Capítulo 49

98 11 2
                                    

—No puedo creer que en verdad estemos aquí

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—No puedo creer que en verdad estemos aquí.

—Sonríe Matthew, nada pasó.

— ¿Nada pasó? —él me tomó del brazo y me volteó para mirarlo directamente a los ojos— Apenas acabas de despertar luego de un ataque y solo pasaron horas de que te arrastré a mi oscuridad.

—No me arrastraste a nada, me parecía que ya lo había dejado en claro.

—Madeline, asesinaste a alguien a sangre fría.

—Sí, y no es la primera vez. —Mi tono de voz había aumentado y me tuve que obligar a bajarla.

— ¿Crees que no lo sé?

— ¿De qué hablas?

—De esa chica frágil, temblando por el frío y el miedo, tratando de ocultar el cuerpo muerto de un hombre al que acababa de asesinar por venganza. Su blusa blanca estaba llena de manchas color carmesí que hacían juego con su pollera roja. Y además esas mismas manchas teñían todo su cuerpo y precioso rostro.

Para cualquiera podría parecer que estaba contando un cuento retorcidamente lindo, pero era la realidad, esa había sido yo hacía dos años.

Él me acarició recorriendo mi rostro con su pulgar con dulzura.

—Si no hubiese sido por mi probablemente hubiesen encontrado ese cadáver. –Admitió.

— ¿Por qué me ayudaste?

—Porque me di cuenta que eras muy similar a mí, Mads, te he elegido hace mucho tiempo, antes de que siquiera sepas mi nombre.

— ¿Y por qué viniste ahora?

—Estuve esperando el momento indicado, tú comenzabas la universidad, los años más problemáticos para algunos. Además, que por Sean me había enterado que iba a ir Lucas contigo, de quien ya conocía más o menos la personalidad, solo que no sabía en que se había convertido ni tampoco que también te quería a ti.

—Viniste a protegerme, me tenías marcada como una presa.

—Jamás te vi como una presa, siempre te vi como mi par. —Su confesión me había tomado por sorpresa, pero de alguna manera me hacía sentir bien.

—Ahora solo disfrutemos de la fiesta, mi protector —dije acomodando su moño que se había torcido y tomando su mano para conducirlo a la puerta de la casa donde nos encontramos con Tiffany, Bianca y Marvin hablando.

—Mads —la rubia se abalanzó a abrazarme como la noche anterior—. Pensé que no vendrías, como ayer prácticamente te escapaste.

—Lo siento Tiff tenía algunos asuntos pendientes que resolver. —Me excusé guiñándole un ojo y señalando con la cabeza a Matthew que sonrió sin entender muy bien.

Ella pareció convencerse por lo que me regaló una sonrisa cómplice.

—Genial que se haya resuelto, ¿ha venido Leila con ustedes? —curioseó la rubia.

Insane✔ [Dementia #1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora