Fraude. [KOOKV]

CHAPTER 27

Tal como Jungkook predijo, su hermana se presentó poco antes de la hora del almuerzo del día siguiente. Esta vez, Somin había venido acompañada por varias personas. Según lo que Jungkook le había contado la noche anterior, antes de dormir, Somin era una chica muy popular. Todo el mundo quería acercarse a ella, no solo por su dinero o su fama. Sino porque tenía una personalidad brillante y generosa. Jungkook afirmaba que su hermana era un ángel escondido bajo una máscara diabólica. Ella era demasiado buena para este mundo.

Cuando le hubo preguntado quiénes podrían aparecer, Jungkook no se equivocó con ninguna de sus especulaciones. Cuando abrió la puerta ese mediodía. Taehyung había recibido a cinco jóvenes. Dos chicas más, aparte de Somin, y un par de chicos. Los chicos fueron fácilmente identificables. Jungkook le había hablado tanto del joven con el que esperaba que su hermana encontrase la felicidad, que Taehyung pudo reconocerlo al instante. No era mucho más alto que Somin, pero era apuesto y misterioso. Jungkook le había dicho que se llamaban igual, pero que él prefería ser llamado por su nombre artístico, el nombre con el que firmaba todas sus obras. J.Seph.

Era el único que era amigo, y no familiar directo de los Jeon. De hecho, J.Seph era el mejor amigo de Somin desde que eran pequeños. Inseparables. Por eso, Jungkook creía que J.Seph era el indicado para su hermana. La conocía y sabía cómo cuidarla. Había tenido que aprender con los años a protegerla. Somin era incapaz de ver las malas intenciones de la gente, se solían aprovechar de ella. Necesitaba a alguien a su lado que fuera capaz de enseñarle ese lado, o al menos, de protegerla de las personas malintencionadas. J.Seph llevaba haciendo eso desde que entraron a la secundaria. Un largo camino recorrido, donde el amor parecía no haber florecido. O al menos, no la clase de amor que Jungkook hubiera preferido.

- Eres realmente guapo - susurró una de las primas de Jungkook mientras lo miraba atentamente -. ¿Eres real? Pareces de otro mundo.

- Nayeon, por favor, actúa como una persona de tu edad - bufó el pelinegro.

Ella lo ignoró. Nayeon era la mayor entre los primos, pero tenía la vitalidad y la curiosidad de una joven de la edad de Somin, o incluso más joven. La chica tenía una sonrisa muy característica y contagiosa, a Taehyung le había parecido adorable. Le recordaba, de cierta manera, en algunos gestos, a Jungkook.

- ¿Cómo te has podido fijar en un ogro como él? - le susurró. Aunque todos en la sala lo escucharon. Algunos se unieron a las burlas de la joven. Mientras que dos se mantenían callados, Jungkook y el enigmático chico que parecía no querer estar en esa reunión familiar. Él había llamado la atención de Taehyung desde que entró al lugar. No había dicho ni una sola palabra - Ven, mira. Si te gustan los jovencitos está bien - le dijo mientras tomaba su mano y lo guiaba hacia el otro joven -. A mí también me gustan las chicas más jóvenes - le guiñó un ojo -. Bueno, él es Doyoung, mi hermano pequeño. Creemos que es adoptado porque es demasiado serio. ¿No crees que es más guapo que Jungkook? Cuando quiere es muy adorable, pero solo en sus días buenos. Pero al menos tiene días buenos, Jungkook siempre ha tenido un carácter de perro.

- ¡Oye! - se quejó Jungkook mientras iba hacia ellos.

Tomó rápidamente a Taehyung por la cintura y lo pegó a su cuerpo. Nayeon era una chica divertida, pero siempre había tenido algo contra Jungkook. O al menos, eso decía él. En realidad, la chica siempre se comportaba así. Aunque no lo dejase ver, ella hacía muchísimo más por la familia de lo que cualquiera de ellos se imaginaba.

- Ya les he dicho que tengo novio - murmuró el tal Doyoung.

- ¡Pero no nos lo presentas! ¿Cómo se supone que creamos que es de verdad? - se quejó Nayeon.

- Solo me dan razones para no hacerlo - rodó los ojos -. Miren cómo se comportan con el novio de Jungkook.

- Eres un aburrido, Doyoung. Pero no te preocupes, así te queremos y todo - se burló la última chica.