[Pueden ver mi video sobre "El hombre de hielo" antes de comenzar 👆]
Érase una vez un muchacho y una muchacha. El muchacho tenía dieciocho y la muchacha dieciséis. Él no era notablemente apuesto y ella no era especialmente bella. Eran solamente un ordinario muchacho solitario y una ordinaria muchacha solitaria, como todos los demás. Pero ellos creían con todo su corazón que en algún lugar del mundo vivía el muchacho 100% perfecto y la muchacha 100% perfecta para ellos. Sí, creían en el milagro. Y ese milagro sucedió.
(“Sobre encontrarse a la chica 100% perfecta una bella mañana de Abril”, de Haruki Murakami)
Esta vez Gabriel sí llegó a tiempo. Es más, llegó antes que la profesora y acomodó todas las sillas alrededor del salón. Estaba emocionado porque esta vez estaba más que preparado para hacer comentarios inteligentes y todo gracias a Axel.
No podía evitar sonreír al pensar en él. Aunque había extrañado sus ojos azules y ver cómo se iluminaban al contarle sobre el famoso “Hombre de hielo”, pero en su voz también se notaba la pasión que le ponía a un acto tan simple como explicarle un cuento. Gabriel incluso cerró los ojos en un punto de la conversación para poder imaginar su rostro, sus expresiones, y se encontró haciendo una pregunta tras otra con tal de no dejar de escucharlo. Era adictivo, Axel era adictivo y Gabriel podía fácilmente volverse adicto –si es que no lo era ya, ¿cuántas dosis se necesitan para considerarse uno?–. Colgaron una hora y treinta y cinco minutos después. Gabriel no recordaba haber hablado tanto tiempo con alguien en una llamada telefónica.
Suspiró, casi sin darse cuenta y antes de poder evitarlo.
La profesora llegó unos minutos después y lo miró con sospecha. —Gabriel —saludó, con una mueca.
—Profesora —Gabriel no podía dejar de sonreír. Era feliz, ¿podían culparlo?
Pronto los demás comenzaron a llegar, Axel primero por supuesto, y la clase comenzó.
—¡Yo, yo, yo! —Sarah fue la primera en gritar—. Yo, profesora Lu, yo. Yo sólo quiero decir que no entiendo el final de la historia. ¿Qué sucedió realmente?
Gabriel puso los ojos en blanco y sonrió cuando escuchó la risita de Axel a su lado. No pudo evitar hablar, lo hizo antes de incluso ser consciente de estarlo haciendo: —Se volvió una mujer de hielo.
—¡Dah! —Sarah se burló y se golpeó la frente—. No seas tonto, nuevo. Para empezar, él no era realmente de hielo. Si tú no entendiste ni siquiera esa metáfora puedo ver desde aquí tu cero de hoy —y luego hizo una mueca sospechosamente parecida a una sonrisa.
Los ojos de la profesora se abrieron demasiado y Axel se sentó un poco más derecho; pero antes de que cualquiera de los dos pudiera hablar, Gabriel ya estaba respondiendo: —Creo que la que no entendió la metáfora fuiste tú. Evidentemente él no es un hombre literalmente de hielo. Simplemente era un hombre frío y retraído. Y ella lo dejó todo por él, amigos y familia, incluso sin conocerlo. Vivieron juntos y al inicio ella sí se sentía extraña por tanta frialdad, metafóricamente hablando, pero termina por adaptarse de cierto modo. Hasta que no aguanta más y le pide que hagan un viaje, pensando que así su relación puede mejorar. Y ella elige precisamente el Polo Sur. ¿Por qué?
Sarah quiso contestar, pero Gabriel siguió hablando:
—Fácil. Porque si él era un hombre de hielo, ese sería un lugar ideal para él. Porque a pesar de que buscaba su felicidad, ella seguía pensando primero en la de él. Llegados al Polo Sur, el hombre de hielo cambia. Se vuelve "cálido", por así decirlo, y comienza a convivir más con la gente, se vuelve social y sale más de su caparazón; mientras que ella se queda encerrada en casa, sola porque no conoce a nadie ni sabe hablar el idioma del lugar. Él, en efecto, es feliz ahí, es el lugar ideal para él, lo que buscaba. Y ella, ella se vuelve fría como él siempre fue; sólo que a diferencia de él, ella no es feliz así. Él es feliz en el frío, pero ella se congela. Por eso hablo de una mujer de hielo, siendo todo metafórico.

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Enamorándome del nerd (o Un disléxico enamorado)
Dla nastolatkówTERMINADA» Axel es un bibliófilo: él ama los libros, la lectura, los mundos a los que unas simples letras te pueden llevar. En pocas palabras, Axel es para todos un Nerd. Gabriel es uno de los chicos más guapos del Instituto. Es atractivo, es popula...