Los mareos y punzadas a la altura de la cien han sido muy comunes desde ayer, no estoy seguro si está relacionado con los lobos que nos atacaron, quienes por alguna razón intentaron llevarse a Giselle, Gaynor no ha tenido mucho éxito siguiendo el rastro puesto que no dejaron ninguno y lo que acaba de decir Luna, sobre si comí o bebí algo raro no es así, he comido lo que prepara Kara desde que tengo memoria y no me ha pasado nada.
-No-. Respondo, que más se supone que deba responder. Pero ella parece que no está contenta con mi respuesta.
-¿Desde cuándo tiene estos mareos?-. Cuestiona nuevamente.
-Desde ayer, tal vez es porque no he podido atrapar a los rebeldes que nos atacaron de camino a la mansión y me siento frustrado.
-¡¿Lo atacaron?!-. Pronuncian todos al unisono, no debí mencionar esto, ahora tendré otra larga charla con ellos y no he sabido nada de Giselle desde que llegamos aquí, pronto será media noche y quiero que ella esté a mi lado.
***
-Así que eso fue lo que sucedió-. Concluyó Xavier luego de decirle todo lo que había ocurrido esa noche.
-¿Y Giselle solo terminó con rasguños y golpes?
-Si-. Traté de calmarme y al fin mi cabeza dejó de doler.
-¿Dónde está Giselle ahora?-. Cuestionó Martin. -Ya pronto es media noche.
-Es cierto, iré a buscarla, no tardo-. Salí de ese lugar, las punzadas en la cien volvieron y con una intriga que me mataba; Luna tenía razón en algo ¿Por qué la secuestraron si solo la golearon? Acaso había otra cosa, claro que Giselle no se debe acordar mucho de lo ocurrido puesto que estaba desmayada, cuando la encuentre debo preguntarle al respecto.
Camino entre varias personas pero aun no la encuentro, tal vez está con Tessa hablando de cosas de chicas, faltan veinte minutos para la media noche, es hora y ella no aparece, realmente me voy a molestar con ella.
Luego de buscar por otros cinco minutos estoy a punto de darme por vencido cuando vi a Tessa de espaldas, estaba entre un montón de niños, me acerqué a ellos sin hacer mucho ruido, solo buscaba a Giselle, en medio de los pequeños había una fogata.
Este es un evento solo para los que cumplen diecisiete años pero es normal que vengan los demás junto a sus hijos para que aprendan las costumbres de la manada. Giselle estaba sentada junto a varios niños sonriendo mientras les decía algo pero no podía escucharla a pesar de poseer un oído muy agudo.
Seguí acercándome y entonces ella comenzó a cantar, eso fue nuevo, ella me decía que odiaba a los niños y que cuando sea madre eso cambiaría pero ahora no podía creer lo que estaba viendo, realmente cambió mucho desde que...
Mira***
No era muy buena socializando con las personas de mi edad en cambio Tessa era excelente, conversaba con todo aquel que se le cruzaba pero nadie me agradaba, más por el hecho de que era Giselle, quien sabe con cuantos de los presentes compartió cama, tan solo pensarlo me dan nauseas así que cuando vi al grupo de niños reunidos alrededor de una fogata no dudé en acercarme.
Al principio todos querían salir corriendo, ¿En verdad Giselle daba tanto miedo? así que les dije que no les haría daño, comencé a contarles historias, de esas que me contaba mi abuela cuando era niña, todos estaban muy emocionados.
-Oye, sabes cantar?-. Preguntó una niña de aproximadamente cuatro años.
-Me sé una canción, pero no queras escucharla, canto muy feo-. No quería cantar, no tenía ánimos.
-¡Vamos canta!-. De pronto todos los niños comenzaron a gritar y no pude negarme por más tiempo pero Tessa arruinó el ambiente.
-Giselle!-. Dijo casi gritando, con sus ojos me hizo me ordenó que me apartara de ahí, no iba a hacerlo bajo ninguna circunstancia, los niños me agradaban y apuesto a que tengo tres minutos, luego iré a continuar haciendo nada entre esas personas adultas y patéticas.
-¿Quieren que les cante una canción?-. Pregunte a todos los niños, y ellos gritaron que si al unisono, entonces comencé sin mas, la verdad la única canción que se me venía a la mente era la que canté en la aldea de Einar, porque hablaba de guerreros y esas cosas.
-Bien, la canción habla de lo valientes que deben ser los lobos para ser unos guerreros fuertes.
-Si, yo quiero ser un guerrero muy fuerte-. Decía en niño que estaba a mi lado mientras alzaba una barita, eran tan dulces así que sin más comencé a cantar:
Matts***
Esa canción... Giselle estaba cantando la misma canción que aquella humana, pero ¿Por qué?... Las punzadas en mi cabeza hicieron que me arrodillara de dolor porque ya no aguantaba más, intentaba calmarme pero el aroma llegó a mi nariz de nuevo, era aquel olor que según Asher debía poseer mi mate, ¿Qué estaba pasando?, ¿Por qué sabía esa canción? Ese olor... cuando el recuerdo de la humana vino a mi su olor también, la fragancia de Giselle era similar al que emanaba de esa humana, ¿Qué demonios estaba pasando?. ella, la humana, el olor similar esperen... mi cerebro proyectó la imagen de ese hombre en el aeropuerto de Oslo.
//La encontré aquí en Oslo, tomó un vuelo a Florida, Te espero allá, ah si, y avísale a mis suegros que encontré al rubí perdido//
Florida, la zona de Zaya, el portal a la manada Sombras de Luna, la visita inesperada y duradera de Tessa... ¿Acaso ella no era Giselle?... y si ella es realmente aquella humana de la aldea Nubes oscuras.
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Luna Perdida (EDITANDO)
WerewolfUna joven ha estado viviendo en el mundo humano hasta cumplir los veintiún años sin imaginar su origen, en la búsqueda de sus raíces conocerá a muchas personas pero no se podrá fiar por completo de todas ellas. ¿Tienes idea de las dos caras que suel...