El día que robaste mi corazón (Adrinette) [Pausada]

¢αρíтυℓσ 51

+El mensaje+

[...]

Ring.

El sonido repentino de un mensaje proveniente del teléfono de la chica los interrumpió.

-¿Es Alya? -Se apresuró a interrogar el rubio- ¿Pasó algo con Lila?

-No lo sé- La azabache tomó rapidamente su teléfono, lista para retirarse de la biblioteca en caso de que Lila se acercara, sin embargo, para su alivio, descubrió que sólo se trataba de un mensaje de Luka- Oh.

-¿Qué sucede?

-Nada, descuida. Era Luka- Contestó con calma.

-¿Luka?

-Sí, le hablé para ver cómo seguía de su resfriado.

-Ya veo- Musitó el rubio, tratando de ocultar que estaba levemente celoso- ¿Y cómo se encuentra?

-Dice que ya está mejor- Respondió, pausando por un minuto mientras tecleaba su respuesta- Quiere que nos reunamos, que hay algo que me tiene que decir.

-Esas son buenas noticias ¿No?- Preguntó el chico.

-Creo que lo sabremos pronto, iré a verlo hoy después de clases.

-...- El rubio se quedó en silencio un instante, no quería admitirlo, pero pensar en que ambos se encontrarían hacía que un nudo se armara en su estómago. Tenía miedo, le preocupaba que, como las veces anteriores, algún imprevisto se presentara que se convirtiera en otro obstáculo para estar juntos.

-¿Está todo bien?- Musitó la azabache, dirigiéndole una mirada genuinamente preocupada.

-Ehhh, sí, sí- Pero las cosas habían cambiado. Era innegable que entre ambos había más que amistad, y la chica le había demostrado que quería estar con él. Además, ella ya no sentía nada por Luka.. ¿Verdad?- Todo está bien.

Sin embargo, la ojiazul percibió lo que le pasaba al rubio. Sentía como evitaba mirarla a los ojos, cosa que a la vez le causó ternura. Sabía que él estaba nervioso por todo lo que estaba pasando, y que reunirse con Luka no le resultaba indiferente, pero ella estaba determinada a estar con él, y quería demostrarle que ella jamás volvería a decepcionarlo.

-Ey- Replicó mientras llevaba una de sus manos a las mejillas del rubio- No te preocupes, todo saldrá bien.

Ese pequeño gesto, junto con esa sonrisa que la chica solo guardaba para el ojiverde bastó para reconfortarlo, y apaciguó todas las inseguridades que ese mensaje le había provocado.

-Lo sé, confío en ti- Musitó, correspondiendo el gesto de la chica con una pequeña sonrisa.

Marinette le dirigió una mirada cariñosa y besó brevemente su mejilla para consolarlo.

-Esta tarde, todo lo que pasó, mi historia con Luka y ocultarnos de todos habrá terminado. Hoy romperé con él, y será definitivo.

Ambos se dirigieron una sonrisa y se acercaron para despedirse con un abrazo, un abrazo que los reconfortó para seguir adelante y los llenó de esperanza.

[...]

Durante el resto del día, las clases transcurrieron con normalidad. Tras haber aclarado todo, acordaron mantener cierta distancia, lo que en cierto modo parecía haber calmado a Lila.

Al no ver ninguna actitud fuera de lo regular, la morena se limitó a hablarle a Adrien para preguntarle sobre la clase.

Mientras, en su cuarto, el peliazul caminaba de un lado a otro; estaba indeciso.