No hizo falta que Akram permaneciera una semana completa en el hospital para volver a casa, solo se tomaron tres días más para evaluarlo y ver su recuperación que gracias a Alá fluyó de la manera más tranquila, él a diferencia de su padre volvió pronto a casa, Abdel sé quedó por unas dos largas semanas en el hospital, su lesión en el riñón es algo peligroso, a diferencia de Akram que no le rozó la apéndice, al jeque si la bala le afectó.
Las noticias no hablaron más que de la tragedia en el palacio de Dubái, más de un comentarista dio críticas a favor, otras constructivas, culpables, negativas, cosas que costaba debido a que nadie podía salir del palacio sin que la prensa los persiguiera por todos lados.
Nada podían hacer sin tenerlos encima.
Evitaron a toda costa cada quién hablar del asunto, no se mencionó y por más difícil que sea convivir entre ellos sin recordar la tragedias que pasaron, hicieron su mayor esfuerzo que han cumplido.
Akram durante un tiempo tomó las responsabilidades de su padre, obviamente Ágata no le permitía faltar a la universidad, aunque al principio de todo tomaban clases virtuales, por más que son miembros de la familia real, asisten a la escuela, colegios o universidades.
Akram demostró ser un digno sucesor y un digno hijo de su padre, previamente ya se había recuperado de su operación, Ágata siempre estuvo al pendiente tanto de él como de su padre.
Adhara y Akram se han vuelto más unidos, lo que pasó les dio una lección a ambos; crees poder mantener los sentimientos a raya sobre una persona que te ha dañado, hasta que a la misma le sucede algo, ahí descubres cuales son los verdaderos sentimientos que tienes en relación a esa persona, Adhara lo aprendió muy bien.
No puedes llevarte solo de una versión de la historia, debes escuchar una o todas las que hayan para sacar un veredicto, las personas no siempre son lo que dicen, lo que hacen, lo que aparentan, mayormente hay dos caras de la moneda. Suele suceder en ese caso que no hay límites al conseguir lo que te propones, así arrastres a quién dices amar. Akram tomó lo que pasó en su vida, con su madre, con la mujer que decía amarlo por sobre todos, esa lección de vida, no cometerá el mismo error dos veces en la vida, si pasas por un camino y te tropiezas con una piedra, ya sabes que la apartas o no vuelves a caminar por ese mismo destino.
Ágata lo perdonó, estuvo a su lado cuando su vida estuvo en una cuerda floja, le enseñó que siempre se puede perdonar y empezar de nuevo, la vida le dio una segunda oportunidad, su padre está vivo, su hermana supera lo que pasó con las mejores de las sonrisas y sus pequeños hermanos son la alegría que necesitan.
Están todos sentados en la parte trasera del patio, Ágata habla por su móvil dando órdenes a diestra y siniestra, es una mujer dulce, suave y elegante como el whiskey, divertida y peligrosa como el tequila, analiza Abdel mirándola con libreta en manos, bolígrafo y móvil a la oreja.
Sus hijos juegan en el pasto con un labrador que Jamal y llevó a Alim, un cachorro adorable.
Anbar gatea en la pequeña terraza, juega con unos juguetes, los que no son de su agrado terminan lanzados por sus pequeñas manos a algún rincón de la terraza. Bendito humor se carga esa pequeña.
Ya han pasado cinco meses desde lo que sucedió, Abdel está en perfecto estado, sólo que tomando medicamento por un tiempo indefinido. Sus hijos han crecido lo suficiente.
—Ya tengo listo la tarta helada y el bizcocho de chocolate, mandarán un arreglo de globos dorados con negro y tus bellos cuarenta y cuatro años, mi amor —hace una mueca cuando Ágata pellizca sus mejillas.
—Tengo treinta amores —se queja —. Me quieres hacer sentir viejo.
Ágata agarra su estómago cuando estalla a carcajadas, lágrimas por la risa resbalan por el rabillo del ojo.
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La Occidental ©
Ngẫu nhiên"Vive cada día, cada cosa que te depara un día, porque no sabes ese día, que te va a esperar el día de mañana"._MMF Diferentes entre multitudes y la joya más preciada para su alteza. DE MI AUTORÍA. NO COPIAR.