Nada más salir del cine volvimos a mi casa, sin mucho más que hacer.
Jisung se decidió por un helado de galletas y crema, mientras que yo elegí el sabor café. Así que mientras nos abríamos paso en el centro, nos devorábamos los helados hasta llegar a nuestra calle.
Abrí el portón de mi casa, dejando entrar a Jisung frente a mi, cuando Haechan llegó corriendo a mi, sosteniéndome por el brazo y recuperando el aliento.
—¿Hyung?—preguntó mi pollito desde el umbral de la puerta.
—¿Y a ti que te pasó? Pareces estar corriendo de un perro, como la otra vez—lo ayudé a incorporarse.
—Jisung, puedes entrar, tengo algo que decirle a Jaemin—respondió hacia el menor, quien entornó las cejas, confuso.
Me giré hacia él, guiñándole el ojo y diciéndole con la mirada que entraba enseguida. Finalmente me hizo caso y se adentró a la casa.
Me giré hacia mi amigo.
—¿Me contarás ahora o aún no puedes respirar?
—Le conté a mi papá que me gusta el vecino.
Me atraganté con mi propia saliva. Mi amigo había salido del closet... o bueno, algo así.
—¿Y qué pasó? ¿Te dijo algo? ¿Se enojó?—lo zamarreé por los hombros, interesado.
—Me fue sorpresivamente bien, es más, ¿no ves que trabaja con esto de las empresas importadoras y cosas por el estilo?
—Sí...—le seguí.
—Pues resulta que gracias a eso, siempre tiene mucho de todo. Así que una vez solté que me atraían las mujeres y los hombres me dijo que estaba bien, algo así que me había enseñado a comer de todo así que estaba bien...
—Ve al punto, por favor.
—El tema es, que llegó hoy a mi casa con una caja del porte de todo mi torso, repleta de condones y lubricantes, cremas y una infinidad de cosas por el estilo. No sé si cree que tengo mucha suerte en el amor, o que siempre ando follando, pero el tema es que no se que hacer con todo.
—Por favor no me digas que...—me cortó, colocando una bolsa sobre mis manos.
—¡Feliz cumpleaños! Este es tu regalo adelantado. No hay de qué.
—¡¿Estás loco?! Yo estoy más que solo. La única acción que tengo medianamente es Jisung, y es medianamente... ¡porque no tenemos nada!
—Me da igual si se lo regalas a tu mamá o a quien sea, necesitaba deshacerme de la mayoría antes de que mi mamá empezara a preguntar cosas. Lo creas o no, no eres al único al que le regalé cosas; también le di a Jeno, Renjun, Chenle, Heejin y Jiwoo, y aún me queda mucho. Creo que tendré que regalarle también a Jungwoo y Jaehyun.
—Tu realmente piensas que los voy a utilizar.
—Es mejor prevenir que curar, mi vida. Después de todo sin globito no hay fiesta.
Suspiré, sintiendo una vena palpitar en mi cien.
—Al menos espero que te resulte algo—me resigné.
—Eso espero, si no es el caso, siempre lo puedo vender. Deséame suerte, hermano—fingió llorar.
Reí, palmeándole la espalda.
—Que la fuerza esté de tu lado.
Entré a la casa sintiéndome conmocionado. Dejé todo sobre la isla, recordando que mi madre no volvería hasta las diez como mínimo.
—¿Qué es eso?—Jisung me sorprendió.
Me afirmé el pecho.
—Necesito un nuevo pulmón. Casi me matas del susto.
—Lo siento—rió, achinando los ojos.
Le apreté ambos cachetes sin lograr entender cómo era tan lindo.
—Haechan está repartiendo arsenal a todos lo seres vivientes. Me regaló un par de cosas—abrí la bolsa, sin esperar su contenido.
Era una caja de condones, sí, pero no de estas donde vienen doce o algo por el estilo. Esta era enorme, y a juzgar por su paquete debían venir más de ciento cuarenta, con sabores surtidos, por qué no.
En la bolsa también venían varios lubricantes, algunos más específicos que otros, y también varias cremas, con el mismo tamaño aproximadamente de mi cabeza. Inclusive alcancé a ver unas especies de pastillas que adormecen la boca. A esta altura nada me sorprendía.
—Dios...—suspiró Jisung, también sorprendido.
—Estaré hasta abuelo gastando esto—tomé entre mis dedos un condón rosado pastel, poniéndolo en la punta de la nariz de Jisung—. ¡Mira, hay durazno!
Rió negando, bajando el sobre de su cara.
—Bueno, nada que hacer, a estrenar las cosas se ha dicho—jalé a Jisung a mi persona, abrazándolo por la cintura y besándole los labios—. ¿O acaso le temes al éxito, bebé?
Mordió su labio, rodando los ojos.
—Claro que no. Vamos.
Y esa fue... ¡Alto! ¿Qué? ¿Había escuchado bien?
—¿Quieres tener sexo conmigo, Jisung?—no pude evitar hacer como pez, abriendo y cerrando los labios y quedando estático.
—Bueno, tampoco lo digas de manera tan ordinaria... ¿podrías endulzarlo un poco, no?—rió tímido, rascándose la nuca.
—Espera, no me creo lo que estás diciendo, ¿estás diciendo que te gustaría que yo...?—me tapó la boca.
—No lo digas, por favor. Conociéndote soltarás cada vez una expresión peor a la anterior... Y después de todo, solo es si tú también quieres.
—Dios, claro que quiero, bebé, pero no lo sé, me sorprende. La primera vez suele ser algo importante, ¿sabes? Siento que te he arrebatado todas tus primeras veces...
—Por favor, hyung, ha sido así porque yo lo he querido. Pienso que no es muy diferente de lo que hicimos ayer... Además, siempre es mejor hacer las cosas con quien tengas confianza, ¿verdad?
Suspiré, dejando caer mi cabeza hacia atrás sin saber cómo proseguir. Esto me estaba matando. Mi pecho estaba quemándome y sabía que no podía aguantarlo más ahorcandome.
—Verdad—solté.
Una última vez, Jaemin, puedes soportarlo.
—Bien. Hagámoslo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
sE VIENE GENTEEEE!!!!11!! AAAAAAA!!!1
he de decir que ya tengo terminada esta fic en borradores so, llega hasta el capitulo 33 más el epílogo y uno que otro especial que posiblemente saque, todo depende en si ustedes quieren <3
los próximos caps se vienen intensos, tanto que incluso llegaremos a conocer aún más a jaemin y seguramente les sorprenderá, pero tendrán que esperar hasta que se me ocurra actualizar de nuevo