30.

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-Perdón, pero no.- Barca hizo pose de diva junto a Paola.- Yo quiero momentos chidos con mi bebé piciosa.- Apretó los cachetes de su novia.

-Lo mismo digo, pero con Juan.- Abril abrazó a su esposo.

-Ahhhh, súper mamones.- Me indigné.

-La pasaremos bien juntos.- Roberto me tendió su puño mientras me miraba con una sonrisa.

-Por supuesto, amigo.- Le choqué el puño y le sonreí, éste solo agachó la cabeza.- Entonces amonos de una.- Jalé a Roberto de la muñeca arrastrándolo para empezar a caminar en dirección al cine.

Caminamos unos minutos hasta llegar al cine, entramos y nos decidimos por una de terror. Verga, siempre suelo abrazar a alguien cuando veo películas de terror y Juan me dará un vergazo si lo hago. Miré a Roberto de reojo, el chico hablaba con sus amigos, se veía igual de lindo que siempre, solo que ahora no sonreía tanto.

El peli negro se dió cuenta de mi mirada e igual me miró de reojo, mis mejillas se tornaron carmesí y desvíe la mirada hasta la fila de la dulcería. Estaba tomando unos dulces en unas pequeñas bolsas para comer durante la película, Abril se me acercó repentinamente exaltandome un poco.

-Si ví como mirabas a Roberto.- Tomó una bolsita y tomó gomitas.- Él siente lo mismo que tú.- Abril todavía tenía su vista en los dulces, yo me quedé parada mientras la miraba atenta.

-Sé lo que pasó...- Cerré la bolsita con dulces.- Y tengo una historia para contar sobre eso.- Le sonreí de una manera victoriosa.

-Espero que sea algo bueno.- Abril me acompañó hasta dónde los demás.

-Y si que lo es.- Noté que los chicos tenía las palomitas.- Qué delicia.- Le robé una palomita a Juan.

-Eh, eh, eh.- Le sonreí mientras tragada la palomita.- Las que son tuyas las trae tu novio.- Señaló a Roberto quién efectivamente traía un bote de palomitas al igual que Juan y Barca.

-Las palomitas las comparten los que se sientan juntos.- Asentí algo dudosa ante las palabras de Pao.

-WUUUUUUUUU, ENTONCES NO LE MOLESTA HACERLO CON ROBERTO.- Juan gritaba como niño ganándose las miradas de algunas personas y madres tapando los oídos de sus pequeños.- Okey, debo admitir que eso sonó mal.- Comenzó a reír.

-Ya es hora.- Barca miró su reloj.- Vamos cariño.- Tomó a Paola de la mano para caminar, yo los miraba atenta.

-Vamos.- Juan tomó a su novia de la mano.- No se hagan pendejos.- Nos miró antes de caminar. Abril corrió hasta nosotros y entrelazó nuestras manos haciendo que ambos nos sonrojaramos.

-Se ven muy tiernos, cómo en las películas dónde ninguno acepta sus sentimientos por el otro.- Yo miré a Roberto éste estaba peor que tomate, se veía RE TIERNO.

-Supongo que así es.- El azabache miraba el suelo y movió un poco nuestras manos hacía adelante.- ¿No?- Yo solo lo miraba sorprendida por aquellas palabras que salieron de su boca.

-Se puede decir.- Agaché mi mirada mientras sentía mi cara arder.- Mejor vamos, nos esperan.- Caminé rápidamente hasta dónde estaban nuestros amigos y entramos a la función.

Casi al final de la película habían muchos sustos, lo que hacía que yo diera pequeños saltos en la dirección en la que se encontraba Roberto. Después de un gran susto, volteé a ver a mis amigos que estaban... besándose. Mierda, ¿A eso vienen al cine?

Estaba comiendo algunas palomitas y al momento de tomar otra, la mano de Roberto cayó sobre la mía, éste apretó un poco mi mano y me miró.

-No sabes cómo lo lamento, enserio que lo hago.- Susurró a mi lado.- Te lo puedo explicar si es que lo deseas.-

-Sé el por qué.- Susurré de igual manera mientras miraba la película.- No molestará más.- Volteé un poco la cara y le sonreí.

-¿Pero com...?- Le interrumpí.

-Me sacó de quicio, debiste ver su cara cuando...- Fui interrumpida por unos labios que posaban sobre los míos.

Roberto había unido nuestros labios en un beso, pasó muy poco tiempo, pero lo extrañaba. Movió delicadamente sus labios para hacerlo un beso algo largo, se sentía bien volver a besarlo. Cuando el beso concluyó el azabache me abrazó y sollozando me susurraba.

-De verdad que lo lamento.- Sonreí.

-Pero todo ya pasó, no te disculpes, ¿Sí?- El chico lo dudó un poco y asintió con algo de pena.- A terminar de ver la película.-

Como fue mencionado, terminamos de ver la película, en ese lapso del final, me asusté un poco dando pequeños saltitos mientras Roberto me abrazaba y tomaba de la mano, me hacía sentir segura y con un poco menos de miedo, podía sentir como apretaba mi mano cada vez más fuerte.

-Si intentas huir, iré contigo.- Le susurré cuando apretó mi mano recordando las palabras que él algún día me dijo.
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Los tqm. uwu

Si intentas huir... 《RobertoCein》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora