Siempre ha sido ella // Anahug

11

POV HUGO

- ¿Entonces me estás diciendo que no te gusta Tokio? -pregunté indignado

Eran las dos de la madrugada e íbamos andando por el centro de Madrid sin saber muy bien cuál era nuestro destino. Después de haberlo arreglado todo en el taxi nos habíamos ido a comer a una pizzería y ahora habíamos decidido ir a tomar un helado.

- Si te fijas por culpa de Tokio siempre se lía en la serie, no piensa lo que hace -negué

- Porque ella hace lo que siente

- Pero por su culpa perjudica a los otros, ella va tanto de que tiene corazón y que piensa en los demás del grupo cuando en realidad es una egoísta que todo lo que hace es para su propio beneficio

- ¿Pero que prefieres vivir arrepentida o quedarte con las ganas?

- Quedarme con las ganas si se que lo que haré puede hacer daño a terceras personas

- Siempre igual -me reí- Ana tienes que soltarte un poco y vivir con menos miedo por lo que puede pasar -me quedé mirando a nuestro alrededor- no pasa nada por no ser correcta

- Hugo, tenemos 26 años, no podemos comportarnos como unos adolescentes

- ¿Y por que no?¿Dónde está escrito? -me subí encima del muro del puente del rey- si quieres chillar lo haces sin tener miedo

- Hugo bájate -dijo cogiéndome de la mano- te vas a caer

- ¡Ana Julieta! -grité- ¡Somos los reyes del mundo! -se rió

- Venga Jack que no estás en el Titánic

- Se mi Rose -se volvió a reír

- Bájate por favor -seguía cogiéndome de la mano- no querrás que me quede sin mi Jack

Me bajé de un salto, cogí su mano y empecé a dar vueltas sobre nosotros, podía oír su risa de fondo y era el sonido más bonito para acompañar mi vida.

Sin duda su risa era la banda sonora de mi vida.

- Hugo voy a vomitar -consiguió decir entre nuestras carcajadas

- Algún día Anaju me agradecerás que te saqué de tu zona de confort

- ¿Quién ha dicho que esté en mi zona de confort? -me reí

- ¿No lo estás? -levanté las cejas

- No lo estoy -intentó sonar lo más segura posible

- No te lo crees ni tú

- ¿A no?

- No

Entonces me cogió de la mano y empezó a correr hacía no sé donde, ella me dirigía y yo seguía cada uno de sus pasos, y es que a ella la seguiría a cada lugar del mundo siempre de su mano. Empezamos a llegar por una calle donde había diferentes pubs y ella no dudó en ponerse en uno que no había mucha cola.

- Amiga, no vale salir de fiesta -ella me miró de manera fulminante

- No es eso -rodó los ojos- siempre me dices que soy yo la que no entra a los tíos

- Así es

- Pues hoy vas a elegir a un tío cualquiera -ya empezaba a entender por donde iban los tiros- y yo voy a ir a por él

- ¿Así que hoy quieres follar? -se rió

- No me voy a acostar con él, tan solo voy a calentar un poco la cosa

- Es decir que vas a calentar una cosa que después no te vas a comer

- Así es -dijo coqueta

- Uy que zorra te has vuelto

- Una zorra con sentimientos, Huguito, una zorra con sentimientos -y el portero nos dejó entrar

Una vez que entramos nos fuimos a la barra, donde ella se pidió una limonada y yo tan solo pedí una cerveza ya que no íbamos a estar mucho tiempo. Miré a todos y cada uno de los tíos del local buscando a la presa perfecta, el problema es que no había ninguno que llegase a estar a la altura para ella.

- Venga Hugo elige uno -pegaba golpes en la barra- sino voy a coger y voy a elegir al primer tío que vea

- Es que no hay ninguno que me guste

- Por dios uno cualquiera, no me voy a casar con él

Volví a pasar mi mirada por todos los hombres que vi, y hubo uno que se convierto en la presa perfecta.

- Ese -señalé con la copa a un chico que estaba en la pista de baile

- ¿Quién el moreno? -asentí- pero si está bailando con una pedazo de rubia

- Pues ya le puedes estar levantando el ligue -rodó los ojos

- Eso no es justo, no está bien -enarqué una ceja- joder vale, lo haré

- Así me gusta

Antes de ir, me miró fijamente, se levantó un poco más la falda, se colocó los pechos, me guiñó el ojo y se fue. Yo silbé ante lo que acababa de hacer y ella tan solo se giró y me sacó el dedo de en medio.

Ví como pasaba por al lado del chico y "sin querer" chocaba un poco con su brazo, el chico que giró y la miró para saber quién era la persona que acababa de interrumpir su baile. Cuándo mi amiga consiguió que el chico encontrase su mirada tan solo le sonrió de manera coqueta y se mordió el labio para ponerse de espaldas y empezar a bailar. Sus caderas empezaron a ir de un lado a otro mientras ella llevaba sus manos a su pelo para acariciarlo y después bajar su manos a su cuerpo. Se giró un poco y miró de manera coqueta al chico, el cual ya había perdido totalmente el interés en la rubia, sino que no le podía quitar la mirada a mi mejor amiga. Anaju siguió moviéndose al ritmo de la música, pero cada vez lo hacia más sensual y todos los chicos ya no quitaban su mirada fija de ella. El moreno se apartó de la rubia y se acercó hacia Ana, ella se había puesto de espaldas a él y el chico no dudo en coger su cintura para acercarla a ella. Mi amiga ante ese gesto sonrió al saber que había conseguido la primera parte del reto, ahora ya tan solo le faltaba dejarle con las ganas. Sus cuerpos ya no dejaban ni un solo centímetros entre ellos, ella se giró y puso sus brazos al rededor del cuello del chico dejando sus bocas muy cerca, demasiado para mi gusto. Las manos de él bajaron al culo de ella y e hizo que sus cuerpos volviesen a acercarse más. Ese moreno ahora mismo estaba siendo el chico más envidiado del local y yo no podía quitar mi mirada del cuerpo de mi amiga, esperando a ver si tenía que ir a rescatarla en cualquier momento por si él quería sobrepasarse. Entonces él bajo su cara al cuello de Anaju, dejando que la mirada de mi amiga y la mía conectasen, ella me guiñó el ojo y yo tan solo pude levantar la copa en modo de rendición por mi parte. Y ahí llegó el momento donde el chico se lanzó a sus labios y ella los aceptó sin ninguna preocupación, la había visto liarse con muchos chicos a lo largo de nuestros años de amistad pero esta vez había algo que no me convencía. Quité la mirada para beberme todo el líquido que quedaba dentro de mi botella y cuando volví a mirar vi como Anaju me miraba mientras se besaba con ese chico, intenté poner mi mejor sonrisa y ella ante ese gesto, se volvió a centrar en el chico, para cerrar los ojos y seguir besándole.