Love Yourself... If YOU Can. | JJK

Extra #5

–Te ves hermosa, Soo. –Miré a mi amiga que parecía estar a punto de llorar.

–De verdad que si. –Habló, mi cuñada con una gran sonrisa.

–Hija, estás preciosa. –Mi madre me abrazó.

Aún parecía un sueño para mi que dentro de unos minutos la ceremonia de mi boda empezaría.

Me miré en el espejo entero de aquel salón. Mi vestido blanco de seda ajustado a mi cuerpo, el diseño era sencillo y precioso, no tardé mucho en decidir que era el indicado. Mi cabello recogido con un broche, mi rostro con poco maquillaje.

–Ni se te ocurra derramar una lágrima, Soo, tu maquillaje se va a arruinar. –Eunji tomó una revista y me abanicó con ella, yo reí pasándome la yema de los dedos por los ojos. Tenía razón, no podía llorar.

–No puedo creer que me voy a casar. –Apreté los labios sin dejar de verme en el espejo.

–Has dicho eso desde que te comprometiste. –Mencionó, Alanna.

Había pasado un año y dos meses desde que Jungkook me había dado el anillo de compromiso y aún sentía todo de forma muy irreal. Tardamos algo de tiempo en organizar la boda porque ambos estuvimos ocupados con nuestros propios proyectos, también queríamos encontrar un momento adecuado para poder casarnos y luego disfrutar de eso.

–¿Así te sentiste cuando te casaste? –Miré a mi amiga, quien ahora tenía el cabello castaño.

–La verdad es que fui un desastre de lágrimas, los monjes de seguro pensarían que estaba a punto de darme un ataque.

Las tres reímos al escucharla. Jimin y Alanna habían hecho un viaje a Tailandia hacía poco y resulta que llegaron casados. No nos sorprendió tanto que lo hicieran de esa manera porque ambos estaban locos, así que era obvio que sería algo de esperarse por parte de ellos.
Se casaron en una ceremonia budista, y según ellos fue una experiencia increíble.

Todos estuvimos muy felices por ellos, aunque hubiese sido lindo estar ahí pero igual respetamos su decisión.

La puerta se abrió de golpe y entró un castaño a pasos rápidos, en cuanto me vio sus ojos se abrieron en grande.

–Oh, mierda, Soosie... ¡Estás preciosa!.

–Cariño, no deberías estar aquí – Alanna se puso delante de su esposo– no puedes ver a la novia. –Jimin rodó los ojos.

–Yo no soy el novio, así que no vale, además tenía curiosidad –la besó y luego centró sus ojos en mi de nuevo– no puedo creer que mis dos mejores amigos se van a casar... –Noté como parpadeó varias veces, sus ojos se llenaron de lágrimas. –Mierda, cariño, voy a llorar. –Abrazó a Alanna.

–No llores Park Jimin, sino lloraré yo también. –Dije, viendo como Alanna también parecía a punto de llorar otra vez. –Alanna...

–Está bien. –Ambos hablaron al mismo tiempo, intentando guardar la compostura y se acercaron para abrazarme.

–Sabes que los queremos mucho a ti y a Jungkook. –Dijo, Alanna en medio del abrazo de tres.

–Estamos muy felices por ustedes. –Comentó ahora Jimin.

–Gracias por todo. –Susurré.

–Ya casi es la hora.

Nos separamos al escuchar a mi madre, Alanna se llevó empujones a Jimin, Eunji se fue con ellos. Mamá y yo quedamos solas.

Ella me miraba con ojos brillantes, nunca había visto a mi madre llorar, tanto ella como mi padre no son personas de mostrar abiertamente sus emociones pero ahora parecía muy conmovida.