Un año después de la boda Levi y Petra tienen una hija la cual se involucra en lo que una vez ellos experimentaron, el enamoramiento, sólo que para Elisabeth enamorarse por primera vez es algo compliacado.
Pasaron varios minutos...no se le venía nada a la mente...solo los bellos recuerdos de como fue el proceso de esto.
Las muchas veces que fue suya y la fascinante sensación...pero nada de palabras.
Se sentía confundida, tenía miedo, sus manos no dejaban de sudar frío hasta que se levantó y se miró en el espejo del armario.
Miró su vientre...no resaltaba mucho aún pero se sentía extraña.
Cambió su ropa y volvió a salir.
- Tal vez el mar me ayude - pensó, y volvió a salir.
Su amado seguía dormido.
Recorrió la orilla del mar varias veces y recordó su boda...de nuevo algo fuera del tema.
Trató de concentrarse pero solo venía a su mente su cuerpo rodeado de un vestido blanco en la orilla de la playa.
Se metió al agua y dejó que su cuerpo flotara boca arriba...seguía pensando.
- ¿Cómo empezar? - se preguntaba
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Se le notaba preocupada a pesar de saber que era de esperarse y que ambos ya lo tenían planeado desde aquel día.
Más aparte, ya no faltaba mucho para regresar al trabajo de nuevo, tal vez tenga inconvenientes.
Tal vez solo tenía que decirlo y ya...pero no tan de golpe...si no, leve.
- Me imaginaba que estarías aquí -
Escuchó, se levantó y miró a la orilla, ahí estaba Levi, mirándola extrañado y un poco preocupado.
- ¿Por qué no me dijiste nada? Hiciste que me preocupara al no encontrarte - dijo
- Lo siento...es que...te vi dormido y preferí no molestarte - contestó cabizbaja.
- Regresemos a casa y cámbiate o enfermarás -
La chica accedió, ya lo tenía planeado, al llegar, subió a la habitación y cambió su ropa de nuevo, secó su cabello y salió de la habitación.
Se sentía un aroma a té, té que tal vez Levi había preparado para ambos.
Bajó las escaleras lentamente y se quedó en el escalón más grande que daba directamente al comedor, su nerviosismo trató de ganar otra vez.
- Le...Levi...- lo llamó con nerviosismo
El azabache volteó a verla y se mantuvo un silencio algo incómodo, esperando a que la chica lo rompiera, pero no pasaba nada.
- ¿Qué ocurre? - preguntó serio
- Es..que..yo... - Petra comenzó a jugar con sus manos mientras estas sudaban
- ¿Tú qué? ¡¿Te pasó algo?! - preguntó un poco más exaltado
- No es nada de qué preocuparse...es sólo que... - no podía
- Petra...dilo de una vez - insistió, bebiendo un sorbo de su taza
- Es que...yo...estoy....e..embarazada -
Las palabras salieron, el silencio aumentó, sus ojos azules se abrieron y la chica bajó la mirada.
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La taza que sostenía se cayó, rompiéndose por el impacto en el suelo, su mirada azulada se mantenía fija a la mujer que aún permanecía en el escalón, no podía creerlo, lo progresaba lentamente en su mente...lo habían logrado.
- ¿De verdad? ¿Es en serio? -
- Levi...no creo que existan razones para mentir sobre eso -
