Mi Primera Vez

Capítulo 1

De vuelta a la secundaria. Primer día, ultimo año. No soy de las que espera vivir una aventura súper loca, ni drogarme e ir a fiestas por ser el último año. Soy más "normal", por decirlo así. Solo quiero graduarme y conseguir un bello y hermoso cupo en una universidad donde pueda seguir estudiando lo que más me gusta. 

Salgo de mi cama directo a la ducha, tomo un baño rápido y salgo a "escoger" lo que debería llevar el primer día de clases...

Escojo algo ligero, cómodo y muy yo, pantalones negros y una camiseta y mis inigualables converse negros tan desgastados pero que que aun así los amo. Tomo mis cosas y bajo al primer piso a desayunar o al menos intentar hacerlo. Mamá me espera en la mesa ya lista y me siento junto a ella para desayunar juntas. Hablamos un rato y me despido de ella cordialmente con un beso en la mejilla. 

Salgo directamente casi corriendo a la parada de bus más cercana, a esperar muchos minutos hasta que se digne en pasar. Pasan unos minutos y al fin veo mi autobús. El recorrido que hace no es muy largo, pero aun así prefiero ir escuchando mi música a todo volumen. En veinte minutos exactos llego al colegio, y mi mejor amiga ya estaba ahí, esperándome, tan tierna. 

Mi mejor amiga es Anastasia, tiene la misma edad que yo y nos conocemos hace mucho, siempre tiene una locura que cometer, una fiesta que armar, y esas cosas. No entiendo cómo terminó siendo mi mejor amiga. Y sí, una de sus locuras estaba a punto de empezar. 

Lola, por favor.
Me decía en el pasillo antes de entrar a nuestra primera clase.

Anastasia no lo haré, entiéndelo.
Le dije, con la esperanza de que me dejara en paz antes de entrar al salón.

Vamos Lola, son sólo unas clases de sexualidad, todo es teoría nada es práctica, vamos di que sí. Me rogaba.

Anastasia sabes que no lo haría, soy demasiado tímida como para ir a clases de sexualidad. Le decía yo para que deje de molestar.

Pero sabía que no lo haría, la conozco, es mi mejor amiga, no se rendirá. Y esta era una de las primeras locuras que se le había ocurrido hacer. Ni siquiera llevábamos una hora aquí y ya tenía algo que hacer. 

Solo a ella se le ocurriría que vayamos a clases de sexualidad como actividad extracurricular en la secundaria. Por qué justo esa clase. Tantos clubes como música, teatro, lectura... pero no, ella quería clases de educación sexual. Pero que va, no me gusta hablar del tema y menos si hay gente cerca. No me educaron con el tipo de mentalidad que tiene Anastasia. Ella es más abierta a esa clase de temas. 

Lola por favor, no costará nada y además el profesor esta buenísimo! Me dijo Anastasia en su arranque para convencerme. Ya sabía por donde venía esto. 

Anastasia, esta bien. Lo pensaré pero no te prometo nada! Dije para que dejara de molestar y se quedase quieta.

Así pasó el tiempo. Sin nada que hacer. Sólo comprobando horarios y clases. Salimos del colegio y caminamos a casa. Afortunadamente nos queda un poco cerca.