Blue Knees 🥀 Ayato/Haise/Shuu 🔞

🥀 21

Tn terminó de alistarse y se miró al espejo, pensativa. Tsukiyama la había invitado a cenar a su casa, pues su padre quería conocerla, y ella accedió. Se había vestido con la ropa que el mayor le había comprado aquella tarde: un corto vestido de tirantes color negro que resaltaba bien su figura, un par de tacones negros de terciopelo y un abrigo de piel sintética color blanco, todo de marcas costosas; llevaba el cabello suelto con algunas ondulaciones en las puntas y se había maquillado, colocándose sombra negra en los ojos y un labial rojo.

– Creo...que estoy bien así –giró, mirándose por detrás.– Por dios, parezco una estrella de Hollywood –rió.

El timbre del departamento sonó. Ella tomó su bolso, uno pequeño negro que su amante le había comprado también aquella tarde, y tomó su teléfono; se dirigió a la puerta y abrió.

– Buenas noches –sonrió.

– Ohh~ –sonrió.– Mademoiselle, te ves hermosa –tomó su mano y la besó.

Ella rió. Tsukiyama vestía un traje de camisa roja y corbata morda, junto a un pantalón y saco negros, además de llevar una rosa en el bolsillo de su saco.

– Déjame apreciarte mejor.

Levantó la mano de la chica y la hizo girar, mientras ella reía.

– Te queda perfecta la ropa, Mademoiselle.

– Gracias –sonrió.– Parezco una estrella de Hollywood –rió.

– Tienes razón –rió.– Bueno –dobló su brazo.–, ¿Vamos, Mademoiselle?

– Sí –abrazó su brazo.

[Mansión Tsukiyama]

Ambos entraron, siendo recibidos por una de las sirvientas de la mansión, quien los saludó haciendo una reverencia.

– Aliza, ella es Tn Osoreda, mi pareja –sonrió.– Por favor, trátenla como parte de la familia ahora.

– Entendido –la miró.– Bienvenida, señorita Osoreda.

– Muchas gracias –sonrió.– Puedes llamarme Tn.

– Entendido.

– ¿Hijo? –llamó.

Ambos miraron a aquella persona, era un hombre cano con bigotes y lentes circulares, vestido con un traje gris de camisa roja y con un chaleco blanco.

– Papá –sonrió.– Ella es la joven de quien te hablé –señaló a la chica con su mano.

– Oh, así que tú eres esa chica de quien tanto habla Shuu –rió.

– E-Eso creo –sonrió.

– Es un placer conocerte –tomó su mano y besó el dorso de esta.– Soy el padre de Shuu, Mirumo Tsukiyama.

– Es un placer, señor Tsukiyama. Soy Tn Osoreda.

– Oh, por favor. Eres la enamorada de mi hijo, así que siéntete libre de llamarme Mirumo.

– De acuerdo –rió.– Le agradezco la invitación.

– Te agradezco a ti el venir. Aliza, su abrigo.

– Sí, Maestro.

La nombrada se acercó a la pelirosa y la ayudó a quitarse el abrigo de piel y se lo llevó para colgarlo. Los tres se dirigieron al comedor, tomando asiento, el hombre a la cabeza y los jóvenes al lado derecho; dos sirvientes se encargaron de servir la comida. Alguien llegó, un joven peliazul de traje negro y corbata blanca.