Fraude. [KOOKV]

CHAPTER 32

Silencio. Un silencio que parecía intoxicarlo, que no lo dejaba respirar. Su garganta se había cerrado y notaba una ligera molestia en su pecho. No quería pensar lo peor, siempre había sido una persona con confianza. En estos momentos, no se reconocía a sí mismo. Tragó con cierta dificultad. Pasó una de sus manos por su cabello negro para luego desabotonar los primeros botones de su camisa. Agradeció no haber llevado corbata ese día. Si ese hubiera sido el caso, definitivamente la hubiera usado para colgarse en ese mismo instante. Por su cabeza pasaban tantos pensamientos que empezaba a pensar que se había quedado en blanco. No sabía cómo reaccionar a ese silencio.

Había imaginado diferentes escenarios, tanto positivos como negativos. No obstante, había sido incapaz de anticipar aquel silencio tan atronador que lo estaba consumiendo. Estaba bien si Taehyung lo rechazaba, no podía forzarlo a sentir lo mismo. Pero necesitaba que dijera algo, que ese incómodo momento pasase finalmente.

Cuando lo vio reacomodarse en el lugar, todavía sin mirarlo, supo que el menor no iba a reaccionar. No iba a decir nada. Derrotado, carraspeó. La mirada de Taehyung viajó rápidamente al foco del ruido. Sin embargo, no se encontró con aquella cálida mirada que Jeon siempre le daba. Los ojos del mayor estaban ocultos tras su flequillo. Jungkook llevaba un par de días comentando que se lo debía cortar, aunque en estos momentos, agradecía no haberlo hecho. Que Taehyung pudiera ver sus ojos en aquel momento, pudiera abrirse paso hacia su alma, ver sus sentimientos...

No quería que se sintiera mal por el dolor que le estaba causando. Aunque le hubiera gustado que Taehyung no hubiera sido tan cruel con él.

- No te preocupes - comentó como si nada. Esperaba que el contrario no pudiera notar ese pequeño temblor en su voz -. No hace falta que contestes ya. No quería incomodarte. Yo solo pensé...

- Jungkook - lo llamó.

- Está bien, en serio. Voy a ir a tomarte una ducha, hoy ha sido un duro día de trabajo.

Se levantó del sofá. Huir era todo lo que le quedaba. Refugiarse en la pequeña ducha y obligarse a ver la realidad. Taehyung no había tenido la misma idea en la cabeza. Y quizás hacía bien. Eran mayores ya, besarse, tener algunos contactos no significaba que fueran algo. No implicaba que tuviera que haber una relación más allá de ellos. Incluso si Jaemin existía. Ellos habían decidido ser padres del pequeño por separado. Bueno, Taehyung había decidido ser su padre y Jungkook solo aceptó porque, hasta que Kim no encontrase trabajo, él sería el sustento económico de ambos.

Aunque no negaba que la idea de ser una bonita familia de tres le encantaba.

Cuando estuvo a los pies de la escalera, sintió como una mano se aferraba a su brazo con fuerza. Sus ojos se aguaron ligeramente. Respiró, necesitaba encontrar ese espacio de paz. Esa tranquilidad.

Quería negarse al toque de Taehyug, quería alejarse en ese momento. Sin embargo, era débil ante Taehyung. Si él lo retenía, no sería capaz de irse. Porque no quería hacerlo realmente. Su cuerpo le exigía que se girase y atrapase entre sus brazos al castaño. Todos sus sentidos reclamaban al modelo. Pero él no podía hacer todo eso. De hecho, no podía hacer nada. Se encontraba en tierra de nadie, deambulando sin conocimiento a la espera de algo. ¿Sería una señal? ¿Una palabra? Solo quería un mensaje claro. Lo necesitaba para poder dejarlo todo atrás.

De nuevo, el silencio se instaló entre ellos.

- Jungkook - volvió a llamarlo Taehyung. Quizás esperando a que este se girase, pero no lo hizo -. Jungkook, tú... ¿realmente quieres que seamos pareja? ¿Pareja como novios?

Las experiencias vividas dejan una marca en cada persona. Hasta ese momento, Taehyung no se dio cuenta de cuánto lo había afectado su primera experiencia con el amor. Confesarse y recibir desprecios, burlas. Inconscientemente, Taehyung había generado miedo al amor. No quería sentir eso, tampoco quería que alguien lo sintiera por él. El amor podía existir, pero Taehyung no lo quería cerca. Recordaba cada una de aquellas palabras. Cuando se descuidaba, algunas frases resonaban en su cabeza. Las había memorizado a base de escucharlas tanto.