ᴛᴇ ɴᴇᴄᴇꜱɪᴛᴏ

Capítulo 31

31

La luz verde del letrero de la sala de cirugía se apagó para minutos después empiecen a salir enfermeros con una cara de cansancio.

En la sala de espera se encontraba Rin, Miroku acompañado de Sango e Inu No Taisho.

El médico a cargo de la cirugía se acerco a la familia, retirandose su barbijo y estrujarlo en sus manos.

-¿Familiares de Sesshomaru Taisho? - todos ellos asintieron repetidas veces - Bien, el joven Taisho está estable, la hemorragia interna la controlamos, tiene un brazo fracturado y tendrá que usar por unas semanas el cuello ortopédico. De los dos, el fue el más ileso...

-Entonces quiere decir...

-No puedo decir nada, yo no estoy en la cirugía del otro afectado, pero por lo que vi...es grave.

-Muchas gracias doctor - Inu No Taisho suspiro aliviado por su hijo mayor, pero la angustia volvió a inundarlo en cuánto recordó a la joven azabache.

-Ire con Inuyasha - dijo el patriarca Taisho no esperando respuesta y marchandose.

-¿Inuyasha podra soportarlo? - se escucho la pregunta de Sango segundos después.

-Deberá de hacerlo - nervioso apreto más el agarré de su mujer.

°°°

-¿Cómo está Sesshomaru?  - audible pregunto Izayoi.

-Está bien querida, fuera de peligro - apenas sonrió.

La luz verde de esta sala de cirugía aún no se apagaba, y ya llevaban cuatro horas. Allí estaban Inuyasha, Izayoi, Inu No y los padres de Kagome, completamente angustiados y con la esperanza de recibir buenas noticias.

-Hijo ¿Te traigo un café, algun bocadillo, algo?

-Gracias mamá, pero estoy bien-  respondió taciturno Inuyasha.

Sus ojeras por no haber dormido nada eran notables, las lágrimas secas en su mejilla se notaban junto con su cuerpo temblando del nerviosismo. No estaba bien y no lo estaría hasta que Kagome lo estuviera.

DOS HORAS DESPUÉS

La luz verde se apago, diez minutos después salían los enfermeros seguido de una doctora con una tabla de notas en sus manos.

-¿Familiares de Kagome Higurashi?

-Aquí-  Inuyasha de inmediato se acercó.

-Pudimos estabilizar a la señorita Kagome, el proceso fue complicado. Ahora mismo sera llevada a la unidad de cuidados intensivos, nosotros hicimos todo lo que pudimos, ahora depende de ella en su recuperación. No pudo despertar, se encuentra en estado de coma...

-¡Oh por Dios! - el grito ahogado de la madre de la azabache se escucho, su esposo la consolaba.

Inuyasha tembloroso agacho su cabeza ocultando con  su flequillo las lágrimas que desbordaban de sus ojos y mojaban sus palidas mejillas.

-Imposible, no mi Kagome, no ella...

-Esperamos lo mejor de ella - la doctora se marcho tras decir aquello y dejar con el dolor a la familia.

-Kagome...- murmuro perdiendo sus fuerzas y cayendo de rodillas-  No Kagome.

¿Por qué tenía que ser Kagome? No podía perderla, él la necesitaba.

°°°

Una semana después.

-Ya ha pasado una semana, los doctores dicen que estás demostrando actividad cerebral. Lo de hablarte funciona cariño.