Santiago
Esta mañana pase a despedirme de Meli. La cual se encontraba profundamente dormida, se veía hermosa con esa pijama de ositos.
La noche anterior no logre conciliar el sueño, fui un imbecil al difamar a mi esposa de esa forma. Carmen me dijo que ellas no habían salido ese día. Lo que no entiendo es por que Marina mentiria, o acaso ¿yo escuche mal?
No lo sé, solo se que soy un idiota y debo conseguir el perdón de mi esposa. Son las siete en punto justo a tiempo. Entro al set de grabación, todos ya están aquí. Marina al verme corre a abrazarme. Me da un beso en mi mejilla y se separa.
–¿Estas bien Santi?
– ¿Debería no estarlo?
– Solo preguntaba que....
– ¿Ustedes son pareja?– nos pregunta Corinne.
– Por supuesto que no, estoy casado y tengo a una hermosa esposa. – no les digo mas y me alejo de ellas. Su comentario me había molestado de alguna forma. Ella saben bien que yo estoy casado.
Camino hacia el salón de maquillaje, me espera un largo día.
(...)
Después de casi doce horas de grabaciones, por fin había salido. Estaba de camino a una florería. Pensaba comprar las flores favoritas de Meli, tulipanes. Se que unas simples flores no compensaban mi estupidez, pero al menos podía intentarlo.
Antes de salir Marina me había pedido dejarla cerca su casa, se le estaba haciendo costumbre. Me negué rotundamente a llevarla, por su culpa había discutido con Meli.
Nervioso entro a la florería, nunca había hecho esto, siempre mandaba a mi guardaespaldas. Me coloco bien las gafas no quiero que sepan quien soy y armen un escándalo.
La chica al entregarme las flores se queda mirándome fijamente.
¡Maldición se dio cuenta!
– ¡¿Tu eres Santiago Gosling?!– niego y me apresuro a pagarle para irme inmediatamente de aquí.
– ¡¿Puedes tomarte una foto conmigo?!– asiento. Y me acerco a ella para salir en su foto.
Mi teléfono suena y me disculpo con la chica por tener que irme.
–¿Mamá?
– Santiago hijo, ¿Donde estas?
– Estoy en casa mamá, ¿Pasa algo?
– ¿Como qué pasa algo? ¿Acaso no recordaste que mañana es mi cumpleaños?
– Si mamá lo se, pero siempre salimos a comer por ahi, así que alístate para que mañana pasemos por ti. – le digo abriendo la puerta de mi auto.
– Está vez no hijo, haré un pequeño convivo en casa, así que te espero mañana, no llegues tarde cariño.
– Si mamá, mañana estaré ahí. Pero ahora estoy ocupado te llamo después. Adiós.
Termino la llamada y enciendo el auto para ir hacia casa, solo esperaba que Melissa me perdonara.
Alguien toca la puerta del copiloto, bajo el vidrio y me encuentro a Marina del otro lado junto a Corinne.
– Hola Santi. – me saludan las dos.
– ¿Que hacen aquí? – les digo ansioso, necesito irme.
– Estábamos recorriendo las calles y reconocimos tu auto. Marina quiso acercarse y aquí nos tienes– habla Corinne.
– ¡Aaaaaa! Miren, ¡¿Esas son Marina y Corinne?!– gritan algunas personas. Ellas abren los ojos asustadas y suben a mi auto rápidamente sin pedirlo.
– ¡Santiago, salgamos de aquí! – me dice Marina. Ella ocupó el asiento del copiloto, tiene los tulipanes en su regazo.
Aceleró las alejarnos de los fans y paparazzi, Marina me ve de reojo, y se pone a platicar con Corinne.
–¿Para quien son esos hermosos tulipanes Santi?– pregunta curiosa Corinne.
– Para mi esposa. – sonrió al imaginar la reacción que tendrá Meli. Es capaz de lanzarme los tulipanes en la cara, mi esposa tiene uña carácter fuerte. Me quedó absorto en mis pensamientos por unos minutos, pienso en Meli, y en como se vería siendo madre....
– ¡¿Santiago?!– el grito de Marina me hace reaccionar.
– ¿Si?– les pregunto mirando por el retrovisor.
– Te preguntaba, el nombre de tu esposa. ¿Porque nunca la he visto contigo?– Corinne es muy curiosa.
– Mi esposa se llama Melissa, y a ella no le gusta verse involucrada en temas de farándula. Es por eso que casi no se ve conmigo, somos muy cuidadosos en ese tema.
– ¡Que lindo eres Santiago! Le llevas flores a tu esposa, en esta era ya casi no hay hombres detallistas como tú.
– Eso es cierto Santi, tu esposa tuvo mucha suerte en encontrarte.
Las dos chicas me miran y me siento nervioso he incomodo. Necesito quitármelas de encima, y más a Marina. Pareciera que esta siguiéndome, no se que se traen esas dos pero se que no es algo bueno.
(...)
Después de haber dejado a las chicas en el departamento de Corinne, conduje hasta encontrarme con el detective. Al parecer tenía nueva información sobre el paradero de los padres de Meli. Se que muy en el fondo ella desea saber quienes son.
Llego a casa y escucho risas en el comedor, hace tiempo que no escuchaba reír a Meli de esa forma. La abrazo por detrás y ella brinca del susto.
– Hasta que llegas cabron, mi pequeña estaba preocupada por ti.– saludo a Harry y el se despide de nosotros.
— Aún no te he perdonado– me dice cruzando los brazos. Logrando verse tierna y sexy.
– Perdóname amor, sabes que soy muy celoso, y al saber eso tome como loco. Trate de conducir a casa pero Marina me negó y me llevo a su casa. Te juro que no sucedió nada.
Sus ojos al mirarme brillan, sus mejillas se sonrojan y me abraza.
– Está bien, te creo.
La cargo y la guió hasta el sofá, ella cree que no note su peinado. Pero claro que lo hice.
Su cabello va desapareciendo poco a poco.

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PAIN & LOVE
RomanceUn amor, una enfermedad. La traicion es algo que no se puede perdonar y menos si viene de la persona que más amas. ¿Debería existir una segunda oportunidad? 05|21|2021