:)
SeokJin
Jin aún no terminaba de creerlo. Pero si era sincero consigo mismo, ya no le sorprendía el inesperado giro que había tomado la situación.
Aunque su racionalidad estuviera nublada y probablemente ya no estaba del todo cuerdo, estaba seguro de algo: de que aquella ciudad era el infierno. Definitivamente.
YangMi estiró los dedos por encima de su pelo rubio y lo acarició, sus dedos blancos jugando con las hebras como si fueran conocidos de toda la vida, y ella tuviera algún tipo de afecto hacia él.
Mas una visión atroz vino a él mientras ella hacía eso. Podía imaginarla con su vestido negro, cortando las fotos del álbum porque ya no sentía que tenía sentido conservar los recuerdos de lo que le habían quitado. Y la pudo imaginar colgando del árbol y de esa herida horripilante que tenía en el cuello. Muerta, o lo que sea que le había pasado cuando lo hizo.
—Me quitaron a mi Jae justo como a ti. Sin piedad, sin razón. Lo único que me dejaron era la culpa de que no había podido impedir que le pasara algo.— bajó sus dedos de su pelo hasta su mandíbula.—Y cuando intenté librarme... Ni siquiera la muerte me dejó hacerlo. Lo único que eso hizo fue condenarme a una vida eterna en este purgatorio. ¿Pero sabes qué?— sus dedos tocaron los labios gruesos de Jin.—Vivir hasta este momento lo valió por tenerte aquí ahora. Eres mi boleto a la felicidad, Jin. Un cruel recuerdo, sí, pero gracias a ti podré reencontrar a Jae; le haré conocer a su hermano Tae, y volveremos a ser una familia, incluso si mi esposo y mi otro hijo ya no están.
SeokJin entornó los ojos, sintiéndose aéreo. El rostro de YangMi se deformaba aparentemente por los vaivenes del fuego alumbrandolos.
—¿P-Por qué yo?
—... Porque así es como debe ser.— YangMi se giró hacia la línea de personas paradas detrás y extendió una mano. Una de las figuras se adelantó hasta ella, pasándole un libro. Lo tomó y se volvió a girar hacia Jin, abriendo el libro y hojeandolo.
Lo sostuvo frente a él, abierto en una página específica cuyas letras se arremolinaron por la oscuridad y las lágrimas.
—Habías querido leer este libro, ¿verdad? Aquí tienes. Léelo, Jin.
ESTÁS LEYENDO
Hiseolyl 「 NamJin 」
Фанфик❝Hogar, dulce hogar...❞ SeokJin era un actor exitoso, y NamJoon era un músico de renombre; pero al contraer matrimonio, decidieron que lo mejor era reinstalarse lejos de las cámaras para tener una vida tranquila. El destino: un pueblo rural llamado...