Amando a un hombre lobo [ Leon x Nita ] [ Terminada]

26. LOCURA.

- Sabéis, creo que hemos encontrado lo que queríamos.

Vernon, se encuentra sentado en la pequeña mesa del comedor de su enorme mansión, sus fieles guardias y seguidores, también se encuentran con él.

- Bob, ya ha conseguido transformar la sustancia en droga, por lo que nos lo podemos tomar.

El villano les tiende a sus mejores guardias la droga, estos se la toman un poco asustados.

Vernon, sin embargo, se la toma enseguida, tales son sus ansias de poder que no sabe las consecuencias.

- Bien, dentro de poco será luna llena, los mataremos en ese periodo de tiempo. - dice con una diabólica sonrisa sin percatarse del sufrimiento de los guardias.

Leon va junto a Billy a ver a la manada, ambos tienen que prevenirles de lo que puede suceder.

- Leon, ¿ por que quieren hacernos esto esos tipos? - pregunta asustado el pequeño.

- Por poder, de eso seguro. - dice Leon nervioso.

Los dos hombres lobo avanzan por la espesura del bosque, cada vez más adentro.

Caminan por varios minutos hasta llegar a una pared en la que cuelgan enredaderas y se puede ver el musgo juntado por los años.

Leon palpa la piedra por donde el musgo, pero al llegar al lugar de las enredaderas encuentra un pequeño hueco en la roca, aprieta el hueco y automáticamente, la pared se abre hacia fuera, dejando ver un oscuro pasillo, donde en la puerta, yace colgada una antorcha.

Leon la coge para alumbrar el camino, la visión nocturna no llega a ver en la os oscuridad total.

Cuando los dos entran, la puerta se cierra y el eco resuena por las grises paredes de piedra.

Ambos chicos, continúan por el camino hasta llegar a un lago subterráneo, que por los alrededores hay verde vegetación.

En la orilla más próxima, todos los hombres lobo se encuentran reunidos, hablando.

Hay aproximadamente unos cien lobo, hombres y mujeres.

- ¡ BILLY!

Una mujer de pelo gris y ojos color morado se acerca corriendo a abrazar al pequeño lobo, con lágrimas en los ojos.

- ¡ MAMÁ! - Billy también corre para después ser rodeado por los brazos de su madre.

Un hombre, de pelo marrón y ojos verdes claro se acerca corriendo seguido pro Fenris.

- ¡ Billy! - dice el ojiverde abrazando a su hijo y a su esposa. - ¿ Lo ves Silly?, sabíamos que estaba bien

- Hola Leon,¿ como te han ido las vacaciones? - dice Fenris con una gran sonrisa.

Para Leon, Fenris es como un padre, sólo que no puede estar siempre con él.

- Bien, tengo que contaros algo, a todos - dice Leon mirando a la familia - es importante.

Leon les cuenta todo a la manada, quienes escuchan atentamente, alguna que otra vez Billy interrumpe para dar algún pequeño detalle, el cuello siempre puede ser importante.

Al terminar todo se sume en un silencio sepulcral.

- Osea, que quieren matarnos apuñalándonos por la espalda, han conseguido lo que querían y para colmo ya están aquí y sospechan de ti. - resume el padre de Billy.

- Exacto Arnol, esto es algo serio y peligroso. - responde Fenris.

- No sé yo, pero creo que deberíamos atacar, ¿ no Backy? - pregunta uno de pelo negro y ojos azules oscuro.

Backy había estado en silencio todo el tiempos, lo cual significa que va a tomar una complicada decisión.

- Sí - murmura, aunque lo suficientemente alto para que lo escuchen todos. - sí, es lo mejor. Pero lo haremos en la segunda luna llena, quiero decir, la semana que viene no, si no la primera semana del próximo mes.

- Pero, ¿ que vamos a hacer? - dice Leon dudando.

- Acabar con este maldito poblado. - dice Backy poniéndose en pie.

- Pero... - se queja Leon.

- Nada, suficiente es que te haya perdonado lo de tu amiguita. - le susurra con tono amenazador mientras se acerca a él. - ¡ Se acabó la reunión!

Todos se levantan y empiezan a caminar en dirección a la puerta oculta, al salir al exterior todos se despiden.

- Muchas gracias Leon. - dice Silly con una gran sonrisa mientras que no suelta la mano de su hijo.

- A vosotros por todas las veces. - dice Leon sonriendo, pues Billy era como su hermano pequeño.

- Buenas noches Leon - le despide el pequeño.

Arnol, viene hablando junto con Fenris, pero al final Arnol va con Leon.

- Muchas gracias de nuevo Leon. - dice estrechándole la mano. - ten cuidado con los humanos, la mayoría cogen tu confianza y después vienen con balas de plata. - le susurra al oído.

Eso a Leon le molesta, pero al igual sonríe mientras que Fenris se acerca a su lado.

- Creo que es hora de que te vayas a la cama. - dice poniéndole una mano en el hombro. - pasado mañana será agotador.

Fenris termina de despedirse de Leon dejando sólo al chico en medio del bosque.

Nita mira el techo, ya tumbada en su cama y dispuesta a dormirse, pero no puede, lleva varios minutos intentando cerrar los ojos y dormirse, pero al no ver a Leon la inquieta.

Se mueve un poco para ponerse de lado, es increíble como le hace delta estar con él, necesita que la envuelva en un cálido abrazo para poder quedar dormida.

Mira el despertador que hay en la mesita de noche, maraca la una de la madrugada.

Vuelve a suspirar para luego abrazar la almohada, no es lo mismo ni de lejos pero al menos consigue quedarse dormida.