El día que robaste mi corazón (Adrinette) [Pausada]

¢αρíтυℓσ 40

+La salida+

Los chicos dejaron muñecos de su tamaño, hechos con los materiales que encontraron, en las sillas. Treparon a la ventilación, detaparon cuidadosamente la cámara y se fueron.

Pasaron a través de los túneles siguiendo las indicaciones de la asiática y, como ella había señalado, llegaron a las escaleras de emergencia.

-Traten de no hacer ruido, una parte del ejército de HeartBreaker aún está en el edificio, si nos escuchan vendrán a atraparnos- Advirtió la azabache.

-Entendido- Respondieron ambos.

Sin decir otra palabra, caminaron sigilosamente, bajando escalón por escalón, y cuando escuchaban un ruido proveniente de las puertas que los separaban del edificio, se quedaban inmóviles y luego continuaban.

Llegando al último piso, una puerta se abrió. Los adolescentes retrocedieron unos cuantos escalones rezando porque esa persona no subiera. Para su suerte, el hombre se dirigió a la salida y abrió la puerta que daba al exterior, no salió, sino que se quedó parado, como si quisiera tomar aire fresco, haciendo que los héroes se pusieran nerviosos en su escondite.

El hombre finalmente cerró la puerta y, a punto de marcharse, otro ruido proveniente de sobre sus cabezas encendió la alarma.

-Miren, son Ladybug y Chat Noir.

El hombre volteó y vió a los jóvenes, ellos miraron hacia arriba para percatarse de una multitud de cabezas que los observaban, inmóviles.

-Tal vez no sean del ejército de HeartBreaker- Susurró el felino en una voz casi inaudible, sino para las chicas.

-¡Hey, ustedes deberían estar en el estudio!- Los apuntó una de las personas desde arriba.

Todos los dirigieron una mirada severa a ellos y comenzaron a correr en su dirección para atraparlos.

-Si lo son ¡Corran!- Exclamó Ladybug, aludiendo al comentario de su compañero y, tomando del brazo a los chicos, comenzaron a correr.

Fueron hacia abajo, en vista de que sólo había una persona y sería más fácil evitarla, pero para su sorpresa, 5 personas más salieron por la misma puerta, bloqueándoles el paso. Trataron de devolverse, pero a sus espaldas, almenos una veintena de personas, se aproximaban a ellos en su captura.

Protegiendo a la japonesa, ambos héroes se ubicaron en ambos costados e hicieron escudos con sus armas, preparándose para la pelea.

-¿Listo Chat?

-Listo.

-1...

-2...

-¡3!

Los superhéroes se lanzaron a las personas que se encontraban a casa la y comenzaron a derribarlas. Ladybug, con su yoyo, se paseaba alrededor del lugar repartiendo golpes y patadas fácilmente sin ser atrapada, mientras que el héroe felino hacia uso de su bastón para pelear, usándolo de zancadilla para hacer caer a sus oponentes. Lanzaban ataques y usaban lo que habían aprendido durante sus años de experiencia para pelear, recibían los golpes sin menor daño, pero a diferencia de las películas, cuando lograban deshacerse de una persona para seguir peleando, tras unos segundos esta volvía a levantarse y los atacaba nuevamente.

Pero no se rendían, seguían de pie luchando. La pelea parecía ser infinita, por lo que sólo se concentraron en una cosa, esquivar a suficientes personas para llegar a la salida.

Juntos, se abrieron paso entre la multitud, esta al darse cuenta de su intención, iban directamente a atraparlos. En grupos de 3 a 5 personas, se lanzaban a ellos, reteniendo sus brazos, pero con técnicas de llave y gimnasia que habían aprendido, lograron safarse y llegar a la salida, abrieron la puerta y entonces se dieron cuenta de que faltaba una persona.

-¡Ladybug, ayuda!- Se escuchó el grito de la chica en uno de los escalones. El ejército trataba de llevársela y ella apenas lograba defenderse con los golpes y una técnica de Wing Chu que conocía, pero eran demasiados y las Artes marciales no eran su fuerte, sino el esgrima.

-Chat, tu bastón, rápido- El chico no dudo un segundo y le entregó el bastón a la chica, quien lo lanzó hasta la japonesa para que se defendiera- Ya voy, Kagami.

La heroína lanzó su yoyo y lo afirmó en una de las vigas de las escaleras sobre su cabeza, jaló el hilo e impulsándose con sus piernas, llegó a la chica que había comenzado a pelear. Se acercó a ella y tomando su cintura, volvió a jalar de su yoyo y llegó hasta la salida para irse.

El felino salió tras de ellas y cerró la puerta tras de sí, dejando encerrados a sus atacantes. Habían logrado salir.

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Oficialmente ahora ya van 5 meses de esta historia! 5 meses de actualizaciones semanales sin falta, cumpliendo otra decena de capítulos.

Y como dije ayer, aquí va uno de los dibujos que hice para el AdrinetteApril.

Gracias por leer💕.