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Capítulo 60: Hermana.

SESENTA 

HERMANA

pasado

—Llegue en un momento romántico me parece.
—Hola Víctor—Bia se aleja de su novio sonriente 
—Espero no haber llegado muy tarde.
—No te preocupes Víctor, todavía no empiezan a nombrar.
—Buenísimo.

Los tres se quedan segundos en silencio hasta que la brasileña voltea a revisar su mochila.

—Te traje un regalo, se lo iba a dar a Manuel pero cuando me enteré que venías quise dártelo yo misma.
—No hacía falta...

Manuel sonríe, él bien sabe lo que es y sabe que a su primo le va a alegrar bastante.
Cuando su chica se lo menciono le pareció muy noble de su parte compartir eso con él.

Ella saca un cd y se lo alcanza.

—Como tu primo me contó de tu gran colección quise traértelo así, pero, voy a mandártelo por el celular también.
—¿Qué es?
—Sorpresa.

La pareja se sonríe cómplice mientras Víctor analiza opciones en su cabeza, nada, no tiene ni idea de que podría ser.
El celular de Manuel suena y el contesta de inmediato.

—Hola mamá—acomoda su celular para que ella pueda ver su imagen.

Cada vez que reponede una de sus llamadas desde el día 30 no puede evitar pensar en todas las pastillas guardadas en su mochila, aunque lo intente le es difícil olvidarse de esa noche.

—Cariño que guapo.
—Eu concordo com isso.
—Hola Bia—Manuel enfoca a su novia.
—Oi señora.
—Veo que estás muy bien acompañado.
—Y aquí está Víctor—lo enseña.
—Bueno, todo en equipo de porras, me encanta ¿Tu cómo estás, cariño?
—Bien, bueno nervioso.
—Amor, todo va a salir excelente.
—Si, eso espero mamá.

Un hombre de uniforme sale del aula principal y todos centran la atención en él.

—Creo que alguien ha salido...
—Bueno, te deseo toda la suerte eh, y te mando muchos besos. Te quiero cariño.
—Te quiero más mamá, nos vemos.
—Adiós chicos.

Los otros dos chicos saludan a la cámara y la conexión termina.
El hombre al que todos le prestan atención lee un papel mientras analiza su entorno, quizá contando el número de personas presentes, todo en silencio.

No hay muchos jóvenes en realidad, quizá porque no son muchos los convocados para está audición pero lo único que eso hace es poner más nervioso a todo el mundo, el miedo al fracaso en estos eventos es algo inevitable.

Los minutos que ese hombre pasa releyendo la lista en sus manos son los más largos que han pasado en días, bueno, al menos para el español...está no ha sido precisamente su mejor semana.

—Buen día jóvenes—por fin dice algo—Bueno, nos imaginamos muy bien como se están sintiendo ahora y queremos decirles que primero lo que tienen que hacer ahora es disfrutar porque está experiencia no se vive todos los días ¿No?—algunos se ríen, pero son pocos—Vamos a empezar a llamar por orden alfabético en minutos. Gracias por su atención y recuerden bien...disfruten esto que la música es para eso.

Se retira.

—Ey—Bia sostiene la mano de su novio—te va a ir excelente Manu compositor...

...

Bia:
Después de que Manu pasa a hacer su prueba y no dice nada la espera se hace eterna para todos, sin embargo yo intento ocultar mi ansiedad para que él se sienta más en paz.

El último chico ya salió, hace un rato largo, por ende sabemos que dentro han estado sacando una conclusión.

—No deberíamos quedarnos.
—Manuel...—Victor impide que él siga echándose abajo y se lo agradezco.
—¿Y si al final no dicen nada?
—¿Por qué harían eso?
—No sé, nunca estuve tan nervioso por algo sinceramente.
—Todo va a estar bien.

Asiente y el hombre que ha estado dando órdenes toda la mañana sale por fin. Todos le prestamos atención en silencio.

—Bueno chicos, primero quiero decirles que estamos realmente admirados de la cantidad de talento que hemos visto hoy pero como ya sabíamos tenemos que elegir, aunque nos cueste. Voy a nombrar ahora a los tres seleccionados en el siguiente orden: 60℅ de beca, 80℅ y beca total.

Víctor toma ahora la otra mano de su primo en silencio, sabemos muy bien que es algo muy importante para él.

—Alvarez Marcos, sesenta por ciento—el muchacho abrazo a su acompañante—Roman Lara—la chica llora y las manos de Manu tiemblan aún más— y por último...Gutiérrez Quemola Manuel. A ver Manuel ¿Donde te metiste?

No se mueve ni hace nada así que soy yo quien lo señala.

—Felicidades chico, estamos muy felices de tenerte. No olviden pasar por las oficinas la primera semana de febrero para hacer oficial su inscripción, muchas gracias a todos.

Desaparece otra vez dentro de la habitación y los festejos se hacen más efusivos.

—Eh ¡Te dije! ¡Te dije!—Víctor se ríe—¡Te felicito!
—No me la creo...
—Pues te la crees eh Manuel porque te lo dijimos, no les iba a quedar opción.

—Que no me lo puedo creer—se cubre el rostro con las manos.

Los chicos no seleccionados pasan y le dan palmadas en el hombro, sin permiso, felicitandolo.

—Te dije, te dije, te dije y vos no me creías Manuel ¡Pero yo te dije!—me acercó y lo abrazo mientras llora—Hay que festejarlo.
—Primero necesito dormir un año entero—se ríe—pero antes de festejar quizá...podrías tu darme mi premio—se acerca y me besa.
—Eh niños, no delante de los solteros.
—Lo siento Víctor—se ríe—quizá en el festejo de esta noche consigas una chica que te robe el corazón.
—No, no dije que estaba mal así.

Recojo sus cosas mientras ellos charlan.

—Bueno, los invito a comer chicos ¿Les parece?
—Por mi encantado, Ana ha cambiado nuestra clase a las 2 así no tengo problema.
—Obviamente que me quedo, no todos los días la gente reconoce lo talentosisimo que es mi novio.
—No habría podido de no haber sido por ti—me acaricia el rostro—Bueno y por Víctor obvio.
—Todo lo hiciste vos primo pero gracias por el reconocimiento.

*

Manuel:
Todavía me parece una locura lo que ha ocurrido está mañana, siento que en cualquier momento voy a despertarme y nada de esto va a haber pasado.

Camino con lentitud a la residencia, en parte porque llegó temprano y en parte porque he comido demasiado, y me suena loco pensar en todas las veces que me he pasado yendo y viniendo de estas clases. Ni yo me lo creo: una beca completa...no puedo, no puedo creer que es real.

...

Entró, aunque es temprano, y no encuentro a nadie por ahí aunque escuchó a Thiago y Ana en la cocina.
Me acerco con lentitud y freno en seco cuando escucho el nombre de mi novia:

—Bia está muy contenta, vi sus historias.
—Bueno si, ellos se quien mucho...
—A veces me recuerdan tanto a Víctor y a mi.

¿Victor? ¿Ana conoce a Víctor?

—Si, que irónico ¿No? Vos y tu hermana enamoradas de un Gutiérrez y viniendo un amor imposible.

¿Hermana?

Suelto la mochila sin poder evitarlo y ellos salen de la cocina casi corriendo.

—Manuel...

Intento que alguna imagen de Helena aparezca en mi mente pero no pasa, no he visto ninguna...¿Ana es Helena?