Cap. 8

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-¿Qué clase de amigo Elle?- preguntó Akephalos.

-¿Hace un momento, un lobo nos salvó, pero ese lobo se convirtió en un hombre apuesto...

-Un chaman- el elfo la interrumpió, y se calló por un segundo-.Perdón, no debí interrumpirte.

-Ese hom...lobo, ya lo había visto antes.

-¿Dónde?, Si puedo preguntar- esta vez Akephalos era más cuidadoso con sus palabras.

-En mi entrenamiento, yo estaba peleando contra unas bestias. Yo estaba muy débil y también muy herida, entonces lo vi, estaba entre los árboles, era blanco, sus ojos eran de diferente color y esa cicatriz...- se calló y se puso a pensar mientras veía al vacío.

Akephalos chasqueo sus dedos para que Elle reaccionara-¿Y después que pasó?- preguntó impaciente.

-Me dijo "No te rindas", y después yo quede inconsciente. Eso es todo lo que recuerdo de él.

-¿Y ahora no te dijo nada más nuestro "amigo"?

-Solo me dijo que...- se quedó pensando por un segundo- ¿Qué es un gremio?

-¡Vaya!, pues, como decirlo- el elfo se rasco la cabeza buscando las palabras más exactas, luego habló-. Un gremio es un grupo enorme de mercenarios, a veces son un grupo grande de amigos, otras veces son un grupo de personas con diferentes formas de pensar pero con el mismo sueño u objetivo... y a veces es un ejército. ¿Porqué la pregunta?

-Me dijo que... El gremio Manticora me espera.

La sonrisa de Akephalos se esfumó de su rostro y se levantó del suelo rápidamente, como si su cuerpo no estuviese dañado.

-Tenemos que irnos Elle- dijo bruscamente mientras la jaló de la mano.

Elle se resistió al jalón y evitó avanzar-Oye, espera, ¿no quieres descansar un poco?, tu cuerpo está mal y apenas esta amaneciendo.

-No hay tiempo, mi gente nos espera- siguió insistiendo mientras seguía jalándola.

-¿Tu gente?

-Mi gremio, el gremio Iluminados. Serás parte del gremio, Elle, has mostrado mucho valor y eso suficiente para entrar a nuestro gremio.

Elle se soltó bruscamente del brazo del elfo-Y dime, ¿por qué debo estar en tu gremio?

El elfo se adelantó a recoger su pequeña bolsa de tela y volver a ponérsela en el cinturón.

-Para acabar con el gremio Manticora y su líder, Oz.

Un resplandor paso por la mente de Elle y un recuerdo inundó su cabeza.

<<-¡Oz, ayúdame por aquí!

La guerrera Elle peleaba junto a "El amo de almas" contra un ejército de orcos.

Los orcos portaban enormes espadas y hachas. Su cara era horrible; tenían dientes deformes y sobresalientes, ojos y nariz pequeña, orejas puntiagudas como las de un elfo, el moco gelatinoso sobre su piel no le ayudaba a mejorar el tono verdoso de esta y sus ojos eran tan rojos que parecía como si estuvieran inyectados en sangre; la mayoría llevaba armaduras de cuero negro, otros pocos llevaban armaduras negras pesadas como la de Oz.

Estaban rodeados de orcos en un terreno árido cerca de unas montañas, matorrales secos y no había señales de vida más que de los orcos y los guerreros, era territorio volcánico. El cielo era morado y era de noche, se podía observar libremente las constelaciones y las galaxias, las dos lunas en el cielo iluminaban todo el terreno.

Elle peleaba ferozmente con su espada, mientras que Oz retenía a los orcos con hechizos.

-Okey, enseguida voy- un resplandor verde cubrió la mano de Oz y musitó unas palabras-.Ustedes que murieron luchando en el campo de batalla, guíenme, porque yo soy su amo, maestro y su nuevo rey.

Un ejército de esqueletos con armas y armaduras, destrozadas, se levantó de los suelos y comenzaron a matar a los orcos.

-No entiendo porqué nunca haces esto desde el principio, Oz- gritó Elle mientras mataba un orco con su espada, sonaba un poco molesta.

-Porque sería aburrido si solo dependo de ellos, además, me divierte usar mi magia y asustarlos- contestó mientras lanzaba una esfera de energía hacia un orco-.Y tu sabes que me gusta divertirme.

Aunque la mayoría de los orcos estaban muertos, unos seguían luchando, los orcos eran unas criaturas muy orgullosas y nunca retroceden en una pelea.

-Nunca me dijiste como conseguiste tantas almas.

Pasaron varios segundos antes de que Oz respondiera la pregunta.- A su tiempo lo diré, pero ahora acabemos con esta misión, ¿sí?

-Tu tuviste que matarlos a todos, ¿o no?-mencionóElle con cierto tono de decepción hacia el nigromante>>.    

Secreto de NigromanteWhere stories live. Discover now