Domingo.
“Hola Lodo.”
“Hola Tomi.”
“¿Cómo estás?”
“Bien ¿Y vos?”
“Bien ¿Qué hacías?”
“Nada, acá uso un poco la computadora ¿Vos?”
“Miraba fotos nuestras… ¿Cómo te va en Italia?”
“Bien, estar con mi familia me hace bien.”
“Me imagino… Lodo, no quiero terminar mal con vos, fuiste muy importante.”
“Vos también fuiste muy importante para mí…”
“¿Qué tal Diego? ¿Ya están mejor?”
“Si, más o menos… Todavía tiene que terminar con Clari, y eso me pone nerviosa.”
“¿Por qué?”
“No quiero terminar mal con ella.”
“No creo que se lo tome tan para mal… Tampoco creo que Diego se lo diga.”
“¿Por qué?”
“Diego siempre fue de esconder cosas y asuntos, a lo mejor teniéndote a vos en Italia y a ella en Argentina todo le sea más fácil.”
“¿Qué esconde?”
“¿Te contó del dije?”
“No…”
Le mandé un mensaje a Diego.
“¿Qué es lo del dije?”
“¿Clara te contó?”
“No interesa quién me contó ¿Qué es lo del dije?”
“Es un dije, que dice que me hizo feliz algún día, es decir, que ya no lo hace, pero que sí lo hizo.”
“¿Por qué no me contaste?”
“Porque no pensé que era necesario…”
“¡Era muy necesario Diego! ¿Sabes que feo es enterarte de otra persona?”
“Lodo, calma, es solo un dije que simboliza el cierre de la relación. Mañana voy a ir a pasar un tiempo con vos…”
“¿Y qué excusa le vas a dar a Clari?”
“Ella me dijo, quiere que compre una revista de novias y la editorial está cerca de ahí, le dije que me quedaría unos días con vos porque ella no me puede prestar atención por las grabaciones.”
Bajé rápido las escaleras.
—Lodovica, más te vale ir dejando esa costumbre de bajar tan rápido, te vas a caer.
—Mamá… No va a pasar nada— comenté cansada—. ¿Se puede quedar Diego a dormir? Son solo unos días…
—No sé, háblalo con tu padre…
—Dale mamá, por favor, así podemos ir a que me hagan la ecografía…
—¿Qué ecografía?
—Una que me mandaron, pero quiero que Diego este conmigo, por favor mamá…
—Está bien… Pero escucho algo raro y se va— asentí.
—Tranquila mamá, no va a pasar nada…— oculté o intenté ocultar una risa.
—Más te vale Lodovica, porque con mellizos nos es suficiente, no necesitamos más nietos.
—Entiendo mamá…
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La cosa más linda (Dievica)
RomanceElla. Él. Clara. Tomás. Su compañera de trabajo. El novio de su amiga. Su novia. Su novio. Cuando los roles se confunden y forman la cosa más linda ¿Que puede pasar?
