Poseidon / SeulreneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora