Valentin
Recibí un mensaje de Natalia con una ubicación para vernos, el lugar era un poco lejos pero se podría ir caminando.
Estaba frente a un local abandonado, la ubicación me indicaba que estaba ahí pero no la veía por ningún lado.
-Acá arriba...-su voz me llamo haciendo que la buscará con la mirada, mire al techo y estaba ahí parada.-Entra por la puerta trasera.-su voz sonaba apagada, hice lo que me dije; entre por la puerta trasera para después tomar las escaleras que llevaban al techo.-Veniste...-me sonrió, estaba sentada en un cajas de refresco.
-¿Porque no iba a venir?-me senté frente a ella.-¿Estás mejor?-nego y me tomó de la mano.
-Estoy sola, Valen...-me miró, tenía los ojos rojos e hinchados.-Mi papá me corrió de casa.-mire la maleta detrás de ella.-No quiero ir con Damián o alguno de los chicos, no quiero ser una carga para ellos o para tí...-me miró a los ojos.-Soy mayor de edad, tengo que hacerme responsable de mi vida.
-Pero necesitas ayuda, no porque seas mayor de edad significa no recibir ayuda de tus amigos...-tomé sus manos que estaban temblando y las junte con las mías.-Puedes quedarte conmigo...-ella negó.
-Tus padres no me quieren ver ni en pintura, ¿Tu crees que es buena idea irme a quedar a tu casa? Ya fue suficiente con las amenazas de tus padres y la denuncia por "corrupción de menores"-hizo comillas con los dedos.-No quiero causar más problemas.-se limpió las lágrimas con la manga del buzo y me sonrió.-Estoy bien, me quedaré aquí.-la mire confundido.
-¿Aquí? ¿En un local abandonado?-negué.-No voy a permitir eso, te vienes conmigo o con los chicos pero no te voy a dejar aquí.
-Estaré bien, es temporalmente mientras termino el instituto, busco trabajo y pueda encontrar un lugar mejor.-me paré y tome su maleta.-Oliva, dame mis cosas.-negué.-Vamos...-abrí la puerta del techo para bajar las escaleras y salir del local.-Valentín, por favor.-escuchaba sus pasos detrás mío.-No tengo fuerzas para ir a tu paso, por favor para...-no escuché más su voz o sus pasos, pare en seco para dar media vuelta y buscarla.
-Deja el drama Natalia, ¿enserio te querías quedar ahí?-fuí hacia donde estaba sentada con la cabeza entre las manos.-Necesitas ayuda, vamos...-la tome de la cintura y la apoye en mi brazo.
-Esta bien, iré con lo chicos...-susurro.-Pero no ahora, quiero estar contigo un rato.-asentí.-Vamos a la plaza.-camino a paso lento.
Natalia
Estábamos tirados en el pasto, tenía mi cabeza recargada en su pecho y su mano estaba acariciando mi brazo, pasaban de la 1 AM, solo nosotros dos en la oscuridad con el miedo de que nos asalten pero estábamos juntos, Es lo que cuenta, ¿No?
-Mi padre me odia porque cree que es mi culpa que mi madre esté muerta.-solté de repente haciendo que me mirara desconcentrado.
-¿Porque piensa eso?-me senté a su lado y empezé a jugar nerviosa con el pasto, el se apoyo sobre sus codos para mirarme.-¿Quieres hablarlo?
-Tenia 12 años, me había quebrado el brazo jugando y ella me llevo al hospital a mitad de camino un conductor ebrio nos choco de frente.-mordí mi labio tratando de no soltar en llanto.-Ella recibió todo el impacto falleciendo al instante, yo..yo solo unos golpes y vidrios en mi cuerpo.-sentí su mano en la mía.-La extraño mucho, me hace demasiada falta.-no pude más y rompí en llanto.
-Natalia, se que la extrañas mucho...-me acarició el cabello.-Debes de ser fuerte por ti, por ella.-me miró a los ojos.-Estoy seguro de que ella está muy orgullosa de lo que te has convertido y de lo que te vas a convertir.-negué.
-¿Cómo va a estar orgullosa de una drogadicta?-las lágrimas salían sin parar.-Me siento mal, me siento como un estorbo.-empeze a temblar, se quitó su buzo y me lo puso.-¿Porque sigues queriendo ser mi amigo?-el se sentó a mi lado y paso un brazo por mis hombros sin decir nada.-Soy mala influencia para tí, solo voy a hundirte conmigo a esta mierda.
-No sé.-lo mire confundida.-No se porque no quiero dejar de ser tu amigo, no eres ninguna mala influencia para mí ni para nadie.-me miró a los ojos.-Fuiste la primera persona en la que pude confiar, la persona que me dió el valor para poder revelarme hacia mis padres.-tomo mi cara con su mano libre y limpió mis lágrimas con su pulgar.-No eres ningún estorbo, nos complementas a mí y a los chicos.-seguíamos viéndonos a los ojos.-No vas a hundirme contigo si te ayudo a salir antes.-asentí.-Vamos a hablar con el director para que te de otra fecha para el examen, el entenderá tu situación y así yo podré ayudarte.-sus ojos se dirigieron a mis labios.
-Oliva, no tengas miedo.-susurre cerca de su cara, río nervioso y se alejó de mí.
-Te llevaré a casa de Damián.-tomo mi maleta y mi mano para ayudar a levantarme.
Me levanté por la voz de Mateo que estaba frente mío.
-Vaya, al fin despiertas.-alzo los brazos hacia arriba.-Cámbiate, se hace tarde.-salio sin decir nada más, me levanté de la cama aún con mareos los cuáles ya eran menos que antes, me alisté para bajar con los chicos e irnos.
-¿Estás segura de que quieres ir, Natu?-Martha me miró preocupada, asentí y le sonreí.-Bien, recuerda tomarte las pastillas y de comer bien.-asentí, tome mi mochila y salí hacia el coche donde estaban ya los chicos.
Horas después me encontraba en la oficina del Director para poder si podía cambiar la fecha del examen.
-Espero entienda mi situación, estoy haciendo lo posible por poder acabar los estudios pero mi salud está primero.-el asintió, tecleó algo en la computadora y mando a imprimir unas hojas.
-Esto es el permiso para presentar, la nueva fecha y hora de la prueba.-me las entrego.-Seria todo, espero y si pueda asistir a esta prueba ya que es la última fecha.
-Muchas gracias...-susurre, me pare del asiento con intención de salir de aquella oficina.
-Señorita.-me detuvo su voz.-Cualquier cosa que se le dificulte aquí está servicio social, la psicóloga y yo personalmente.-le di una sonrisa sincera y salí de ahí.
