Luna Perdida (EDITANDO)

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Hola!! Solo quería saludar y darles las gracias, la verdad me alegra saber que hay personas interesadas en mi historia, nos vemos luego y espero que sigan disfrutando de la lectura porque se vienen cosas muy interesantes.

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Mira***

Conseguir abrir los ojos fue realmente doloroso, la luz del sol resultaba ser un verdadero infierno para mi cabeza, jamás en mi vida había pasado por una resaca pero ahora que siento como realmente es, juro no volver a confiar en los jugos jamás, es más tomaré solo agua.

Mis manos sostienen mi cabeza mientras consigo levantarme, pero me siento como gelatina, podría caer en cualquier momento, el primer intento no es exitoso y me causa un dolor más agudo el caer de nuevo en la cama porque mi cabeza está a punto de explotar, por suerte la segunda vez consigo pararme y caminar torpemente al cuarto de baño, entro en la ducha con toda la ropa y el agua comenzó a caer, la sensación era similar a cuando llueve y juegas dando vueltas mientras te vas empapando poco a poco, al menos por este momento me deshice de mi malestar.

Una vez vestida y arreglada bajé la cocina, pasé por el pasillo y vi el reloj, no lo podía creer, era un poco más de las cuatro de la tarde --en serio la resaca me había afectado demasiado-- me arrastré hacia la mesa y tomé una manzana, estaba hambrienta y tenía mucha sed.

-Señorita buenas tardes.

-Querrás decir buenas noches Kara-. Dije para luego morder la fruta, mis ojos seguían cerrados, el olor de pay de manzana llegó a mi, era tan exquisito, yo podía hacerlo pero a ella le salía mucho mejor que a mi. Refregué mi cara con ambas manos buscando despertar completamente, estaba como en otro mundo.

-¿Dónde está Matts?

-El joven está en el estudio señorita.

-Iré a verlo-. salí de la cocina, me llevé la manzana, mientras cruzaba la sala que se interponía entre el estudio y yo pensaba en como decirle o insinuarle el tema de la pócima, ya habían pasado dos días y ni siquiera me he tomado la molestia de averiguar como tomarla y eso que ese es el único objetivo por el cual estoy aquí. Llegué a la puerta, estuve a punto de tocar, detuve mi mano a pocos centímetros de dar el primer golpe, recordé todo lo que podía sobre lo que pasó ayer y la verdad solo recuerdo que él estaba frente a mi y comencé a dar vueltas, nada más hasta que abrí los ojos en el auto... Las personas tienden a decir tonterías cuando están ebrias pero, ¿y si dije algo que no debía? Me da miedo tocar la puerta, y si él ya lo sabe? Estaría muerta, --tranquila, todo va a estar bien-- Suspiré y toqué la puerta, la voz de Matts diciendo que pase hizo que mi corazón se acelere, abrí la puerta, por suerte él estaba concentrado en sus papeles, se detuvo y me miró a los ojos, de no ser porque aun sostenía la puerta hubiera caído al suelo.

-Giselle...

-Ah, hola...¿Puedo pasar?-. Mis nervios se mezclaron con mis mareos, creo que caeré en cualquier momento.

-Si claro, adelante.

Lancé una mirada general del lugar, había muy poca luz, la decoración parecía de la edad media, los muebles y la alfombra de color café oscuro, realmente de mal gusto, no había ventanas y si las había seguramente estaban detrás de esos estantes gigantescos llenos de libros, parecía a una de esas bibliotecas de la cuidad, tal vez pueda encontrar un libro interesante en todo esto.

-¿Que pasa?

-No nada, no pasa nada, solo quería venir a verte y a disculparme, quería venir a disculparme-. Concluí, ¡rayos! ¿Qué carajos estoy diciendo? Ash Mira eres una tonta.