Tierra 83 SuperCorp

capitulo 28 Reacción y maldición

Kara

Al escuchar la detonación, redirigí la mirada y pude observar en cámara lenta a aquel proyectil verde partir el aire. Para cuando pasó frente a mí... fue mi cuerpo quien tomó el control arrebatándome toda capacidad de decisión. Me zafé del agarre de Corben dándole un cabezazo y corrí a toda velocidad quedando frente al proyectil y de espalda a Lena y la pequeña. Por un momento se hizo el silencio, pero al poco tiempo escuché a voz de Cyborg ... "¿Pero qué mierda?" preguntó incrédulo y rabioso en una tenue voz.

Todo parecía seguir pasando en cámara lenta cuando giré un poco el rostro atraída por su voz y pude percibir que su mano dejaba el brazo de Lena y se dirigía peligrosamente hacia arriba... "su cuello" pensé... Aquello me heló la sangre provocando que mi cuerpo recordara antes que mi cabeza. En mili segundos giré sobre mis pies y corrí para quedar frente a ellos, tomé a Lena por la muñeca con mi mano izquierda y, liberándola , la pegué a mi cuerpo soltando su muñeca y rodeando sus hombros con mi brazo de manera protectora al mismo tiempo que con la mano derecha le daba un fuerte puñetazo a Cyborg lanzándolo unos metros lejos de nosotras.

- ¿Estás bien? – Pregunté a Lena con una gran sonrisa para reconfortarla luego de unos segundos y con Cyborg en el piso.

- Sí, gracias. – Respondió aun algo nerviosa luego de separar un poco su rostro de mi cuello y alzar la mirada.

- ¿Lena? – Era la pequeña Ana quien seguía en el piso aun asustada.

- ¡Ana! – Al instante Lena se zafó de mi agarre y corrió hacía la pequeña arrodillándose a su lado para verificar que estuviera bien.

- Tienes sangre... - Dijo la pequeña asustada luego de que Lena llegara a ella y comenzara a revisarla, señalando la mancha en la blusa blanca de la CEO.

- ¿Qué? – Preguntó confundida dirigiendo su mirada al lugar que señalaba la pequeña, tocó la mancha y al instante levantó la vista enfocándose de muevo en mí. Yo la había seguido con la mirada y aun con la sonrisa en el rostro, pero seguía estática en el mismo lugar, podía comenzar a sentir un ardor muy familiar en mi abdomen y mi cabeza comenzaba a llenarse con las imágenes de lo sucedido.... Me había movido, salvé a la niña y a Lena con movimientos imposibles a los ojos de mis enemigos dejando ver más de lo que debería arriesgando la misión. - ¿SuperGirl? – Preguntó asustada, lo que me hizo reaccionar a medias, la sonrisa se fue atenuando mientras dirigía la mirada a mi abdomen al mismo tiempo que llevaba mi mano derecha al sitio alejándola poco después. 

Mi mano quedó cubierta del líquido carmesí proveniente de la perforación dejada por la bala... "el calibre debió ser más grande de lo que imaginé..." pensé mientras veía la cantidad de sangre en mi mano. Sabía que no moriría, que mi cuerpo era lo suficientemente fuerte para resistir hasta que me atendieran. En mi entrenamiento mis inventos me dispararon más veces de las que pudiera recordar dejándome heridas similares. A lo que debería prestar atención es a lo que vendría después y, sin embargo, al volver a enfocarme en aquellas esmeraldas en mi mente sólo estaba un "llegué a tiempo" lo que dibujó una pequeña sonrisa en mis labios. Por la pérdida de sangre, mis piernas comenzaron a perder fuerza provocando que me tambaleara un poco haciendo evidente que caería dentro de un momento a otro. - ¡SuperGirl! – Gritó Lena antes de correr hacía mí.

La azabache sostuvo mis brazos viéndome con preocupación, el sonido de autos y sirenas acercándose comenzó a llenar el ambiente. "¿Pero qué demonios ha pasado?" Escuché una voz que debía reconocer... "No lo sé, pero al menos el tiro llegó a ella..." Aquel era Cyborg , redirigí la mirada por un momento y lo vi ponerse de pie mientras hablaba, "Hay más" pensé. "Es mejor que nada, salgan de ahí..." Aquella voz conocida estaba cerca, enfoqué la mirada un poco más lejos del estacionamiento... mis piernas al fin cedieron y comencé a caer, Lena intentó sujetarme, pero no tenía la fuerza para sostener el peso de mi cuerpo... mientras caía me enfoqué un poco más y pude verla... ese cabello y esa mirada...no podía ser verdad... mis parpados también se rindieron cerrándose dejándome con la imagen de esa mirada prepotente y victoriosa grabada en mi cabeza.