Our Dark Side {Kylo Ren}

29. No a ti

A la mañana siguiente tocaron la puerta de mi habitación. La abrí encontrándome a alguien oculto tras un gran ramo de rosas.

- ¿Hux o Ushar?- Le pregunté alzando una ceja.
- Trudgen.- Respondió aportándolo.

Me hice a un lado para dejarlo pasar a mi habitación.

- Esto no arreglará lo que pasó a noche.
- Lo se.- Me respondió. - Solo quería pedirte perdón de parte de la mayoría, sin incluir ni a Lilith ni a Kylo.
- ¿Los demás que han dicho?- Dije observándolas.
- Hux lleva toda la noche sin dormir y Ushar ha estado entrenando.
- ¿Y Kylo?
- Ahora mismo con una esclava Twi'lek. Pero seguro que está preocupado.
- Por lo único que se preocupa Kylo es por agradar a Snoke.
- ¿Aceptas nuestras disculpas?-Me preguntó alzando las cejas.
- Acepto tus disculpas. Ellos simplemente ya no son nadie.
- ¿Podrás?
- No.

Me encontraba sentada ante los caballeros de Ren, Hux, unos comandantes y Phasma. Ninguno decía ni una palabra y la ausencia de Ren me estaba desesperando.

- ¿Alguien sabe donde coño está Ren?-Pregunté enfadada.

Se abrió la puerta doble dejando ver a Ren con su típico traje negro y su casco.

- Debería de cortarte las manos por llegar tarde.- Le reclamé.
- Has llegado temprano.- Me respondió.
- Siéntate.- Le ordené.
- No sigo órdenes tuyas.- Dijo sentándose en la silla que había al lado mío.

Me levanté mostrando un mapa de la galaxia.

- Nos falta la pieza, y estamos tardando en encontrarla.- Dije.
- La chica no la tiene.
- ¿Entonces como coño llegó a Isla de Luke Skywalker?- Preguntó Kylo.
- Quizás no deberíamos de centrarnos tanto en buscar la pieza que nos falta, podríamos acabar primero con los rebeldes.
- General Hux, la rebelión tiene ventaja ante nosotros gracias a esa pieza, tenemos que encontrarla y destruirla.- respondí sintiendo como la palabra general antes de su nombre le escocía poco a poco viniendo de mi parte.

La reunión terminó y fueron retirándose poco a poco de la sala hasta que quedamos Kylo y yo, como siempre.

Iba a recojer mi capa cuando.

- Te noto agitada.-Me dijo viéndome desde el otro lado de la mesa.-¿Donde has estado?
- ¿Que te importa?- Le respondí sin mirarlo a la cara.
Mírame a los ojos.-Me exigió.

Yo seguí recogiendo mis cosas como si nada, pero en un despiste agarró mi rostro y me obligó a mirarle.

- Tus ojos están rojos ¿Que has consumido?
- Da igual. -Aparté la mirada cansada.
- Respóndeme.
- ¡¿Qué más te da Kylo?! Si yo al lado de Lilith no soy nada.
- Estaba furioso.
- Sabéis que es una arrastrada y aun así continuáis lamiéndole el culo todos los días. A ti lo único que se te ocurre es llamarme puta delante de todos.

Él se quitó el casco.

- ¿Te crees que no vi la visión que tuviste esa noche? ¿Qué no se lo que sueñas?
- Eso es siniestro.- Le respondí.
- Sabes que nunca te haría daño, no a ti.

Ambos nos miramos a los ojos, lo que basto para que Kylo me cogiera de la cintura y me subiera a la mesa dándome un beso. No era ni muy apasionado ni muy tranquilo, simplemente era un beso. Iba a introducir una mano dentro de mi ajustada camisa pero lo detuve.

- No.- Dije en seco. Levanté la mirada hacia él.- Demasiado puta para el líder de la galaxia.

Me bajé de la mesa y salí de allí dejándolo solo, y posiblemente pensativo.

Estaba ordenando mi habitación cuando la vi. Era la chica, de pie, dentro de mi habitación.

- Con que tu eres la chica.-le dije.
- Te conozco, eres la compañera de Kylo.
- Cierto. - Caminé por la habitación en silencio.
- ¿Porque nosotras?-Preguntó.
- Sabes que Ben solo no volverá, ¿No?-La miré.
- Aun hay conflicto en él.
- El mismo conflicto que había en su abuelo, y mira como acabo.
- Te equivocas.
- Niña, lo conozco desde hace muchos años, en cambio tu....
- Él y yo tenemos una conexión, así como nos vemos nosotras.
- Que no te engañe, Snoke sabe jugar muy bien sus cartas.
- ¿Porque no me intentas matar?-Preguntó después de un corto silencio repentino.
- ¿De verdad piensas que intentar matarte serviría de algo?- Levanté una ceja.- Porfavor, sabes manejar un sable láser sin haber luchado con uno en tu vida, no me serviría de nada.
- ¿Me tienes miedo?
- ¿Miedo? No le tengo miedo a Snoke menos voy a tenértelo a ti.- Respondí mirándome las uñas. - Vete con cuidado niña, que no intente matarte ahora no significa que no lo intente mañana o cualquier otro día.

La visión se detuvo como si de magia se tratase, y fue en el momento perfecto.

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Holaa, quería deciros que si alguien quiere que haga algún "remember" en específico me lo puede dejar en los comentarios.