Capítulo 18

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Amaya: Cariño, tenemos que irnos. - le indica a su hija, la cual asiente sin soltar la mano de la chica.-
El momento más temido ha llegado. Es hora de despedirse. Los Odriozola se alejan un poco para dejar intimidad a las adolescentes en la que será su última conversación en persona por mucho tiempo. Demasiado. Más del que les gustaría.
Luna: Quiero que me llames todos los días, o al menos día sí y día no. Sin falta. Y todos los viernes seguimos con la noche de chicas por Skype, no vamos a romper la tradición, en caso de que alguna no pueda la haremos por la tarde. - sonríe triste. -
Nerea: Eso está hecho. - ríe tratando de deshacer el nudo que se le ha formado en la garganta. - ¿Me prometes no meterte en líos? - añade.-
Luna: No. - bufa con una sonrisa bajando la cabeza. - Ya sabes que soy un imán para los problemas. Y más ahora, que no voy a tenerte a ti para que me saques de ellos. ¿Quién va a convencer a la "cara pasillo" de que no me castigue por haberle gritado a Marta en clase? ¿A quién voy a engañar para que me acompañe al centro comercial? ¿Quién va a estar todo el rato quejándose porque no paro de probarme ropa? ¿Quién me va a estar esperando media hora porque llego tarde? - enumera. -
Nerea: Gracias por todo lo que has hecho por mí estos años. Por hablarme ese día cuando estaba sola y ayudarme ha adaptarme al instituto. Por darle ese pequeño toque de locura a mis días, a mi vida. Y por enseñarme el verdadero significado de la amistad.
Luna: - niega con la cabeza para luego volver a elevarla. - No, gracias a ti por estar para mí siempre. Sin importar las gilipolleces que haga o las locuras que tengo en la cabeza. Eres la mejor amiga que he tenido. Prométeme que me visitarás pronto. - pide. -
Nerea: Te lo prometo. Te quiero muchísimo , sé que no te lo digo a menudo, pero enserio te quiero pelirroja. Aunque seas una puta psicópata. - confiesa mientras ambas llorando a moco tendido. -
Sin pensarlo dos veces se abrazan desesperadamente. Frotando sus espaldas, aspirando el aroma del cuerpo de la otra. Tratando de memorizar la sensación del  tacto, el olor de la que es y será siempre su mejor amiga, pase lo que pase. Algo que es totalmente absurdo, pues jamás podrán olvidar algo así, debido a que son muchos los años que llevan juntas.
Tras varios minutos en dicha posición se separan muy al pesar de ambas. Se miran fijamente a los ojos. La castaña deja un beso en la mejilla de Luna, inevitablemente los brazos vuelven a rodear a la otra, esta vez es definitiva. El último.
La vasca se aleja secando su rostro con las mangas de la chaqueta y se acerca a sus hermanos mayores.
Pablo: Ven aquí. - ordena mientras la abraza. - Ahora eres la mayor y sé que lo harás genial. Te quiero mucho, ¿vale? Cuídate pequeña. - añade cuando se separa. Es breve, pues realmente se han despedido en casa, ya que sabían que irían justos de tiempo. -
Álvaro: Bueno... - comienza una vez se han quedado solos. - Tengo una cosa para ti. - comenta mientras le entrega un pequeño paquete. Lo toma algo extrañada y tras romper el envoltorio descubre una caja. Al abrirla se percata de que en el interior hay una pequeña pulsera de plata. La cuál se pone de inmediato mientras sonríe. - Sé que todo esto es muy duro para ti, así que pensé que te vendría bien esto. - comenta haciendo referencia al presente que le ha entregado. - Quiero que cuando estés triste, o nos eches de menos, o tengas cualquier sentimiento negativo, malo... La mires y recuerdes que yo siempre voy a estar ahí, a una llamada, para ayudarte en lo que sea, y para reventar a quién se digne a hacerte daño. - ríen ante esto último. - Da igual los kilómetros que nos separen, siempre serás mi hermanita pequeña, la dueña de mi sonrisa.
Nerea: Alvi, tengo miedo. Mucho. - confiesa. - ¿Y si no encajo?
Álvaro: Lo harás, créeme. Pero sólo si eres tú misma. Nunca cambies tu forma de ser para que el resto te acepte, porque es absurdo, no merece la pena. Los principios nunca son fáciles. ¿Recuerdas cuándo nos mudamos a Madrid? Estabas cagada, y ahora no te quieres ir. - recuerda. - Y una cosa más, ser responsable con los estudios no significa que te metas en una burbuja, no te va a pasar nada por salir de vez en cuando y divertirte. - advierte. -
Nerea: Te quiero, eres el mejor hermano que existe.
Álvaro: ¿Puedes repetirlo delante de todos? Es por verles la cara, haber si así aceptan de una vez que soy tu favorito. - levanta una ceja mientras la chica ríe. -
Nerea: No cambias. - niega divertida. -

Eclipse ~ Eric Ruiz Donde viven las historias. Descúbrelo ahora