CHAPTER 10

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No se lo van a creer, pero la razón 100% real por la que me tardé más en escribirlo es porque no me acordaba que había subido el capítulo anterior y volví a escribir la misma idea. Menos mal que me di cuenta a tiempo. ¡Qué vergüenza! La única diferencia es que en esta nueva versión del capítulo pasado eran una pareja toda empalagosa...


*****


Debería haber llegado. Debió haber sido profesional, pero no lo fue. Por esa misma razón, Jeon tenía como norma no acercarse de ninguna forma más íntima a ninguno de sus empleados, sobre todo si estos eran temporales. Las personas eran sentimentales, y la mayoría de las veces actuaban con respecto a sus sentimientos, y Jungkook no tenía ninguna duda de que el modelo estaba increíblemente cabreado con él, porque no había sabido nada de él en lo que quedaba de fin de semana. Ni siquiera se había llegado a por una muda de ropa, o a por un nuevo chupete para Jaemin. Parecía haber desaparecido por completo, como si nunca hubiera existido. Pero tenía muchas pruebas de que el joven no había sido un producto de su mente. Por ejemplo, la ropa en el armario que ambos compartían, la maleta que seguía sin ser recogida en medio de la habitación y que ya parecía un adorno más de esta, y las numerosas quejas y disculpas y maldiciones y... bueno, una larga lista de cosas que no dejaban de escapar de la boca de un muy cabreado y avergonzado Taeil. El pobre fotógrafo parecía sentirse responsable de aquella desaparición. El pobre desconocía que la verdadera razón por la ausencia del castaño era la misma persona a la que no le dejaba de justificar vagamente toda la situación.

O al menos, todo fue así hasta que un desaliñado y apresurado castaño entró a la habitación con un gesto preocupado y un Jaemin en brazos. Cabe destacar que quien tenía peor apesto era el pobre bebé, que se encontraba mucho más pálido y con marcas de lágrimas a lo largo de sus mejillas. Aunque ahora, por suerte para todos, dormía sobre el pecho del agitado modelo.

- Jungkook, tenemos que hablar, es urgente. Jaemin, él... - de repente notó la presencia de Taeil, que lo miraba entre disgustado y sorprendido por la informalidad con la que se dirigía hacia su jefe. Las mejillas del modelo explotaron en un vivo color rojo antes de comenzar a balbucear - Yo... Lo siento, no sabía que estaban reunidos - consiguió decir.

- Señor Moon, ¿nos podría dejar un momento a solas? Le prometo que el joven Kim estará pronto en estética donde lo arreglarán adecuadamente y podrán empezar con la sesión.

El fotógrafo asintió e hizo una reverencia antes de salir de la habitación sin emitir palabra. Ya tenía todo el equipo preparado. Había comprobado las luces, los ángulos, la lente, todo. Así que, en lugar de dirigirse hacia el estudio, anticipando que tenía al menos una media hora, se fue en busca de uno de los empleados de la agencia. Aquel que lograba que su corazón golpease frenéticamente y trababa su lengua, a veces impidiéndole decir frases con coherencia.

Dentro del despacho, el pelinegro se levantó por primera vez. Se acercó con cuidado a Jaemin, descubriendo que el pequeño estaba ardiendo.

- ¿Desde cuándo está así? - preguntó, su tono era duro. Aunque no lo quisiera reconocer, estaba muy preocupado.

- Empezó a llorar a las cinco, al principio creí que sería hambre pero su temperatura empezó a aumentar y no sabía qué hacer. Yo... yo... no sabía a dónde ir - confesó avergonzado. No había sabido actuar cuando su hijo más lo necesitaba.

- Tranquilo. Ahora mismo voy a llamar a Yugyeom, él contactará con un pediatra amigo nuestro, él vendrá a revisarlo, ¿de acuerdo?

No pudo hacer otra cosa que asentir mientras veía al azabache hacer la llamada. A los pocos minutos, el más alto entró en la habitación pidiendo que el bebé le fuese entregado. Tras recibirlo en sus brazos, y una larga lista de peticiones por parte de Taehyung, se retiró para llevarlo a una sala que Jeon había habilitado para que el bebé estuviera mientras que el padre trabajaba. Allí, ambos esperarían con paciencia al médico. Posiblemente, el presidente se reuniría con ellos en cuanto terminase de hablar con Taehyung, porque había muchas cosas que tenían que aclarar.

Aunque no era el lugar idóneo, ni mucho menos el indicado. Así que tendría que seleccionar qué temas tratar y cuáles aplazar hasta que ambos volvieran a su residencia. La situación no podía seguir como había comenzado a ir ese mismo fin de semana. Jeon había sentido el peso de la ausencia de los dos. Y lejos de sentir paz y tranquilidad en aquella soledad, se sentía triste y preocupado por la falta de señales. Ni siquiera sabía el lugar en el que ambos podrían haber ido, o dónde buscarlos si llegase a necesitar algo. Tampoco había recibido respuesta alguna a sus mensajes.

Él se había puesto en la peor de las posibilidades y había estado todo el fin de semana refrescando la página de noticia. Se decía que era sólo por si acaso, se decía que no estaba preocupado.

- ¿Dónde has estado? - preguntó una vez ambos estuvieron juntos.

- En casa de mi amiga, la que cuidó de Jaemin.

El pelinegro gruñó ante el recuerdo de aquella chica de cabello castaño que lo había tratado como a un perfecto depravado sexual. No se fiaba de ella, tampoco le agradaba. Definitivamente, no le gustaba para nada.

- ¿Por qué estabas allí? Tienes una casa propia.

- No tenía ganas de estar en casa, y ella tiene una habitación libre mientras su compañera de casa está de viaje - explicó, como si fuera lo más normal.

- Taehyung, ¿te das cuenta de que pareces un chiquillo? No puedes desaparecer sin decir nada, no ahora - el empresario trataba de mantener la calma, pero sabía que la razón por la que el castaño no quería estar en la casa era él mismo, y no quería que la situación fuera así. Pero tampoco sabía cómo solucionarlo, nunca se le había dado demasiado bien socializar -. Ahora no estás solo, tienes hijo. Jaemin no merece verse involucrado en antojos. Si tenemos algún problema, somos adultos, podemos hablarlo, ¿entiendes? Pero no vuelvas a desaparecer sin decir nada, sin contestar a ningún mensaje. ¿Qué hubiera pasado con Jaemin si llega a enfermar antes?

Ambos se mantuvieron en silencio. El modelo tenía su mirada clavada en el suelo, sintiéndose extremadamente culpable. Le hubiera gustado reprocharle al pelinegro toda esa charla, pero tenía razón. Desde que era muy pequeño, había sido señalado por su adorable comportamiento infantil, hasta que fue creciendo. Entonces su comportamiento dejó de ser un elogio para ser una gran desventaja. Nunca pensaba, y tomaba las soluciones más drásticas.

Apretó los puños recordando cada riña que había tenido a causa de su comportamiento.

Por otro lado, Jeon se sentía culpable al ver al chico tan desorientado. Su preocupación, la cual no pensaba admitir en voz alta, se había manifestado de la peor manera posible. Se pasó las manos por su rostro hasta llegar a su pelo. Esa mañana le había costado mucho peinarse, pero no tuvo reparo cuando sacudió su pelo desesperadamente.

- Lo he hecho otra vez - suspiró cansado -. Perdóname, Taehyung. Llevo tanto tiempo siendo director que me cuesta expresarme correctamente. No quería ser tan duro.

El castaño negó.

- Está bien, me lo merecía - admitió-. Yo no lo volveré a hacer, de verdad.

Sus palabras sonaban sinceras, pero había algo en su tono de voz que al pelinegro no le había gustado nada. Lo miró atentamente, parecía un niño pequeño que acababa de llevar su primera mala nota a casa y estaba recibiendo el regaño de sus padres. Suspiró. No quería aquello.

Dio un par de pasos y titubeante, envolvió el cuerpo contrario entre sus brazos en un abrazo algo incómodo, pero que trataba de tranquilizar el ambiente. Y quizás lo consiguió porque, pese a la tensión inicial, pronto sintió como el modelo se calmaba entre sus brazos, y como poco a poco se lo devolvía.

Aquello se sentía mejor.

- Seguiremos hablando de esto en casa - le susurró -. Yo voy ahora con Jaemin, y tú vas a estética y peluquería. Yo os voy a llevar, así que cuando termines me buscas y te llevo con Jaemin.

Tras un ligero asentimiento, el modelo se retiró. Y Jungkook se repitió una vez más lo jodido que estaba y como aquel modelo iba a ser su ruina.

Fraude. [KOOKV]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora