El día que nos conocimos (4° parte)

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¡Hola a todos! El capítulo anterior ya fue corregido aunque quizás haya omitido algún que otro error. 

Algo que no aclare antes y nose si ha ocasionado dudas es que si bien intento mantener un orden cronológico en esta serie de historias algunos capítulos hacen un salto en el futuro y el capitulo siguiente puede ser un salto hacia atrás y viceversa. 

Por ejemplo al inicio de este arco (El día que nos conocimos ) aparecían Ren y Camelia durmiendo en la misma cama como una pareja establecida y formalizada pero en "Corte de cabello" por ejemplo aclare que ellos no tienen una relación romántica establecida aun. En otros casos muestro a Camelia con la capacidad de cambiar de forma de raposa a humana (eso quiere decir que han pasado como mínimo diez años desde el final del libro) pero en el siguiente capítulo les traigo a una Camelia que aun no tiene esa habilidad.

Mi objetivo no es organizar cronológicamente esta serie (si bien intento hacerlo en mayor medida) ya que si lo hiciera quizás algunas cosas no encajarían, además escribo las historias ni bien me vienen a la mente porque así estoy sumamente inspirada y no me demoro en escribir ni me bloqueo.

Por otro lado este capítulo cuenta con una pequeña escena subidita de tono, no hay Lemon, sexo, contenido maduro o como quieran llamarle, pero sí es algo subida de tono, para quien no le gusten estas escenas o no quiera arriesgarse a pesar de que no hay sexo literalmente establecido, vera dos asteriscos * poco antes del inicio de la escena, la cual se encuentra al final de este capítulo.

Por último y si alguien llegó hasta aquí después de esta larguísima nota aviso que este capítulo tampoco ha sido corregido previo a su publicación ya que son veintitrés hojas de Word. Espero corregirlo en el futuro pero al ser tan largo no prometo nada. 

Sin más pueden empezar y disfrutar de la lectura.

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Días después Ren estaba en un pueblo humano con Cedreric, le prometió compensar el haber "abandonado la mejor oportunidad de sus vidas por una mujer", en otras palabras estaban ahí para vengarse del trío de mapaches que arruinaron su reputación. Ren ya había hecho su parte del trabajo y Cedreric estaba terminando de hacer la suya. El ancestral pelirrojo esperaba en el centro del pueblo cerca de un área de venta de vendedores artesanales, allí tendría una vista perfecta de lo que estaba a punto de suceder cerca de la fuente.

-¿Este madrina?

-Yo creo que sus gustos son más... rústicos.

Ren movió sus orejas de zorro al escuchar la voz tan familiar, miró a su izquierda y vio a Camelia con un muchacho castaño que no podía tener más de dieciséis años. El chico paseaba por los puestos de vendedores y le llevaba diferentes objetos al hada pero esta los rechazaba haciendo una mueca o un pequeño comentario.

-Vaya, vaya. Pero que bella sorpresa.

Camelia giró a su derecha y vio a Ren caminando hacia ella.

-Lo mismo digo. ¿Qué haces aquí?

-Negocios.

-¿Tu?

Con un gesto de su cabeza ella señaló al muchacho que buscaba desesperado entre los puestos de artesanos. –Trabajo.

-¿princesa?

-Campesina en realidad.

-¿Y qué tiene de imposible eso como para necesitar la ayuda de un hada madrina? ¿Chica difícil acaso?

-No en realidad. El difícil es él. Es hijo de un noble muy conocido pero su padre murió hace un año, no tiene hermanos ni tíos por lo que la fortuna entera pasó a él inmediatamente.

Todas las Hadas del Reino: Vida ancestral  (Serie de one-shots)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora