Amando a un hombre lobo [ Leon x Nita ] [ Terminada]

38. NO HAY NADA.

Ya han pasado dos años. Dos largos años desde la batalla de la luna llena. Así lo habían apodado el club de brawlers.

Muchos ya habían empezado a salir. Como Colt y Shelly, Bibi y Sandy, Mortis y Tara, Primo y Rosa.

Hasta habían visto que Max tenía algo por Bea y viceversa, también sabían que Penny y Jessie estaban igual. Pero estas no lo terminaban de admitir, o mejor dicho, hacerlo oficial.

Aún así seguían en la misma casa. Pam había conseguido un buen trabajo en la ciudad de Retropolis, al otro lado del mar. Por lo que Shelly se tuvo que hacer cargo.

Bo había vuelto a la ciudad para conseguir nuevo trabajo y solucionar varias cosas con el gobierno.

Nita volvía a casa después de una larga mañana de escuela, por fin era viernes y habían tenido un examen de matemáticas a última hora, es decir, lo peor.

- Madre mía, anda que no tienen ideas de bomberos los malditos robots. - se queja Jacky.

- Bueno, tampoco había sido para tanto. - dice Jessie, quien caminaba al lado de Penny.

- A mí se me ha dado bastante fácil. - dice Nita con una gran sonrisa.

El resto asienten, no le habían preguntado que pasaba entre ella y Leon.

- Eh Nita, ¿ que tal estáis? - dice Bea algo tímida.

- ¿ A que te refieres?

- Pues ya sabes... Entre Leon y tú.

A Nita se le hacen sombra los ojos y se le borra la sonrisa, pero enseguida vuelve a mostrarla.

- Cortamos, ya es agua pasada.

- ¿ Ya no sientes nada por él? - inquiere Max sorprendida.

- Nada, no lo amo. Como os he dicho es agua pasada.

Todas se miran algo desanimadas, estaban seguras de que, si el chico lo había hecho, era por algo.

Nada más llegar a casa, Nita se despide de ellas y entra, decide darse una ducha antes de ponerse a estudiar.

En eso su collar se cae cuando lo iba a dejar en la mesita, este rueda hacia debajo de la cama, Nita suspira, se agacha pero con su mano agarra otra cosa.

La saca junto al collar y la mira con atención, era la carta de amor que Leon le había dejado.

- Madre mía, creía que la había tirado.

La tira por el hueco de las escaleras, ya la tirará a la basura y se va a dar un baño.

Todos los brawlers han terminando de comer, cundo alguien llama al timbre.

- Voy yo. - dice Crow, quien estaba sentado en el sofá.

Al abrir, Crow se queda en la puerta, con la boca abierta y gran expresión de asombro.

- ¡ Crow ¿ quien coño es?! - pregunta Jacky desde el salón.

- Jacky, comportate - le regaña Piper.

Después escuchan una carcajada, Spike va junto a su amigo y da un salto de alegría.

- Vale, ¿ quien narices es? - dice Brock perdiendo la paciencia.

En eso, un chico de pelo azul y ojos amarillos, vestido de una sudadera de camaleón y pantalones cortos azul oscuro, entra empujado por Crow, mientras que Spike se había abrazado a su pierna.

- ¡ Leon! - dicen todos al unísono, entre felices y sorprendidos.

- Eh ¿ hola? Ni que hubiera resucitado o algo. - piensa Leon desconcertado.