¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Nunca supe con exactitud cuando comenzó a gustarme Jisung.
Supongo que tenía tan normalizado el hecho de darle besos que ahora lo hacía sin titubear. Y no me refería a besos en la mejilla o en la frente (bueno, sí, también), sino a besos como tal.
Sí, gente, labio con labio.
Déjenme les cuento como va el asunto.
Empecé a besarlo a los catorce, si mal no recuerdo, algo así cuando él tenía doce y se paseaba por el barrio junto con Chenle buscando algo que hacer aunque fuera barrer la calle.
El grupo se formó gracias a que yo intervine de manera no accidental. Los vi tan tranquilos caminando ese día que sentí que debía lanzarles una bomba de agua. Lo hice y acto seguido se nos veía a los tres cenando en mi casa y compartiendo teorías sobre el fin del mundo.
Nos habíamos vuelto cercanos en menos de diez minutos, así que al siguiente día los presenté ante mi grupo que consistía de Haechan, Jeno y Renjun (años después se uniría Mark, pero eso es otro tema).
Pasamos toda esas vacaciones jugando de arriba a abajo sin descanso. Hacíamos pijamadas entre todos, comíamos juntos, viajábamos juntos. Pronto ya nos considerábamos más familia que la misma.
Una de esas tarde del verano, en donde inició todo, besé la mejilla de Jisung. Él se apartó consternado, pero yo era una persona bastante cariñosa y afectiva, así que supongo que en ese momento no pude evitar besarlo al igual que lo hacía con todos.
Pero algo hubo de diferente... y es que me encantó.
Desde entonces besar a Jisung se volvió mi costumbre más marcada. Quería pasar veinticuatro siete con él y besarlo por doquier, abrazarlo y mimarlo como si de un bebé se tratara.
Rato después, uno de esos días en los aún era mucho más bajo que yo, conseguí que me abrazara por unos instantes. Hacía amago de querer separarse, pero yo por reflejo lo atraje aún más y sostuve su cabeza entre mis manos. Se quedó quieto esperando quien sabe qué, pero lo que me hizo seguir fue contemplar aquellos labios formando un puchero causa de mi apretón. No lo pude evitar, claro, y solté un piquito sobre ellos.
Pareció descolocarse, pero luego del primero mi cuerpo ya no pudo ser retenido por más tiempo, por decirlo así, y le di unos cuantos más hasta que finalmente logró apartarme totalmente sorprendido.
Nunca supe si me había apartado porque no le gustaba, porque había sido repentino o porqué estábamos en un lugar público.
Sin embargo seguí reproduciendo aquella práctica hasta el día de hoy, en donde algo en específico me hizo percatarme que no era tan común como pensaba y que probablemente estaba colado por él.
No estaba equivocado. Sí, me gustaba Jisung.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
holi
victoria, por qué escribes más historias cuando aún no actualizas las que ya tienes??
pORQUE ES MI CUENTA Y HAGO LO QUE YO QUIERA además el jaesung es mi shipp favorito de los dream y necesitaba subir algo así a mi perfil visto que no hay mucho jaesung aquí en gaypad so
