¿Qué es el Amor?

Capítulo 123 : El transcurso del tiempo

El tiempo parecía que volaba, la bebé ya había cumplido un mes y dos meses después la pareja volvió a estar junta en todo sentido, esos viejos hábitos volvían a renacer después de todo el tiempo esperando.

Ya querían verla caminar y correr por toda la casa, jugando y riendo para todos lados, era otro deseo compartido.

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Ese mes que la pequeña cumplió, fue cuando comenzaron a llegar las visitas.

Los primeros fueron Farlan e Isabel, por la emoción de la chica y la insistencia.

- ¿La puedo ver? -
- Si pero...ahora está dormida -
- La puedo despertar -
- Si haces eso te mato -

La mirada de la chica cambió y solo sonrió nerviosa.

- No es para tanto Aniki -
- Para mi lo es -
- Apuesto a que serás muy sobre protector cuando crezca -

Petra río y se acercó de nuevo a la sala.

- Es lo mismo que yo le digo, pero él insiste en que no será así -

Lo abrazó por detrás.

- Yo pienso lo mismo -

Añadió Farlan

- Tch, no tiene sentido discutir por eso -

Segundos después, en el piso de arriba Elisabeth se había despertado, ya que algunos balbuceos comenzaron a escucharse.

Petra subió a verla, seguro quería algo, bajó con ella en brazos y la cara de Isabel se llenó de ternura al verla.

Se acercó a la chica y miró la pequeña cara que tenía, su ser explotó.

- Awww, ¡Es hermosa! ¡Muy tierna! ¡Es genial! ¿La puedo cargar? ¿Cómo se llama? -

- Elisabeth -

Contestó la ojiambar con una sonrisa.

- ¿La puedo cargar? -
- Con mucho cuidado -

Isabel, al tenerla ella casi explota.

- Aww, se parece a ustedes en todo sentido, cuando crezca le enseñaré como defenderse sola....¡Será perfecto! Eres una cosita muy hermosa ¿lo sabías? -

A tales palabras, la bebé sonrió de una manera muy tierna...Isabel se consumía en ternura.

- Seré la tía que más te quiera -
- ¿De verdad harás eso? -

Farlan habló de nuevo.

- Claro que sí, seré la que más sabría de eso ¿No? Pero si me quieres ayudar, tampoco te lo voy a negar, ¿Tu que dices Levi? -

Su mirada no podría ser más fría.

- Puede ser, siempre y cuando no la metan en problemas, y ustedes menos -

- ¡Bien! -

»»»»

Pocos días después, ambos padres de ambos chicos se presentaron para lo mismo.

Y para ver el mejoramiento de Petra.

Al abrir la puerta, la chica recibió dos abrazos, luego sonrió y los invitó a pasar.

- ¿Cómo vas? -  preguntó su padre
- Mucho mejor, no te preocupes -
- ¿Y la niña? -
- Más que perfecta, casi no llora -

Sonrió mientras llegaban a la sala.

- ¿En serio? -  La mujer azabache tomó la palabra

- Si, es muy tranquila -
- Seguro eso lo aportaron ustedes -
- Concuerdo con tu padre...ustedes son muy tranquilos -

La chica sonrió y se dirigió a la cocina, sirvió dos vasos de agua y se las ofreció.

Se sentó en el sofá frente a ambos.

Momentos después Levi bajó cargando a Elisabeth.

A Kuchel se le aceleró el corazón por la felicidad y se acercó a él, lo saludó, lo abrazó y lo miró felíz.

- Te queda perfecto el papel de padre -

Acarició su rostro, el azabache sonrió y extendió sus brazos para que ella cargara a la bebé.

La mujer la aceptó y la miró con una sonrisa enorme, se dirigió de nuevo al sofá, se sentó y comenzó a jugar un poco con ella con su mano.

El padre de la chica se acercó y miró con elegiría.

Ambos tuvieron su tiempo para cargarla y consentirla como los abuelos que ahora son.