Capitulo 4

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El corazón de Seulgi sintió un revoloteo al ver el acto amable de la castaña. La Pelinaranja se había enamorado de ella en su sueño, pero pensó que a pesar de que sabia que eran la misma persona, no podrían tener la misma personalidad, pero probablemente estaba equivocada.

Joohyun había curado la herida que su tío Ares le había ocasionado con la caída, pero a pesar de eso no estaba de muy buen humor. Se lo pagaría, claro que sí ; Nadie absolutamente nadie se mete en sus asuntos.

Los pensamientos de la castaña Fueron interrumpidos por los gritos de la menor, quien se encontraba arriba de la mesa donde hace unos minutos estaba el plato con mangos y ahora el plato estaba en sus manos mientras lo utilizaba como arma en contra de una ¿Cosa peluda?

Joohyun que se encontraba en la orilla de la piscina; nado hasta quedar en medio de esta, "¿Qué es esa cosa?"

La pequeña cosa peluda se encontraba al redor de Yeri—Vete estoy armada y no dudare en usarlo— Movía el plato tratando de Ahuyentarlo y al ver que no lo lograba la menor se ponía a un más nerviosa—¡Park Sooyoung! ¿Qué hace Haetnim aquí? ¡Aleja tu perro de mí!

Mientras la menor discutía para alejar la mascota de la pelirroja, Seulgi veía a la castaña en su pose de batalla por si la pequeña cosa peluda entraba al agua, la castaña tenia una mano muy cerca de su rostro con las palmas extendidas y una mano con agua lista para lanzarla.

— Acaba de salir del veterinario no lo iba dejar— cruzo los brazos indignada— además algo debes tener en tus bolsillos.

La rubia cayo en cuenta que por el susto no recordaba el sándwich que le había robado a su madre de la cocina, lo saco de su bolsillo y rápidamente lo desenvolvió para darle la primera mordida.

— Lo lamento Irene...pensaba compartir esto contigo... pero no se lo daré a ese perro.

—¿Tu que haces ahí? —Dijo la pelirroja al notar donde se encontraba Joohyun— solo es un perro...Jugabas con Ortro y en ocasiones Con cancerbero y le tienes miedo a Haetnim?— a Joy no le importo decir esos nombres porque sabia que sus amigas pensarían que solo son perros. 

Tenia razón, es más el primero contaba con dos cabezas y el Segundo el hermano mayor con tres y una cola de serpiente, pero el caso es que Joohyun sabia que las cosas pequeñas son las mas peligrosas, porque los monstruos más peligrosos tomaban esa forma para pasar desapercibidos. Además jugaba con ellos porque siempre que era castigada y visitaba el inframundo portaba el collar que le dio su padre que puede guardar una gran cantidad de agua.

—Joy Unnie—Todas desviaron su mirada hacia una niña de 9 años que se acercaba a ellas—Puedo jugar con Haetnim— La hermana menor de Yeri vio a hacia la piscina y levanto su mano para saludar a la diosa—¡Hola Unnie!

—¿Se conocen? —pregunto una pelinegra que se había mantenido cayada disfrutando del espectáculo que otorgaban sus queridas amigas, mientras lo acompañaba con algunas frituras que ya compartía con Seulgi.

—Si Unnie me salvo de ser atropellada—Las chicas se sorprendieron y Wendy se acerco a la pequeña para ver su estado.

—Si como sea—Interrumpió la rubia—Después nos cuentas, ahora llévate a esa cosa.

La pequeña asintió y tomo a Haetnim en sus brazos para alejarlo de su cobarde hermana. Cuando vio que desapareció Yeri bajo de la mesa y Joohyun salió del agua, pero no pudieron ignorar las miradas amenazantes de sus compañera.

—¿Qué? No murió... yo estuve apunto de morir también ¿alguien se preocupo? No creo.

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La Hija de Poseidon / SeulreneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora