____ no lo creyó, al menos al principio. Tommy le contó lo que le había dicho el hombre en el confesionario. Ella no lo interrumpió, pero a cada nuevo detalle podía sentir cómo se le iba tensando el cuerpo. La verdad es que, durante uno o dos segundos, ____ se sintió aliviada por ser ella el blanco, y no su hermano. Tommy ya tenía bastante con lo que lidiar.
—Te lo estás tomando muy bien.
Su hermano hizo el comentario en un tono de voz casi acusatorio. Tanto él como Harry estaban esperando a que asimilara la información y la observaban con intensidad, como si fuera una mariposa atrapada bajo un vaso.
—No sé qué pensar —respondió—. Me niego a creer que sea verdad lo que dijo.
—Tenemos que tomarnos la amenaza en serio —advirtió Harry.
—Esa otra mujer de la que habló... Millie. ¿Dijo que la había matado hacía un año? —preguntó.
—De eso se jactó.
A ____ la recorrió un escalofrío.
—¿Pero nunca se encontró su cuerpo?
—Dijo que la enterró bien hondo, donde nadie pudiera encontrarla —contestó Tommy.
—Hemos metido el nombre en el Programa de Detección de Criminales cientos —terció Harry—. Su sistema informático almacena la información sobre homicidios conocidos sin resolver y busca posibles concordancias; a lo mejor tenemos suerte.
—Creo en todo lo que me dijo; creo que mató a esa pobre mujer. No lo estaba inventado, ____.
—¿Lo viste? —preguntó la aludida.
—No —contestó—. Cuando me dijo que serías la siguiente víctima, puse fin a la conversación. Me levanté de un salto y salí. —Se detuvo para sacudir la cabeza—. No sé qué pensé que iba a hacer, estaba muy afectado.
—¿Pero no lo viste? ¿Se había ido ya? ¿Cómo puede alguien moverse tan deprisa?
—No se había marchado.
—Le dio un viaje —dijo Harry.
—¿Que hizo qué? —preguntó ____ sin saber bien a qué se refería.
—Que me dejó sin sentido —explicó Tommy—. Me estaba esperando y me cogió por atrás. No sé qué utilizó, pero tuve suerte de no romperme el cráneo. Caí como un fardo —añadió—. Lo siguiente que recuerdo es a monseñor inclinado sobre mí. Pensó que me había desmayado por culpa del calor.
—¡Dios mío! Podía haberte matado.
—He recibido golpes peores jugando al rugby.
____ hizo que le enseñara dónde había sido golpeado. Cuando le tocó el chichón de la base del cráneo, Tommy hizo una mueca de dolor.
—Todavía escuece —dijo.
—Tal vez deberías hacer que te lo viera un médico.
—No pasará nada, pero, maldita sea, ojalá le hubiera visto la cara.
—Quiero escuchar la cinta. ¿Habéis reconocido la voz?
—No.
—A lo mejor yo sí.
—La mayor parte del tiempo habla en un susurro.
Tommy estaba asustado. ____ lo vio en su mirada y lo percibió en su voz cuando volvió a hablar.
—No te va a ocurrir nada, ____. Nos vamos a asegurar que sigas a salvo —le prometió con ardor, haciendo un gesto con la cabeza hacia Harry.
Ella no dijo nada durante un rato, sino que se quedó mirando de hito en hito el grifo goteante del fregadero al otro lado de la cocina. La cabeza le daba vueltas.
