Capítulo extra II.

607 80 4
                                    

Capítulo extra II:

Doy otro golpe al saco e inspiro con fuerza, había venido al gimnasio a entrenar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Doy otro golpe al saco e inspiro con fuerza, había venido al gimnasio a entrenar. No recuerdo cuando fue la última vez que pise este lugar, me encontraba ansioso; ya que no todos los días te enteras que serás padre. Nos ha tomado por sorpresa y además es casi imposible que el pequeño sobreviviese a lo que Amber pasó. Pero esa gruñona tenía a los Dioses de su lado y no había duda de ello. Hasta Acacia lo estaba, porque mi chica mencionó aquel sueño que tuvo, donde mi hermana le decía que no era su momento. ¿Acaso ella nos seguiría cuidando al lado de los Dioses? Parece que sí y lo agradezco, no imaginan cuanto.

Que va, también debía agradecerle a ellos; por no dejarle sola un momento. Por cuidarle y también a Lía. Joder. Esos días fueron el infierno mismo, donde Amber no despertaba y el miedo a perderle, casi me vuelve loco por completo. Pride debe de encontrarse junto a Hades y ojalá le haga pagar todos y cada uno de sus pecados. Merecía el peor de los castigos, me quito a Acacia y luego quiso hacer lo mismo con la mujer que amo. Creo que nuca entendí lo que él sentía hacia mí y ello fue un grave error, tarde lo comprendí. Tal vez en mis acciones pasadas, le di alguna clase de esperanza y no fui consciente de ello en ningún momento. ¡Maldición! ¿Por qué debo pensar en ello ahora? ¡Seré padre! Eso es lo más importante y deseaba no cagarla, de verdad lo hago. Nunca imaginé que algún día tuviese la oportunidad de formar una familia, ya que me había dejado cegar por aquella venganza que por poco acabó por consumirme. Lo sé, gran parte era culpa mía porque no supe parar a tiempo y por ello casi pierdo a la mujer de mis jodidos sueños.

Pero supongo que la vida me esta dando una segunda oportunidad, donde no debo cagarla en lo más mínimo. Cuidaré de mi chica y de ese pequeño o pequeña que viene en camino. Amber continuaba en recuperación aún, ya que todo lo sucedido con Demetrios había sido lo bastante jodido. Y en parte fue culpa mía, por no tomar precauciones; debí imaginar que iría detrás de mí luego de nuestro encuentro en aquel peligroso lugar, donde casi no salgo con vida sino fuera por Marshall. Ese imbécil demostró ser de confianza y sigo sin poder dar crédito a ello.

Vuelvo a dar otro golpe al saco, comenzaba a cansarme. Había venido a mi viejo gimnasio, ya que todavía nos encontrábamos en Grecia; no era conveniente viajar con Amber en su condición. Lo aconsejable era esperar a su completa recuperación, la cual puede tardar un poco más de lo esperado. Vamos, demoró tanto en despertar y todos temimos lo peor. Que esperar a regresar a Londres, no suponía un problema. Aunque tenía a sus padres y a Isaac viviendo en casa de mi padre. A Lía le fascinaba tener visitas y se llevaba muy con Liz, la madre de mi chica; pero eso ya lo saben. Creo que ha estado muy sola desde que me fui, aunque Fabio este a su lado; la ausencia de Acacia se notaba y eso le dolía.

He pensado en sugerirle que vaya a Londres y así tenerle más cerca. Aunque no me gusta alarmarle, Nash Pride sigue suelto y si recordamos, su hermano era un psicópata. ¿Quién nos asegura que él no lo sea? Pero recordando sus acciones pasadas, lo es; carajo. Podría querer regresar a por Lía ¿y quién se lo impediría sino estoy aquí? Exactamente: nadie. No es que no confíe en mi padre, no se hagan una idea errónea; pero a veces trabaja demasiado y se integra muy poco a su vida. La ama, lo tengo presente; pero en ocasiones es algo ausente. Creo que ha sufrido lo suficiente, como para volver a caer en las garras de ese infeliz de Nash.

Sálvame #PremiosPlaneta2020 #CHW2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora