-Mi vida no puede empeorar-me repetía una y otra y otra vez, era tonto e irónico, de todos los malditos hombres en el mundo me tenía que tocar este, Dios, si existes lánzale un rayo en este momento por favor.
-Mucho gusto, mi nombre es Chris, Chris Frederick, dijo tendiéndome su mano para que yo correspondiera el saludo, su voz hizo que regrese de mis pensamientos y correspondí.
-El gusto es mío, mi nombre es Mira, Mira Araoz. Besó mi mano y eso fue realmente repugnante, tomó asiento, él estuvo a punto de preguntar algo pero fue interrumpido por el mesero quien traía la cena, se trataba de almejas en salsa,-Perfecto- pensé, ahora no podré comer, era alérgica a estas cosas y mis padres no lo sabían, todos tomaron sus cubiertos y le lanzaron contra el banquete.
-Están deliciosas-dijo el padre de Chris.
-Es verdad, la salsa es muy buena.- agregó la esposa.
-¿Por qué no comes cariño?.-Preguntó mi madre a lo que respondí con una gracia fingida:
-Madre, últimamente me he sentido mal al digerir almejas, el doctor dijo que posiblemente se trate de una alergia y me ordenó evitarlas por un tiempo mientras salen las pruebas de los análisis.-Todo era una completa mentira, supe que era alérgica a los catorce y a nadie le importó, nunca me hice unos exámenes, mucho menos fui al doctor.
-Ah, eso es cierto, lo siento, tu padre preparó la cena cuando no sabíamos de tus posibles alergias.
-No hay problema, solo espero no encontrar otra almeja en mi plato la próxima vez-
-¿Eres alérgica solo a las almejas o debo cuidarte de algo más?.-Agregó Chris, lo odiaba...y ni siquiera lo conocía, pero estaba obligada a hablar con él, ya después podría quejarme con mi almohada.
-Al polen.- Dije, aunque no era verdad, solo me estaba asegurando que él no envíe flores luego.
-Mi animal favorito es el búho, es audaz, hostil y muy observador, ¿Cuál es el tuyo?
No quería decirle nada de mi así que cree una hermosa ficción en donde me encantaba el color rosa.
-Me gustan mucho...mm los...¡gorilas!.- me reía por dentro pero era tan graciosa la cara de Chris.
-Tienen un gran parecido con los humanos y son muy inteligentes, de verdad me gustan. Mis padres no me escucharon, sino se hubieran enfadado. -Mi color es el naranja, ¿y el tuyo?
-Verde -respondió, sonreí complacida, había logrado engañarlo y si que me divertía, todos cenaron menos yo, tenía hambre pero no importaba, en casa comería cualquier cosa. nos despedimos y Chris me habló antes de irse.
-Nos vemos luego chica de los gorilas, tengo la impresión de que nos llevaremos muy bien-. No lo podía creer, lo había engañado tal fácil, gorila por lobo y naranja por azul, era un plan perfecto, una vez en el auto fruncí el ceño y en verdad no podía creer que me vaya a casar con ese playboy.
Una vez en el auto no pude contener mis ganas de gritar -¡No pueden casarme con él! .-rompí el silencio a lo cual mi padre respondió gritando como yo.
-¡Si puedo! y lo haré, eres mi hija y yo hago lo que quiera contigo.
-Al menos sabes quien es él, lo vi en las redes sociales, ese tipo se ha llevado a la cama a todas las mujeres de la nación!
-Entonces agregará una más a su lista.- Dijo mi madre con ironía, ellos lo sabían pero claro, yo era mercancía, no importaba a quien me vendían, sino cuánto ganaban por ello.
Cuando llegamos solo subí a mi habitación, puse llave, abracé a mi almohada y grite con todas mis fuerzas, siempre gritaba pero nadie nunca escuchaba, he gritado once años seguidos pero nadie escucha, pronto me quedé dormida.
*
Ella estaba frente a mi, mi abuela, no lo podía creer, caminó por entre los lobos y no la dañaron -Regresa a casa mi niña...Ya es hora, vuelve con migo...Luego mi alarma hizo que me despertara, me senté en la orilla de la cama, era mi abuela, ella me estaba llamando, quería que volviera pero no podía hacerlo, aunque...si viajo a Noruega ya no tendré que casarme. Eso era algo realmente absurdo pero si lo pensaba bien era la mejor y única opción que tenía. Bajé a desayunar y mis padres estaban ahí.
-Los preparativos de la boda ya se están llevando a cabo, ayer le agradaste tanto al muchacho que está haciendo todo lo posible para que esté todo listo dentro de una semana. Baje la vista, agradarle a ese mujeriego era lo menos que quería y...una semana, haga o diga lo que quiera ellos no se iban a echar para atrás. Cuatro días pasaron en un abrir y cerrar de ojos, como Chris no podía mandarme flores me llegaban osos más altos que yo -patético-pero el sueño de mi abuela llamándome, se repetía cada noche sin pausas, me volvían loca.
Hoy escogeré el vestido, realmente era muy molesto, la madre de Chris y la mía me llevaron por toda la cuidad buscando el "Indicado" hasta que encontré un vestido realmente hermoso y la estilista me dio el modelo de peinado para ese día. Soy solo una humana, sin el poder para enfrentarme al mundo, por eso me rompo con facilidad, no quiero hacerlo, quiero ser libre. ¡No quiero casarme!
El recuerdo de mi abuela rondaba en mi cabeza, el día había llegado, me levanté temprano, la ceremonia era al medio día, primero tomé un largo baño, luego las encargadas prosiguieron con mi cabello, querían cortarlo pero me negué rotundamente, las uñas, de pies y manos, el maquillaje, el vestido y el peinado. Me miraba al espejo y no me reconocía, la mujer que veía ahí era una mujer que quería correr, correr a su hogar, con su abuela. La ceremonia era en la iglesia central, había miles de invitados y yo estaba en un cuarto alado de la sala principal de la iglesia esperando a que la música comenzara a tocar para cometer suicidio. El ramo era de rosas plásticas, supongo que se tomaron en serio lo del polen, pero en la habitación, no había nada más falso que yo.
Me quedé ahí, como aquel día en que todo empezó bajo la lluvia, solo que esta vez era diferente, esta vez realmente iba a morir, entré en trance, no se cuánto tiempo pasó, pero una estilista movía sus manos frente a mi para que volviera de mi viaje.
-Señorita, ya ha pasado mucho tiempo, la música ha comenzado, él la está esperando-. Titubeé sobre lo que dijo... ¿Realmente es esto lo que quiero? Creo que es momento ser libre, es cierto, ellos me adoptaron, pero no les debo nada porque fue su decisión, no la mía. Miré directamente a los ojos de la estilista, veía mi reflejo, veía a una chica buscando la salida, me levanté y mire hacia el frente, con voz decidida pronuncié las palabras que cambiarían mi vida para siempre.
- Pues seguirá esperando...

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Luna Perdida (EDITANDO)
WerewolfUna joven ha estado viviendo en el mundo humano hasta cumplir los veintiún años sin imaginar su origen, en la búsqueda de sus raíces conocerá a muchas personas pero no se podrá fiar por completo de todas ellas. ¿Tienes idea de las dos caras que suel...