Capitulo 31

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Christopher y Roberta estaban en el despacho calculando el presupuesto de la semana, ella estaba muy concentrada en los papeles y las tablas de promedios de las semanas anteriores, él por su lado estaba investigando los precios probables y los aumentos que tendrían los insumos que normalmente utilizaban.

Escucharon que golpearon la puerta y él sin levantar la vista de la pantalla pidió que pasaran.

Verónica: Hola...- entró alegre con una bandeja en sus manos, en la que llevaba una jarra de agua y dos vasos de cristal- traje un poco de agua para que disfrutemos...- se quedó en silencio cuando vio a Roberta en el otro escritorio junto a él.

Christopher: muchas gracias...

Verónica: no te había visto- dijo mirando a la pelirroja- ¿también quieres agua? puedes ir a la cocina por un vaso niña.

Christopher: no hace falta... aquí hay un vaso más.

El sirvió el vaso restante y se lo entregó a Roberta, bajó la atenta mirada de Verónica.

Verónica: bueno yo venía a invitarte a dar un paseo...- dijo mirando a Christopher.

Christopher: ¿un paseo?... no puedo estoy trabajando.

Ella miró de reojo a Roberta y se acercó a él bajando la voz.

Verónica: por favor, hace mucho que no salgo a montar y...

Christopher: puedes hacerlo si quieres.

Verónica: pero quiero que vengas conmigo, quiero pasear en el caballo que me regalaste...- Roberta la miró discretamente- podemos visitar nuestro lugar favorito como hacíamos antes... ¿Recuerdas?

Christopher: eso fue...

Roberta: por el trabajo no te preocupes, yo puedo terminarlo es algo sencillo... tu esposa tiene razón.

Verónica: lo ves, esta niña si entiende- Roberta rodó los ojos disimuladamente.

Roberta: bueno yo iré por agua... sólo deja todo como está, yo termino- dijo mirando a Christopher.

Verónica: puedes tomar de la que traje, no hay problema.

Roberta: muchas gracias pero soy intolerante a... ¿de qué es?

Verónica: limón- dijo sonriendo falsamente.

Roberta: si, al limón...- le devolvió la misma sonrisa falsa y salió de la habitación.

Christopher no pudo evitar una divertida sonrisa que se borró en cuanto Verónica lo volteó a ver.

Verónica: ¿entonces?... ¿te espero afuera?

Christopher: ¿de verdad tiene que ser ahora?

verónica: si... por favor- él suspiró resignado, sabía que ella no cedería y aunque pudiera negarse en ese momento estaba seguro que ella seguiría insistiendo.

Christopher: esta bien... pero será rápido.

Verónica: claro que si, lo que tu digas- tomó su mano y prácticamente lo arrastró hacia el establo. En el camino se encontró con Roberta pero ella le apartó la mirada.

El paseo que recién comenzaron fue silencioso, ella trató de iniciar una conversación pero él evadia sus preguntas o respondía solo lo necesario.

Verónica: no sabes cuanto extrañaba estos paseos por el campo, montar a caballo y la frescura en el aire es única ¿no crees?- él la miró negando.

Christopher: debo admitir que me alegra que hagamos este paseo.

Verónica: ¿de verdad?...- preguntó sonriendo.

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