Amando a un hombre lobo [ Leon x Nita ] [ Terminada]

4. AMIGOS.

El sol se cuela por la persiana dándole directamente a la cara al moreno, haciendo que este despierte, se endereza y se frota los ojos, mira a su alrededor y se acuerda de que en la noche anterior se quedó por petición de Nita.

Se levanta y hace la cama, abre la puerta con cuidado y en silencio sale al pasillo, entonces ve la puerta de la habitación de Nita entreabierta y decide entrar.

La osezna se encuentra durmiendo tranquilamente, su respiración es tranquila y relajada. Leon se queda contemplando su rostro, hipnotizado por esa belleza única que para él tanto la caracterizaba, no tiene puesto el gorro, puede ver su cabello rojizo callendole sobre los hombros, verdaderamente es linda.

Sacude la cabeza hacia los lados, no puede estar con ella, no él. Decide escribir una nota por si se le ocurre ir a buscarlo al bosque, deja la nota al lado de su mesita y se va sin hacer ruido de la habitación, al bajar se va a la cocina haber si tiene algún calendario.

Efectivamente tienen uno colgado en la puerta de la cocina, lo mira detenidamente, ese fin de semana se transformará, es la última semana del mes.

Mira al siguiente mes, a la segunda semana vuelve a haber luna llena. Suspira, odia ser un hombre lobo, por eso siempre está más alejado del resto, para no hacerles daño, no otra vez.

Cuando sale por la puerta, me echa una última mirada a la casa para después darse media vuelta y salir corriendo de allí, corre para después meterse en las entrañas del bosque.

Nita abre los ojos despacio, lo único que ve es el techo de su oscura habitación, se en cereza y se frota los ojos para intentar ver mejor en la oscuridad, se levanta de la cama y con cuidado de no chocarse con nada va hacia la ventana, sube la persiana y deja que los rayos del sol entren por la ventana e iluminen su habitación.

Entonces divisa una nota encima de su mesita de noche, va hacia allí y la toma, es de Leon.

Nita:

Me encuentro perfectamente, gracias por dejarme dormir en tu casa, pero tengo cosas que hacer y no me puedo quedar.

Leon.

Entonces ya se ha ido, pues nada es su decisión, va a ver si su ropa estaba seca, pues a ella le gusta dormir con un pijama, efectivamente la ropa estaba seca, entonces se da cuenta de que no llevaba el gorro puesto, bueno, lo peor son los ojos, se mira al espejo del baño de su habitación, sus ojos de color morado la caracterizan mucho, empezó a ponerse el gorro por todos los comentarios que hacían sobre ella en la escuela, aunque después con gorro tampoco cambiaron mucho. Suspira un poco cansada, por lo menos aquí está empezando bien, y parece que son sus amigos.

- Mejor voy a desayunar, luego si eso me doy un paseo por el bosque - dice para sí.

Baja a la cocina y se dispone a prepararse unas tostadas y un vaso de leche, después de limpiar todo se dispone a salir de la casa, entonces llaman a la puerta. Nita se dirige a abrirla, ¿ quien será?

- Buenos días Nita - dice Mortis saludándola. El vampiro tiene un gracioso traje de cartero, le entrega una carta.

- Buenos días, ¿ por que estás vestido así? - dice cogiendo la carta.

- Es mi "empleo" puesto que soy el más rápido de aquí, cada uno tiene el suyo si quiere comer, nosotros sólo ayudamos a Pam - dice poniendo comillas en empleo.

- Entiendo, ¿ yo donde ayudo?

- No lo sé, seguramente irás con las mujeres también, pero al campo, se lo tienes que preguntar a ella - dice encogiéndose de hombros.

- De acuerdo, gracias. - dice esbozando una sonrisa.

- Nada, que tengas un buen día. - tras decir esto el vampiro se da la vuelta y se marcha a seguir su trabajo.

Nita por su parte entra y abre la carta, la letra es de su padre, empieza a leer.

Querida Nita:

No podré venir a casa hasta la mitad de vacaciones de verano aproximadamente, ha ocurrido un accidente con el trabajo. Cuidate. Te quiero mi pequeña.

Besos

Papá.

PD: Ayuda a Pam con las tareas del bosque, es lo que mejor se te da.

Nita dobla la carta, tiene miedo, miedo de perder a su padre, no quiere eso.

- Vamos Nita, tienes cosas que hacer - se dice a sí misma.

Se coge las llaves y sale de la casa, pasa por las calles de tierra del pueblecito y va a la gran casa de sus amigos.

En la puerta se encuentra a Pam diciéndole algo a Colt y Shelly, estos dos se encuentran con armas, Colt con revólveres y Shelly con una escopeta. Nada más verla los tres le sonríen, Nita les devuelve la sonrisa.

- Hola Nita, me dijo tu padre que nos podrías ayudar con las tareas del bosque, ¿ verdad?

- Sí, soy buena, aunque depende en que.

- Vais a tener que recoger leña, setas y algún que otro fruto.

- Entonces sí que sirvo.

- Vale, ten - Pam le tiende una pistola - por si acaso se os echa algún animal encima.

Nita coge con cuidado el arma, tiene buena puntería pero nunca ha utilizado una de verdad.

- Colt y Shelly irán contigo, no puedes hacer el trabajo tú sola.

- Vale. - no le importa, es más, se siente segura.

- Venga Nita, vamos cuanto antes, ¿ se puede quedar a comer Pam?

- Sólo si ella quiere Shelly.

- Vale, si no molesto.

- Tranquila Nita, a nosotros nos agradas. - le dice Colt.

Nita no puede evitar esbozar una sonrisa, siente como por dentro se inunda de alegría.

- Vamos de una vez, quiero llegar cuanto antes - dice la escopetera mientras despeina un poco a Colt con su mano.

- ¡ Ey mi pelo! - se queja el pelirrojo.

Ambas chicas ríen, se despiden de Pam y se van al bosque para poder ir a por comida y leña. No sin antes coger algunas bolsas de tela para poder cargar bien con los alimentos.

Mientras tanto, un chico con traje de camaleón va trepando por los árboles de rama en rama, con la agilidad de un gato, entonces ve que que tres siluetas se acercan al bosque, divisa las armas por el color metálico del metal a la luz del sol. Tiene que ser precavido, no puede terminal mal, seria sospechoso.