- Papá ¿ a donde vamos? - pregunta un niño de la edad de seis años. Este tiene el pelo azul y ojos morados. Se sitúa sentado en el asiento de atrás mientras mira por la ventana, viejo el verde paisaje a su alrededor.
- A la casa donde vivía tu madre. - responde Leon al volante.
- Bueno, también vivías tú. - justifica Nita sonriendo.
- ¿ Vamos a ver a vuestros amigos? - pregunta el pequeño.
- Claro Zac. - responde Leon sin apartar la vista del volante. - De hecho nos quedaremos allí para que empieces primaria.
( Se me vino a la cabeza ese nombre :v)
- Vale. - responde Zac mientras mira por la ventana.
Poco tiempo después, llegan al pequeño pueblo. Aunque ahora había varias casas más, por supuesto de el resto de Brawlers.
Nada más llegar, Zac sale del coche y como un rayo ( literalmente) empieza a mirar todo corriendo de aquí para allá.
- ¡ Zac, no uses esa velocidad aquí! - le regaña Nita al ver correr al pequeño correcaminos.
- Nita, ¿ te importaría abrirme la puerta? - pregunta Leon cargando con todo.
- Claro.
Mientras, Zac mira por todos lados, decide ir a una casa color morado. En la que se podía distinguir a una mujer de pelo morado recogido en una coleta y a un hombre de pelo rojo sentado a su lado, mirando como una niña de cabellos morados juega a la pelota.
De una patada, la manda para afuera. Y el juguete cae en las manos del pequeño.
- Lizzy, anda sal por la pelota y ten más cuidado. - la regaña su madre.
- Voy. - responde Lizzy.
Cuando la chica de pelo morado sale, se encuentra a Zac con la pelota en las manos.
- ¡ Hola! - saluda Lizzy mientras le sonríe.
Zac se pone algo rojo, intenta articular palabra pero no sale ningún sonido de su boca.
Él nunca había conocido a una chica, pues al parecer tenía mucha más fuerza de lo normal y los niños no se acercaban a él por miedo.
- ¿ Me puedes dar la pelota porfa? - pide Lizzy señalando la pelota.
Zac asiente y le da la pelota con sumo cuidado, como temiendo lastimarla.
- Gracias ¿ cuál es tu nombre? - pregunta la pequeña.
- Zac. - dice el chico inmediatamente.
- ¿ Eres el nuevo?
Zac asiente con la cabeza.
- Ven, te voy a presentar a mis padres.
Lizzy va a cogerle de la mano al chico, pero Zac se echa para atrás temiendo lasimarla.
Eso a Lizzy le resulta extraño, se acerca despacio hacia él y le coge de la mano. Zac observa todo en silencio y como una piedra quiero. Pero al sentir el calor de la mano de la chica se relaja un poco.
- ¿ Ves? No pasa nada. Vamos.
Ambos pequeños entran a casa de Lizzy, sus padres al verla pasar con Zac sonríen.
- Lizzy ¿ quien es él? - pregunta Colt poniéndose en pie.
- Es el nuevo. - le explica cómo si fuera obvio.
- Entonces Nita ya debe de estar aquí. - dice Shelly sonriendo.
- ¿ Conoce usted a mi madre? - pregunta Zac esperanzado.
- Anda, pero si hablas. - dice Lizzy.
- Sí, somos muy buenas amigas. - dice Shelly ignorando el comentario de la pequeña. - Lizzy, llama al resto y presentaros todos. Van a vivir aquí por el momento.
- Vale, vamos Zac.
Zac sigue a Lizzy por las afueras del pueblo, hasta que llegan a un parque. Donde hay una enorme pista de fútbol vallada para que no se salga la pelota. La puerta estaba abierta y en ella había varios niños jugando.
- Vamos Adam, pásame la pelota. - pide una niña de pelo negro, el cual le llega hasta los hombros, tiene la piel morena y los orbes morados.
- Allá va Lin. - responde el llamado Adam, dándole una patada a la pelota. Este es un esqueleto de huesos color morado.
- ¡ Chicos! - los llama Lizzy. Zac huviera rogado que no gritara. - ¡ Venir a ver al nuevo!
Tras esas palabras, Zac no puede evitar sentirse como un animal enjaulado, donde todos vienen a verle.
Los niños dejan de jugar y se paran en seco mirando hacia donde les había llamado su amiga.
Dejan lo que están haciendo y se acercan a ellos. Zac no podía evitar estar nervioso, pues tantos niños que conocer pero sin saber que les puedes caer bien o no...
- Chicos, os presento a Zac ( es el nuevo), Zac estos son Lin, Rachel, Fred, Adam, Maic y yo Lizzy - explica la chica mientras señala a cada uno ( que hacian un movimiento o un "hola") y por último a ella misma.
Zac responde con un tímido 'hola: también, no era normal que se le acercasen tanto.
- Venga, vamos a jugar. - exclama Lin cogiéndole de la mano y arrastrándolo a la cancha.
Desde lejos, Nita ve con una sonrisa como su hijo se divierte con sus nuevos amigos.
Escucha pasos.
Leon llega a su lado y la abraza por la cintura, Nita apoya la cabeza en el pecho de este sin dejar de mirar hacia la cancha.
- Gracias. - dice de repente Leon haciendo que Nita lo mire, este tiene una gran sonrisa en sus labios y mira con infinito cariño a su hijo. - gracias por haber aparecido en mi vida, no sé que habría sido de mí de no ser por que me diste una oportunidad.
Nita sonríe y abraza al hombre lobo.
- Gracias a ti también por siempre hacer lo mejor para mí y cuidarme tanto. Te amo.
- Yo también te amo.
Nita rodea el cuello de Leon con sus brazos y lo besa apasionadamente. ¿ Quien iba a decir que acabaría..... amando a un hombre lobo?
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Madre mía, ya terminó. Muchas gracias a todos los lectores por votar, comentar y leer la historia. Sólo espero que la hayáis disfrutado al igual que yo viendo nuestros comentarios y leyendo vuestros agradecimientos.
Nos vemos!!!
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Amando a un hombre lobo [ Leon x Nita ] [ Terminada]
FantasyLa familia de Nita se tiene que mudar al campo, debido que en la ciudad sufre acoso escolar. Su padre Bo encuentra un nuevo trabajo en un lindo pueblecito al lado de las montañas, hay muy pocos habitantes y no saben por que. Una vecina llamada Pam l...