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- Espera -la frené antes que saliera del coche

- ¿Qué pasa?

- Tú eres consciente que cuando cruce esa puerta, tu padre, tus tíos, tus primos y no hablemos ni de tu abuelo me van a querer matar -una sonrisa estaba amenazando con posarse en su rostro- yo no me río Anaju, he dejado embarazada a su niña

- Su niña ya tiene 26 años, y si aún no saben que follo y que lo disfruto pues el problema es suyo -enarqué las cejas- además si te van a joder, tampoco me parece tan mal -me guiñó el ojo y salió del coche para dirigirse hacia la entrada

Salí del coche lo más rápido posible y llegué a su lado justo en el momento en que su abuela abrió la puerta.

- Cariño -la abrazó al verla- que susto nos distes ayer

- Lo sé, lo siento -se separó de sus brazos y entró en la casa donde todos estaban mirándonos fijamente

- Hugo, cuanto tiempo -me estrechó entre sus brazos y me tranquilicé al ver que le seguía cayendo bien

- Lo siento por haber creado todo este lío -le entregué 4 botellas de champagne en una bolsa para toda la familia

- No hacia falta que trajeras nada

- Nunca hay que presentarse con las manos vacías

Entré aún más y fui saludando uno a uno a todos los integrantes de la familia hasta que llegué a su abuelo y un nudo se hizo en mi garganta.

- Hombre pero si el padre de la criatura ha llegado -me pegó dos fuertes golpes en la espalda- tenía muchas ganas de verte -dijo con una sonrisa muy falsa pero lo entendía había dejado a su nieta preñada y había hecho que cogiese un taxi sola durante un montón de horas

- Papá -apareció Teresa- no asustes al chico

- ¿Asustar, yo? Eso nunca

- No pasa nada Teresa -intenté poner mi mejor sonrisa

- Todo el mundo a la mesa que la comida se va a enfriar -dio un par de palmadas la abuela obligando que todo el mundo se sentase

A mi lado derecho se encontraba Anaju y mi lado izquierdo uno de sus primos que tenía 2 años menos, delante mío se encontraba Cristina y su marido y eso hacía sentirme más protegido.

Los platos no dejaban de ir de un lado a otro, y la mesa estaba llena de ruido y de risas, parecía que el momento incómodo ya había pasado y ahora tan solo había buen rollo.

- ¿Me podéis pasar la carne? -preguntó Anaju

Me pasaron la bandeja, le puse 4 trozos grandes y la miré para saber si quería más

- Hugo me vas a hacer engordar aún más como sigas así

- Tienes que comer para dos y sobretodo ahora

- Para dos, no para 4, mira como tengo el plato -la situación le estaba divirtiendo

- Mejor que sobre que que falte -rodó los ojos y empezó a comer

- Hugo, mañana hay las carreras de los mini tractores -mencionó su tío- ¿Vas a participar?

- No, no lo hará, hay que saber utilizar esos cacharros y él no tiene ni idea -respondió Anaju

- Yo le enseñó -dijo uno de sus primos adolescentes

- No -respondió ella con una mirada asesina

- Que responda el muchacho, que para algo tiene boca -dijo su abuelo y de repente todas las miradas se posaron en mi

Miré a Anaju y en sus ojos vi un "ni te atrevas a aceptar", pero me tenía que ganar a su familia después de todo lo que había pasado y si eso quería decir tener que subirme a un mini tractor, lo haría.

- ¿A qué hora es la carrera? -dije con mi mejor sonrisa y todos aplaudieron al ver que me animaba menos Anaju que resopló

- Como un niño pequeño eres, como un niño pequeño -murmuró





POV ANAJU

- Mañana no os paséis con él -le dije a mis tíos mientras veíamos como Hugo estaba con mi primo Javier en el granero aprendiendo a utilizar ese cachibache

- ¿Ana quién te crees que somos?

- Lo sabéis muy bien, y él ha entrado en vuestro juego porque quiere volveros a ganar, así que aviso, como mañana Sofi se quede sin padre, también se quedará sin sus tíos abuelos...

Hugo arrancó y empezó a dar vueltas por el terreno, se le veía incómodo, estaba sudado y con las manos y cara llenas de grasa a causa del motor.

- ¿Cómo lo lleva? -llegó mi abuela a la sala

- Ahora ya sabe girar sin que se le cale -respondió uno de mis primos riéndose

- Pobre hombre, lo que está haciendo por ti...

- No lo esta haciendo por mi, lo está haciendo por vosotros

- Ana, cariño mío, quiere que nos vuelva a caer bien para que tenga nuestra aceptación

- Pero él os cae bien

- Lo sé, pero él se piensa que no -y con su taza de café se fue a sentar junto a mi abuelo

No podía dejar de mirar como le iba, mentiría si dijera que no estaba preocupada, no quería que se cayese, y en esa carrera lo más normal era que los más débiles se cayeran.

Fui a la cocina y cogí una botella de agua para llevársela a esos dos, llevaban como tres horas montando y trucando los motores, lo único que había de bueno, era que Hugo era un friki de las motos, pero la desgracia es que no tenía ni idea de los tractores viejos.

- ¿No os tomáis un descanso? -le di el agua- ya son casi las 8 de la noche y de aquí nada nos iremos a casa Hugo

- Un ratito más -dijo el mencionado

- No -miré a Javier

- Yo creo que ya estás preparado -dijo mi primo

- Ya lo has oído, venga a coger las cosas que nos vamos a casa

- Vale mamá -me respondió burlón Hugo

- Sí sí tu búrlate, pero mañana cuando te duela todo no me vengas llorando


POV HUGO

- Te venía a dar las buenas noches -aparecí por su puerta- Te traigo una manzanilla que he leído que va bien para el embarazo 

Me acerqué hacia su cama donde estaba con la espalda apoyada en el cabecero, le di la taza y dio unas palmaditas a su lado del colchón para que me sentase.

Dirigió la mirada a su abdomen y la acarició, con toda la confianza hice lo mismo y le di un beso a su barriga para notar como Sofi daba una pequeña patada y los dos tan solo al ver lo que había provocado reímos.

- Ya me has despertado a la niña -dijo burlona

- Es nocturna como la madre -enarcó las cejas

- Pues cómo sea así cuando nazca ya me sé de dos que no dormirán

Nos quedamos callados, tan solo mirándonos y ella decidió poner su mano sobre la mía.

- Hugo, mañana ves con cuidado por favor

- Ana no te preocupes

- Sí que lo hago, no quiero que Sofi se quedé sin su padre

- Está todo controlado

- No te lo crees ni tú... Eres un hombre de ciudad, lo más parecido que te has subido a algo así ha sido una moto, y no especialmente de las baratas

- No me seas exagerada

- Déjame serlo, estoy embarazada es el único momento donde le puedo dar la culpa a las hormonas -nos reímos- ¿Sabes que no tienes por que hacerlo no?

- Lo sé, pero si ahora indirectamente voy a pertenecer a la familia Calavia tengo que hacerlo -suspiré

- ¿No te haré cambiar de opinión, no?

- No -me acerqué a su barriga y le di un beso- buenas noches princesa -la miré a ella y poco a poco me acerqué a su rostro -buenas noches Anaju -y le di un beso en su frente para irme a dormir

Siempre ha sido ella // AnahugDonde viven las historias. Descúbrelo ahora